Evento Nº1 - Posada en el Sur

Recuerdo del primer mensaje :


En cuanto estuvieron listos, partieron en el microbus. A medida que recorrían la ciudad, veían todo de la misma forma en que solían hacerlo anteriormente. Al menos, por unos minutos fue así. Pero, por momentos parecían entrar en barrios un poco descuidados. Con tiendas que tenían sus vidrios rotos, semáforos que no funcionaban, y personas que parecían borrachas y no tenían cuidado con el tráfico. En esos barrios extraños, la ciudad parecía convertirse en un lugar olvidado, vacío y absolutamente derrumbado. Haon, quien manejaba, conducía mas rápido por estas zonas.

-Creo que por su nueva condición pueden percibir algunas cosas que antes no podían. En algunas áreas, el mundo que conocen se convierte en una especie de frontera donde hay mayor presencia de Caídos. Frontera, entre el mundo humano y el Pandemonium. En estas áreas, los humanos son atacados con mayor frecuencia. Si entrenan su percepción podrán, por ejemplo, distinguir a un vástago de un humano.

Por varias horas, tanto Haon como Noah los dejaron hacer lo que querían. Hablar, jugar, comer, mirar por las ventanas, etc. Era un guía alegre y al menos por ahora no parecía un guardián tan celoso como VI. Cuando comenzó a oscurecer y todos empezaban a tener la necesidad de estirar un poco las piernas, el paisaje se volvió bastante más rural. Tomaron una curva ascendente con un precipicio de un lado y una muralla de piedras por el otro y al ensancharse la ruta y aplanarse el terreno, vieron árboles. Y entre las ramas, las primeras estrellas. Luego de unos 15 minutos más, los árboles se acabaron y pararon el microbus. Las luces de una posada se encendieron al oscurecer un poco más.



-Bien… llegamos. Tenemos reservaciones, con sus nombres y apellidos les van a dar algo cómodo para que se cambien la ropa, seguramente. Relájense un poco y disfruten. Mañana les contaré algo sobre este lugar -comentó al pasar.

Acciones:

-Los que deseen ir al viaje, deben aceptar cooperar con Noah para que el viaje salga bien.
-Utilizar cualquier lugar y servicio de la posada.

Notas:

-Para que a Tenma se le permita postear nuevamente, debe hacerlo hoy.
-Si se les ocurre salir de la posada deben avisar a Noah quién se va, con quién, y a dónde.

Alex Slade

Alex tenía tres defectos bien marcados, el primero, cuando conocía a alguien enseguida se ponía a analizarlo y armaba supuestos sobre esa persona sin ni siquiera conocerlo. En segundo lugar, solía meterse donde no lo llamaban, en general con buenas intenciones, pero le daba muchos problemas eso. Y en tercer lugar, era impulsivo, no pensaba mucho las cosas antes de hacerlas, las hacía.  Por suerte las palmadas a Eitan no provocaron ni una mala reacción ni una buena, mejor eso a que provocara una mala.  Sus pensamientos se vieron interrumpidos cuando Eitan se sento sobre la arena y dijo unas palabras, que no estaban dirigidas a nadie, sino a la nada misma, pero no carecían de verdad... era cierto lo que decía aquel chiquillo que solo queria divertirse y no tener responsabilidades.  Eitan se levanto, se saco las hojotas y se fue a la orilla del mar.  De seguro estaría bastante fría.  De pronto Taiga grito otra frase de la nada que hizo saltar un poco a Alex, no se lo esperaba; que era bastante cierta.  Otra chiquilla tímida, asutadiza, que gritaba a los siete vientos lo que pensaba.

- No deberías avergonzarte, es una frase muy cierta y esta bueno que te expreses.  Aunque debo admitir que me distes un buen susto, un grito asi en medio del silencio.  Riendose. - Es la segunda vez que te disculpas conmigo en este rato, no es necesario que te disculpes por todo, vos podes expresarte como cualquier otro, siempre que sea en buenos términos.  Sonrio y se acosto en la arena boca arriba, con sus manos debajo de la cabeza, contemplando las estrellas, mientras esperaba que el resto del grupo decidiera que carrera iba a elegir.  Parte de lo que dijo Taiga le quedo dando vueltas en sus pensamientos "...todo pasa por algo..." es lo que pensaba Alex desde que había llegado a la posada, pero de a poco empezaba a descreer otra vez en todo lo que estaba sucediendo.  Que demonios estaba haciendo en ese lugar, perdiendo tiempo, debería estar buscando a su hermano.

Todos escribió:

SunakoSan escribió:

Sabía Noah, que las palabras de Eitan habían sido dirigidas al viento, quizás sólo era una manera de desahogarse. Pero, se sentía mal por no decirle nada al chico. Entonces, simplemente se acercó a él y le miró un segundo. Se tomó la barbilla.

-Mmmm... -pensó.

Miró a Eitan un poco más, y por fin dijo algo.

-Eitan, está tan claro como el agua. Nosotros y los humanos vivimos en la misma sociedad. No entiendo por qué -a pesar de que la frase quedó cool- dices que abandonaron la sociedad, si desde el comienzo hemos dicho que la idea es intentar que retomen su vida anterior con la menor cantidad de secuelas posibles. Y de hecho fue por esa razón que VI encontró la forma de que no perdieran sus recuerdos como humanos -dijo el peliazul- pero la pregunta es ¿qué tanto van a dejar que les ayudemos? -finalizó.

Alex escribió:

Taiga Ibuki

Taiga en verdad estaba nerviosa y un poco avergonzada le habia hecho pegar un buen sustito a Alex, pero sonrio y dijo

-Si se que no tengo que pedir disculpas aveces, pero solo me sale, asi que deberias de empezar a acostumbrarte jajaja

Mucho que decir no podia los nervios la comian por dentro.
Se puso a pensar si lo que habia dicho estaba bien o fuera  de lugar, al ver a Alex acostarce sobre la arena hizo lo mismo y le pregunto

-Tu crees que estuve bien en lo que dije?-

En verdad no queria que piensen que era una loca o que era metiche, ella solo queria ayudar, pero a la misma ves se puso  a pensar si sera verda que todo para por algo y si es por el cual ellos tuvieron otra oportunidad, de seguro seria porque tienen algo que hacer.

Noah escribió:

Aragaki Tenma

Aunque llevado a rastras y con mal humor y algo de mareos debido al alcohol, que se le había subido a la cabeza, llegó con mirada somnolienta. Tenía ganas de dormir y mandar a todos al diablo con tal de que lo dejaran en paz. No mucho antes de que el ególatra tocara su puerta, había vomitado un poco en el inodoro. El anaranjado y pastoso color del vómito permanecía en el baño y comenzaba a apestar, debido a que no pudo jalar la palanca. Su prioridad era salir de allí cuanto antes. Le importaba muy poco la contradictoria opinión del ególatra, que llegó a atrapar a pedazos en la conversación con el chico uke y simplemente comenzó a fastidiarse.

Tomó la hoja, la examinó y aunque se sentía a punto de dejar caer su cuerpo en la arena, notó algo: ¿cómo era posible que un lava-inodoros se convirtiera en cirujano? Entonces, ¿si fuese vagabundo, terminaría siendo un gran arquitecto por su habilidad de construir casas de madera y lámina? No lo entendía, pero realmente, no quería pasar un minuto más allí.

-Repartiré periódicos- dijo directamente al tipo ególatra- -¿Ahora puedo irme? Quiero vomitar y dormir- y sin esperar una respuesta, se alejó lentamente, esperando no vomitar en su camino a la habitación.

Noah escribió:

Eitan Chassier

Un grito le hizo bajar nuevamente su mirada, volteando hacia el origen del sonido. Taiga gritaba algo a todo pulmón, por lo que el pelilila abrió los ojos con sorpresa mientras se rascaba la mejilla, con una pinta que quería decir "¿Qué bicho le picó?". Instantáneamente, su rostro para en la dirección en que estaba Noah. El joven le replicaba por sus palabras, con Eitan mirándole a la cara con unos ojos que demostraban pereza.

Dejó que Noah hablara sin ninguna interrupción de su parte. Al finalizar, el pelilila levanta ambas manos abiertas, tocándose una a la otra perpendicularmente en señal de "tiempo".

Oye, oye. Bájale dos, Nova.

El joven tenia una visión un tanto diferente a todo lo expuesto por el peliazul: así como quizás pudiera tener dudas por preguntar como cualquiera, también tenía sus objeciones a otras por lo que sabe. Dejó salir un suspiro: la situación le generaba un enorme fastidio... el retomar temas una y otra vez no eran para nada de su gusto.

A ver, a ver... como se lo dije una vez a Dendé...

Se rascó la cabeza con su diestra mientras miraba hacia arriba, realmente sin mucho interés de recordar.

Somos mansos, pero no mensos. Sabemos diferenciar cuando una cosa que se dice tiene sentido y cuando otras no. Ya sabes.

Se encogió de hombros.

No sé, pero eso de "retomar su anterior vida" suena raro. En realidad, ¿cuándo dejamos de disfrutar de ella? Sé que perdí uno que otro recuerdo de "mi vida" -denotando comillas con sus dedos- antes del accidente, pero después de que nos encontraron como supervivientes, seguimos con nuestra rutina hasta ahora.
Creo que no hay nada que retomar por eso. Tanto Dicky como yo seguiremos siendo los mismos, así que el trato con los humanos no cambia.

Agregó. Luego lanzó una sutil mirada a Joan y regresó su atención a Noah.

Ne. No sé si todos ustedes no se saben explicar o nosotros no sabemos entender, pero aún entre nosotros hay personas que aún no creen en todo el cuento que nos han estado metiendo durante éstos días.

Guarda sus brazos bajo la tela de las mangas de su yukata.

Yo les creo un 50-50... pero sólo por lo que he visto, más no lo que he escuchado. A veces hasta lo que dice uno y lo que dice otro no cabe para pensarlo... Me causa cortocircuito.

Puso momentáneamente sus labios muy juntos, pero no tarda en continuar.

Seremos vástagos o lo que sea, pero aún pensamos como humanos. Supongo que lo que decidamos sobre dejarnos ayudar o ayudarles, depende de la confianza que nos den; aunque en mi caso, te digo que los estudios o el trabajo no son lo mio. Además, me estoy dando vacaciones!.

Se giró, soltando sus brazos y subiendo sus manos hacia detrás de su cabeza, entrelazando los dedos y mirando al horizonte con fastidio de recordar ciertas cosas.

Hasta hace poco, estuve trabajando en una tienda de comida rápida a medio tiempo. No creas que estoy emocionado de ir día por día a usar una máquina registradora sólo para comprar una consola nueva. Déjame ser!

Exclamó en caso de que el motivo de Noah para hacerle hablar fuera por lo de la lista de carreras. Se volteó de nuevo a mirar al peliazul.

Por cierto... ¿no tendrán otra mansión que esté más cerca de la civilización? O por lo menos, déjenme buscar todas mis cosas. No tener nada fascinante que hacer, me mata más que un avión.

Alex Slade

Taiga respondio al interrogante de Alex y luego se recosto también en la arena junto a él.

- Estuvistes bien.  Despues de todo es parte de tu forma de ser, y uno tiene que ser fiel a como es uno mismo, no a como quieren verte los demás.  Se quedo unos segundos callado y continúo... - Además soy muy adaptable, seguro me acostumbro.  Sonrio.

En ese momento Tenma se acerco a Noah, siempre con su actitud tan desagradable.  Termino diciendo que quería ser repartidor de periódicos.  De seguro esperaría a que salga el dueño de la casa y le tiraría el periodico en la cara.  Se fue dando tumbos y Alex observó que Noah se acercaba a Eitan, seguro querría convencerlo... pero probablemente fracasaria, no parecia ser la clase de chicos que sea facil de convencer.  No llegó a escuchar lo que hablaban estaban medio lejos, pero estuvieron un buen rato conversando.

Noah,Dereck, Todos escribió:

Gabrielle Cohen

Estaba a punto de disfrutar la compañía de Dereck cuando Noah apareció para llevarlo con  los demás... suspiró, ya sería otro día.

-Pues vamos, Dereck- le sonrió un poco más desenvuelto, pero no mucho.

A él no le hacía mucha gracia las coincidencias como aquellas, suspiró un poco cansado y se mantuvo en silencio mientras los otros tomaban sus diferentes decisiones, él tenía que pensarlo, estaba acostumbrado al trabajo pero aún había algo que no le gustaba... al parecer no era el único que no entendía, ya siendo varios implicaba que no era él el que no entendía sino el interlocutor no encontraba el camino adecuado. Se recargó ligeramente en el hombro de Dereck, era una dicha que fuera más alto que él.

Esperó tranquilamente a que le tocara ver la lista, la cual compartió con Dereck, frunció el ceño y miró a Dereck...

-¿Qué elegirás Dereck?- preguntó un poco tímido, quizá podría seguirlo -Yo estoy entre tres actividades... el último lugar cocina... soy bueno pero no me veo de chef o algo así...- volvió a mirar a Dereck para saber que elegiría él -Quiero seguir estudiando... podría ser algo loco... ser un extra... ojalá sea el árbol- dijo en son de broma -o quizá estilista... pero no sé que tan bueno puedo ser.... ¿Tú que piensas Dereck?- lo que le dijera el chico lo haría, parecía que deseaba enorgullecer a su amigo.

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Joan Adele Von der Rose



Una vez que terminó de escuchar a Noah, y junto con ello al resto de sus compañeros, ella se quedó pensando; los argumentos que le ponían no la convencían.

Adele suspiró profundamente, seguía sin ver coherencia en lo que decían, cuando hubo momento de poder hablar lo hizo.

-En verdad sólo alguien que ha dejado de pensar en cómo piensan los humanos podría igualar a los humanos con animales- dijo con infantil frustración.

-aun cuando estudie medicina, eso no quiere decir que me eduque a tratar a los animales, a menos que el paciente sea un “animal”- suspiró.

-Además lo que ahora menos quiero es pensar en doctores… o terminaré mal - suspiró, su único ojos mostró una profunda tristeza y desgano. Tomó aire y decidió retomar con sus palabras.

-Quiero estudiar biología, siempre me ha gustado aún más que leer- hizo una pausa.

- y no quiero molestar a mi familia con mis tonterías- dijo con tierna determinación. -y mucho menos tener una deuda con señor Deben- agregó, - si tengo que estudiar continuaré con el bachillerato, y me meteré en deportes para poder tener mejor condición y tener dinero para estudiar Biología; de todos modos mi mamá ya me había dado las bases para comenzar por mi parte- finalizó; al parecer no parecía negarse a estudiar dos carreras a su modo.

-Aunque la verdad dudo mucho ya que con lo que he hecho pueda retomar mi anterior vida… o vivir feliz sin pensar que ya no soy humana… y que ahora estoy condenada a más mentiras en mi vida, saber que ya no hay más marcha atrás en nada.- miró al mar, su mirada era nostálgica y en determinado momento volvió su atención a Noah.

-No creo que exista ayuda sin un costo y más viniendo de extraños… por eso en mi caso yo no puedo confiarme en ustedes, ni aceptar su ayuda como lo piden, y menos cuando de todo lo que han dicho, nada es claro aun... - contestó a la pregunta que le habían planteado a Eitan. Al decir eso ultimo se vio un cambió en su semblante, como si perdiera algún brillo de entusiasmo... se estaba cansando de lo mismo.

Soar Grey

Estaba ya algo cansado, aunque el ver a Joan, quizás la chica más desarrollada de allí, a años luz de VI, y estando desde su posición, analizó su cuerpo lentamente sin dejar que nadie se diera cuenta de ello, puesto que casi siempre observaba con su vista periférica con el fin de poder ocupar tanto espacio con su vista como le fuera posible. Qué problemático era todo. A esas alturas se conformaba, sin duda, con que le dejaran volver. No tenía nada por hacer en ese lugar, y lo de la carrera era la excusa perfecta para volver a ver chicas de más de 32.

Terminó por ponerse en pie sacudiéndose la arena, mientras se dirigía ahora a Noah.

-¿Qué pasa ahora que somos "vástagos"? ¿Existe alguna razón por la que debamos tener cuidado a la hora de relacionarnos? Digo, al momento de tener sexo me seguirá funcionando, ¿cierto? -indago con leve preocupación

Alex Slade

Dicidió levantarse y acercarse a Noah, quería escuchar de que tanto hablaba con Eitan, en definitiva todo lo que dijeran los demás podría ser de utilidad para su analisis sobre la situación.  Camino hacia la orilla, no emitio palabra solo se límito a escuchar de forma disimulada lo que hablaban.  También se acerco Soar, y Joan, y por allí andaba Gabrielle hablando con Dereck, aparentemente esperando que decidia Dereck en cuanto a las carreras para elegir también.  Le causo gracia la pregunta que le hizo Soar a Noah.  Cuanto todos terminaron de hablar y se produjo un silencio, Alex aprovecho para dar su opinion sobre algunas cosas.  Entonces empezó a hablar con un tono elevado de voz para que todos los ahi presentes escucharan.

- A ver compañeros "vástagos".  Pronuncio la palabra con un tono irónico. - Calmensen un poco, esto parece un loquero ya.  Aca hay dos posibilidades... Empecemos por la primera y la mas probable: Supongamos que todo esto es mentira, que es un chiste de mal gusto de algún programa de televisión, algún tipo de Reality, o que estas personas se escaparon de algun manicomio, como mucho en unos días cada uno retornara a su rutina y esto quedara como un simple recuerdo de como creimos tantas payasadas, y nos vamos a reir de nosotros mismos.
Tomo un poco de aire y continuó.
- Pasemos a la segunda posibilidad: Si todo esto fuera verdad, hay dos cosas a tener en cuenta. ¿Alguno de ustedes sabe como es ser un vástago y no necesita ninguna guía?. Realizo una mirada fugaz a todo el grupo. - Lo dudo.  Segunda cuestión, si hay gente que nos quiere cazar. ¿Ustedes solos van a poder contra ellos? Volvio a mirar a todos y contunúo. - Por favor no se engañen.
Miro a Eitan.
- Eitan vos decís que vos y dicky van a ser los mismos y que el trato con los humanos no cambia.  Creo que no estas entendiendo la profundidad que tiene todo esto, dificilmente puedan seguir viviendo como antes.  Por ejemplo, vas al colegio como todos los días, alguno viene a buscarte pelea, y de pronto te encontras revoleando por los aires a una persona que es mas fuerte que vos... como hizo Noah con Tenma, como pensas que te van a ver los demás... no sería normal y ahí ya tenes un cambio con el trato con los humanos.  Porque ya no te verían como un chico más, sino como un fenómeno, algunos te admirarian, otros te temerían.  Y en general cuando se presenta algo desconocido a la gente las reacciones no suelen ser buenas, entonces vas a necesitar probablemente que te ayuden a controlar esos poderes que pueden llegar a surgir.
Volvio a tomar aire.  Y siguio con su teoría.
- O que pasaría si te encuentran esos cazadores que quieren matar a los vástagos, no creo que puedas tener la vida de antes si tenes alguien detrás tuyo que quiere asesinarte.  Por favor, razonen un poco las cosas, si realmente somos vástagos no solo nuestras vidas no van a ser las mismas, sino que el trato con los humanos también se va a ver afectado, y es probable que tengamos que pedir ayuda a Dendé y sus secuaces.
Miro a Joan.
- Pero estoy de acuerdo con vos Joan, en que esa ayuda que nos pueda proporcionar de seguro va a tener algún costo.  Y miro a Noah a los ojos en tono desafiante.
Para finalizar dijo. - A ver si dejan de tomarse todo tan a la ligera y empiezan a analizar con mas profunidad la situación, por qué si la segunda posiblidad es la real, ni se hubieran gastado en tomar esa sangre porque no creo que duren mucho con esas actitudes.
Se volvio a recostar en a la arena, pero esta vez cerca del grupo para ver las reacciones del grupo y como seguía esto.

Taiga Ibuki

Se puso contenta al escuchar la respuesta de Alex, hasta que llego el turno de Tenma para seleccionar su carrera, Taiga penso que el muchacho diria algo inapropiado o que armaria algun tipo de lio, pero el solo lo que haria y se retiro, parecia algo enfermo pero ella prefirio no decir nada, ya que la unica ves que hablo con el no tuvo una buena reaccion hacia ella parecia que su presencia le molestaba asi que siguio mirando el cielo sin prestar atencion.

En un momento Alex se levanto de la arena y dijo unas palabras hacia todos, pero Taiga no sabia que pensar sobre eso, ya no queria saber si era verdad o no todo eso y si de algo serviria, en verdad todo eso la estaba confundiendo un poco sobre que queria hacer, se levanto de la arena, sacudio un poco su vestido y se dirigio hacia la orilla del mar dejando que el agua fria tocara sus pies sin que nada mas importara, dejo caer una lagrima por su mejilla, dejando que el mar se lleve su tristeza todo esto la tenia confundida.

Alex Slade

Al fin Dereck mostraba su postura, Alex la esperaba ansioso, lo consideraba el mas centrado de aquel grupo, incluso más que él mismo.  Luego se quedo pensando, y se volvio a reprochar esa forma impulsiva que tenía de hacer las cosas, para que decir a los demás lo que puede pasar o no... apenas los conocía, por que darle importancia a lo que cada uno decida hacer.  Pero a su vez, las actitudes que tomaban algunos, la falta de coherencia en algunas cosas, lo impulso a decir exactamente lo que pensaba como siempre.

Había pasado por varios estados, primero descreia totalmente de toda esa idiotez, por eso en la mansión no había cruzado palabra con nadie y se había mantenido al margen, pero después de la demostración de Deneb y lo de Noah, empezó a dudar de que no fuera cierto, por eso decidió beber la sangre en ese momento.

Cuando llegó a la posada, sentía mucha ansiedad, y se estaba creyendo toda la historia, hasta penso que los destinos de ese grupo de personas estarían enlazados, todos iban en el mismo avión que se estrello, todos sobrevivieron y todos estaban ahi reunidos.  Se sentía como un niño en un cuento fantástico.  Pero a medida que empezo a conocer a algunos de ellos empezo a darse cuenta que eran simples personas, que no tenían nada en común salvo lo de ser vástagos si es que era verdad, y que probablemente después de esa reunion cada uno haría lo suyo y nunca más los vería.

Se levanto de la arena repentinamente y miro a Dereck.

- Es probable que tengas razón Dereck... con lo poco que te conozco ya te considero el mas centrado y quizás el que ve las cosas de manera mas objetiva de este grupo, bah, lejos de ser un grupo, mejor decir, de este lugar.

Luego miro a Noah.

- Solo quiero saber que sigue Noah. ¿Siguen las vacaciones? ¿O ya podemos hacer algo productivo con nuestra supuesta segunda vida? El mal humor se le empezaba a notar. -No me gusta perder el tiempo... quisiera volver a la mansión lo antes posible, necesito acceder a una biblioteca, no gano nada tirado en la arena... es hora de empezar a hacer algunas investigaciones sobre todo esto... nisiquiera se exactamente que significa la palabra vástago, ni la marca que me aparecio en el hombro.  Menos todavía sobre esos "cazadores", probablemente mientras nosotros hablamos ellos ya hayan movido sus fichas.

Se quedo allí, ya de mal humor, esperando una respuesta.

Todos escribió:

Luego de que todos hubiesen elegido una profesión -exceptuando a Eitan- Noah parecía relativamente satisfecho.

-Lo estás haciendo genial, Noah -dijo Haon, burlándose del peliazul- ya casi te odian.

-Me es difícil a mi también. Yo tampoco recuerdo cómo era ser un humano… -se sinceró Noah.

-Me está doliendo la cabeza y me muero de aburrimiento. ¿Por qué no se ocupa él de sus hijos? Después de todo son SU responsabilidad.

-No seas así Haon, necesitan de nuestra ayuda… -le invitó a reflexionar.

El muchacho de alborotados cabellos grises se encogió de hombros.

-A mí no me mires, yo estoy aquí sólo por si tienes problemas.

Haon y Noah fueron interrumpidos de súbito, porque notaron que alrededor de la playa comenzaban a aparecer un número exagerado de animales. Había aves posadas en los árboles, que anunciaban su llegada con graznidos. Había lagartijas y tortugas en la arena, en un número anormal. Además, en las zonas con césped había lirones, conejos y zorros espiando desde los matorrales. Finalmente llegaron a ver hasta gatos monteces, y algunas siluetas de lo que parecían ser perros salvajes o lobos.

Al observar aquello, Noah pareció notar algo más y no pareció contento por todo aquello. Rápidamente volteó a ver al grupo.

-Alguien viene. ¡Quietos! ¡Silencio! -ordenó de forma autoritaria.

Todo el grupo se encontró inmovilizado de inmediato. Además, descubrieron que nadie podía hablar. Luego Noah levantó la mano hacia donde estaban todos, y alrededor de ellos creció una oscuridad que los cubrió y los hizo invisibles en la noche. Noah los había escondido.

Un instante después vieron aparecer sobre la arena una llama roja, en la que se podía ver la silueta de un hombre. Era alguien alto. Cuando salió del fuego pudieron ver sus cabellos rojizos y sus ojos relampagueantes, del mismo color. Aquel sujeto caminó unos pasos, y al ver a Noah habló de forma calculadora.


-¿Un Cazador de alto nivel, tan lejos de las grandes ciudades? Y del Primer Círculo, veo. Nada menos que el Kaiser, Bestellen, el Amo de la Voluntad... -dijo.

Noah trabajó para no parecer nervioso ni sospechoso. Se llevó las manos a los bolsillos y volteó a ver al visitante con toda naturalidad.

-Hace mucho nadie me llama así. Ahora soy Noah… -respondió.

El hombre pelirrojo contuvo su risa y asintió, sin decir nada sobre el comentario de Noah.

-Sí, claro. Como digas, “Noah”. ¿Así te bautizó el traidor de Deneb? Aunque tu organización se haya aliado con los "buenos", tarde o temprano vamos a vengarnos...

-¿Usaste una trampa de animales? -interrumpió Noah- Parece que buscas una presa...

-Ya sabes cómo es esto, hay que comer…

-No mientas… ¿qué trama un Caído en este lugar? Aquí no hay nada interesante -dijo Noah.

El nuevo miró hacia todos lados, sin ver nada extraño por el momento. No parecía asustado de Noah ni mucho menos. Se acercó a él y lo observó sin miedo, como si no hubiese nadie más.

Por su parte los chicos, que estaban “escondidos”, comenzaron a sentir angustia repentina. Como si la sola presencia de aquel ser les produjera incomodidad.

-¿Estás sólo? -preguntó el pelirrojo, como si nada.

-¿Ves a alguien más, Fausto? -contestó Noah, como si nada.

Fausto enfureció de pronto, como si todo el clima de camaradería hubiese sido falso. Frunció el ceño ante la respuesta de Noah.

-No me jodas, ustedes nunca están solos. Los Cazadores de Vástagos son unos cobardes que siempre van de a dos. Y que se aliaron con ese Todopoderoso Dios imbécil que ahora adoran, porque son muy maricones como para aceptar su odio y violencia natural como Hijos de Caín. Por eso vamos a seguir matándolos como perros, como hicimos con la estúpida de tu Inherente. A ustedes, y a sus familias. No está lejos el día de que acabemos con los humanos también. ¿No me vas a decir qué haces aquí, traidor? -dijo con total desprecio.

Aquel hombre esperaba una respuesta del peliazul. Mientras tanto, sacó un cigarrillo y lo encendió con una llama que hizo brotar de su dedo. Ante tamaña provocación, Noah tomó al sujeto por el cuello. Pero el pelirrojo volteó su rostro y clavó la vista a donde estaban los chicos.

-Jaja… si, ódiame y debilita tu poder...

Antes de que Noah pudiese evitarlo, el desconocido apuntó con un dedo hacia donde estaba el grupo. La oscuridad que los cubría comenzó a arder como cuando arde un telón empapado por combustible, y desapareció en seguida. Todos quedaron al descubierto rápidamente.

El pelirrojo zafó del agarre de Noah y los miró a todos, algo impresionado. Se le cayó el cigarrillo de la mano. Inmediatamente después largó una gran carcajada.

-¡Qué insensatez, entonces los tenía Deneb! Pensar que alguien como tú, cuidando niños… -dijo y volvió a reír con fuerza.

Noah parecía preocupado. Aquel ser de cabellos rojizos echó un vistazo más profundo al grupo de jóvenes. Luego comenzó a sonreír y se volvió hacia Noah.

-Vamos Bestellen, hazte un favor y no te metas en esto. No tienes ni la menor idea con qué estás jugando. Esta vez Deneb secuestró mercancía que es nuestra. ¡Estos son para Mefisto, mierda! ¿Qué rayos te propones negándole sus almas? -decía aquel sujeto como si explicara lo más racional del mundo. Como si así fuera el orden natural de las cosas.

Noah hizo silencio. Probablemente quería que Fausto hablara más sobre el asunto.

-Hace años hay un lugar reservado en el infierno para estos, para eso se supone que nos tomamos la molestia de bajar ese avión -comentó- ¿por qué tanto interés de Deneb en unos niños?

-¿Y por qué tanto interés de Mefisto en unos niños? No me engañas, ambos sabemos que descienden de una línea de sangre especialmente pura. Si Mefisto los corrompiera podría usar esa sangre para encontrar la Llave del Arcángel, y asaltar otra vez el Reino de los Cielos -contestó duramente.

-Fausto retrocedió un paso. Parecía no haberse esperado que Noah supiera tanto. Lo observó asombrado.

-Entonces Deneb lo planeó todo… -dijo Fausto, con los dientes apretados.

Sus dos manos se encendieron con llamas rojas crepitantes, y apuntó hacia los chicos. En ese momento ellos vieron que una figura enorme y peluda daba un paso hacia adelante, cortando el paso, y lanzando un rugido de guerra. Era Haon, en su forma de Vástago. Sin dudas podrían identificarlo como un enorme Hombre Lobo, de casi 2 metros y medio de altura.

Fausto lanzó el fuego hacia adelante, y Haon se ocupó de cubrir la trayectoria del ataque con su cuerpo, cayendo lastimado a los pies de todos. Cuando el pelirrojo anunciaba un segundo lanzamiento de llamas, algo lo golpeó rápidamente y con gran fuerza, haciéndolo volar hacia atrás, hacia el mar. El fuego de Fausto se apagó allí, pues se vio humo salir de las aguas. Luego surgió una llamarada idéntica a la que hizo aparecer al enemigo. Claramente, se había retirado como había venido.

Habiéndose ido Fausto, Noah corrió hasta Haon a quien encontró en su forma “humana” otra vez. Sus ropas estaban chamuscadas, y tenía algunas quemaduras de medianamente graves. Cualquiera necesitaría atención médica, sin dudas. Pero Haon parecía fuerte, y era un Vástago. Quizás fuera menos grave de lo que pensaban.

Noah osbervó a los chicos.

-No se preocupen, voy a encargarme de él. Tenemos un botiquín bastante grande en el microbús. Creo... que ya ha pasado mucho por esta noche -dijo.

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Acciones:

-Postear sus reacciones ante lo sucedido.
-Postear qué es lo que hacen hasta dormir en la posada (si es que querían hacer algo).

Alex Slade

Antes de que Noah pudiera decir nada, Dereck recordó algo, se fue corriendo a la posada y enseguida volvio, entregando unos papeles donde había algunas definiciones importantes.  Empezó a mirar el papel.

- Vaya... por lo menos esto me da un poco mas de información, al mismo tiempo me genera algunas otras preguntas.  Miro a Dereck. - Sería bueno que la proxima vez que tengas algo importante para darnos no lo olvides.  Y sonrio, en ese momento percibió que habia muchas presencias alrededor, miro un poco y vio gran cantidad de animales, que hacian ahí, cuando llegaron.  Volvio su vista a Noah nuevamente quien estaba intercambiando algunas palabras con Haon.

- Oye Noah, no me contes... no pudo terminar la frase, de pronto Noah dijo que alguien venía y a partir de ese momento Alex se encontró que no podia moverse, nisiquiera emitir sonido alguno, Noah los señalo con el dedo y un humo oscuro empezo a envolverlos a todos. Pero que demonios estaba pasando.  De pronto una llama apareció en la arena y de ella solio un hombre, Alex entro en pánico pero no podía escapar.

El pelirrojo reconoció a Noah como Kaiser Bestellen, el Amo de la Voluntad... estaba claro que se conocían, Alex no podía creer todo lo que estaba presenciando, eso estaba lejos de ser un chiste de mal gusto de algún programa de televisión.  De pronto empezó a sentir una angustia, un sentimiento terrible, ese hombre realmente lo perturbaba mucho, llego a escuchar que se llamaba Fausto, seguián discutiendo, Noah se lanzo sobre él y lo agarro del cuello, entonces el pelirrojo se dio vuelta y nos observo a nosotros, enfurecido, nos señalo y ese humo que nos envolvia se convirtio en llamas... Definitivamente nos había visto, parece que la nueva vida que tanto prometieron iba a llegar rapido a su fin.

Fausto seguia hablando mientras Noah se mantenía en silencio.  Alex sentía que se le paralizaba el corazón cuando escucho decir a Fausto que ellos habían hecho caer el avión, no había sido un accidente, nos querían a nosotros... y que hay de la gente inocente que murio ese día... el miedo y la ira recorrian el cuerpo de Alex al mismo tiempo.

Infierno, llave de arcangel, reino de los cielos... que hacía Alex metido en todo eso, era una locura.  Empezó a salir fuego de las manos del pelirrojo y nos apunto, la desesperación de Alex crecía a cada segundo... y de pronto frente a ellos aparecio un... un hombre lobo, se interpuso entre las llamas y el grupo; cayo muy herido en la arena, en ese momento el pelirrojo era lanzado al mar, no pudo ver quién, ni como... y desapareció en el agua en una nube de humo, la angustia de Alex había desaparecido, y pudo moverse nuevamente, cayo arrodillado en la arena, gotas de transpiración fría recorrian su cuerpo, le costaba respirar, mantenia sus manos sobre sus piernas mirando hacia la arena.  Levanto la cabeza con esfuerzo, el hombre lobo ahora tenía forma humana, resulta que era Haon, y con pocas fuerzas pudo decir.

- Gra... gracias... Haon.

Cuando se compuso un poco, empezó a mirar al resto del grupo para ver si estaban bien, y llego a decir con voz cansada.

- Era... era.... la segunda... posibilidad... esto es... es... muy real...

Todos escribió:

Eitan Chassier

Uno a uno, más personas comenzaban a tomar parte de la conversación. A su manera, unos suponían con lo poco que conocían respecto al asunto, así como otros exponían otros puntos. Eitan aprovechó en salir del agua mientras escuchaba a algunos intervenir. Revisó rápidamente su teléfono y aparentemente le mencionó algo poco audible para los presentes. Guardó el aparato y se colocó las chanclas que anteriormente había abandonado sobre la arena. Se terminó de retirar la arena de la planta de los pies con agua de la orilla y se mantuvo de pie, destapando un caramelo que acababa de robar de sus ropas. Al colocar el dulce en su boca, fija la mirada en los que iban tomando la palabra. Cuando Alex exponía sus suposiciones, desvió los ojos un poco hacia arriba, imaginándose si aquello le parecía tener sentido o no y asentía con la cabeza a lo que más le sonara cercanamente convincente, mas no añadió nada más.

Luego de otras intervenciones de algunos presentes más, Dereck por fin tomó la palabra y expuso su opinión al respecto. Le miró con extrema normalidad para cuando éste hablaba a los demás sobre su forma de ser. En ese momento, miró al resto. Siempre era lo mismo, incluso desde que eran más jóvenes. Dereck le conocía mejor que nadie y era más que evidente. De alguna forma y como muchas veces sucedía, la forma de su hermano de llevar las situaciones le aminoraba un poco la tensión, sobre todo porque le quitaba el fastidio que conllevaría obligarse a extenderse o explicar una misma cosa más de una vez.

Así siguió disfrutando de su caramelo de uva mientras oía las opiniones de quienes terminaban por intervenir. Se acercó finalmente a su hermano y se ubicó del otro extremo al que Gabrielle estaba ocupando, pasando su brazo más cercano por detrás del cuello de Dereck, recargándose de él, aunque a su vez, era una manera afectuosa muy a su estilo de agradecer aquel apoyo... era como un abrazo a medias muy bien disimulado. Contiguamente, el chico que sirvió como chofer del microbus se acercaba a Noah, ambos intercambiando frases. Raramente, la playa parecía llenarse de animales, cosa que llamó la atención de Eitan.

Diiiickyyy... ¿te parece que alguien perdió su zoológico?

Preguntó a su hermano con relajo. Lo sorpresivo del asunto, fue aquella extraña y fugaz orden del peliazul. El pelilila mantuvo su posición, muy cerca de Dereck. Aún así, miraba con atención alrededor. Iba a agregar algo más, pero extrañamente las palabras no salían de su boca, como si una fuerza paranormal le hubiera robado el habla. Vio también como un extraño manto les cubría a todos. Al final, le hizo imposible ver a los demás... tan solo Noah y Haon eran visibles. Sabía que Dereck estaba a su lado porque lo sentía bajo su brazo igual que segundos atrás.

No pasa mucho tiempo cuando un hombre de cabellos rojizos hace aparición, prendiéndose una escena que fácilmente cualquiera podría decir que era de una película de ficción-paranormal. A medida que Eitan iba escuchando toda la palabrería, se sentía cada vez más confundido: eran demasiadas cosas nuevas y nuevas dudas que se sumaban a las que de por sí, ya tenía. Lo que sabía era que no sabía nada. Además, a todo aquel revoltijo de ideas se le sumaba la incomodidad que le generaba aquel sujeto. ¿Acaso tenía miedo? ¿o estaba preocupado?. Eran demasiadas cosas mezcladas que terminó por ignorar, aunque inconscientemente su cuerpo lo exponía al su piel sudar un poco a pesar de que el clima era fresco.

Observó entre atónito y sorprendido todo el jaleo de los 3 sujetos con sus poderes. Al final, el pelirojo se retiró, dejando un Haon herido por quemaduras. No pudo precisar el momento en que se soltó de Dereck, pero allí estaba él, acercándose un poco a Haon (quien fue socorrido por Noah) luego de que todo aquello hubiera terminado.

Ne. ¿Seguro puedes solo con el señor chofer?

Preguntó a modo de ofrecerse a ayudar: al fin y al cabo, sentía que era su forma de retribuirle la "protección" que ofreció aquel hombre lobo. Dejó escapar un leve suspiro.

Ora, ora... Por cosas como éstas, es por la que pienso que es mejor conocernos primero a nosotros mismos como "vástagos" en vez de comenzar una carrera o algo entre la gente. Si vamos a estar indefensos todo el tiempo incluso cuando trabajamos, no tendría sentido.

Miró específicamente hacia Haon.

Oye, oye! Eres un hombre lobo brutal! Mejor que el de crepúsculo!.

Se sonrió, algo divertido. De alguna forma se sentía tranquilo de que el tipo estaba entero a pesar de que las quemaduras no eran un chiste. Sacó de su yukata una pequeña bolsita con mini-malvaviscos y la escurrió con cuidado en un bolsillo de la chamuscada ropa de Haon.

Nada mejor para las heridas que algo suave y pegajoso. No olvides lavar tus dientes después!

Añadió al chico y volvió su atención a Noah. Ésta vez, su semblante volvió a un estado intermedio.

Aún no has contestado algunas dudas de los que aqui estamos. Tampoco te pediré que lo hagas ahora. Todo esto es cansado y a la vez enredado para una noche.

Baja un poco la cabeza mientras cierra los ojos y se alborota un poco el cabello con inquietud. Luego para y retoma su postura.

Éste nuevo mundo es demasiado diferente y totalmente desconocido. Tengo más dudas que antes con todo éste revuelo con el tipejo de fuego.

Recordó fugazmente aquellas palabras claves que había logrado escuchar de Fausto e incluso de Noah durante la pelea, de las cuales no entendió mucho de su significado.

Ora. No sé, pero creo que necesitaríamos un buen momento en que todos podamos reunirnos y que nuestras preguntas sean escuchadas y respondidas... no importa si es por la Señora Addams, por Dendé o por el Yeti que se esconde en el refrigerador. Sentirse en el limbo en este nuevo ambiente lleno de vástagos que saben sobre tí pero tú no de él, hace que se me parta el disco duro.

Se dio la vuelta y comenzó a caminar hacia la posada. Sin embargo, se detiene al dar 3 pasos.

Ne. Olvidé decirte...

Se voltea a mirar al peliazul.

Gracias por salvar nuestro pellejo de Vástagos nivel 1.

Mencionó no sólo de su parte, sino también por su hermano. Sonrió un poco y despidió con la mano para retomar su marcha a la posada. Se fue a su habitación y se lanzó sobre el suelo, boca arriba y mirando al techo. Tenia demasiadas cosas en la cabeza y las imágenes recientes apareciendo una y otra vez. Si las cosas iban a tomar ese rumbo todo el tiempo, sentía que debía hacer algo no solamente por él, sino por el único familiar que tenía al menos en ese lugar. Levantó su mano derecha abierta hacia el techo. La miró por unos momentos aunque la baja de golpe al escuchar su teléfono sonar. Como era usual, atendió a su pequeña mascota virtual del móvil, manteniendo un brillo aún pensante en el mirar.

Mimi... ¿en qué lío he parado con todo ésto?. Yahh~...

Se echó con pereza boca abajo y siguió con su rutina con el aparato. Tiempo después y sin tomar siquiera permiso, se adentra con su futón a rastras hacia la habitación de Dereck. Por lo sucedido, se sentía aún un poco intranquilo por el destino de ambos. Si algo ha de pasar a su hermano, prefería estar presente para hacer algo. Al fin y al cabo, siempre habian estado juntos para todo tipo de momentos, incluso en aquel fatídico día del accidente del avión.

Así estiró de una sacudida su futón al lado del de Dereck. Se acomodó con la almohada que había traido y se recostó de medio lado, colocando su móvil al lado.

Sueña con vástagos con forma de Ponys, Dicky... Tú también, Mimi, Clarisse.

Dejó escapar un largo bostezo y cerró los ojos. Para una persona normal, quizás le hubiera costado dormir bajo aquellas circunstancias vividas recientemente, pero para Eitan, el dormir parecía ser algo más que inevitable.

Soar Grey

Luego de su intervención leve y sin mucho fin, siguieron otras intervenciones, una de las cuales, al menos a su mente le causó cierto desdén puesto que asumía demasiadas cosas en un momento que realmente no valía la pena asumir nada más que el solo hecho de que estaban vivos. Se estaba estirando precisamente cuando llegó aquel otro ser. Su cuerpo reaccionó paralizándose, instintivamente, pero su mente, increiblemente divagaba, en si aquellos cazadores "enemigos" tendrían mejores chicas que ese grupo, después de todo a excepción de VI, quizás no habría nada más. Miró, bajo esa línea de pensamiento a Joan de reojo a la cara y luego volvío sus ojos al asunto que acontecía. La verdad era que a ese punto se encontraba bastante resignado, igual, el resultado de las muertes de seres cercanos continuamente provocó que técnicamente no tuviera apego a nada, ni siquiera a la vida misma, por lo que claro, si moría allí "de nuevo", pues ese sería su destino.

Al pasar todo Soar se acercó lentamente a Haon, poniéndose de cunclillas a su lado y observandole el rostro.

-Parece que hablas mucho, sin embargo tienes un corazón bastante grande. Arigatou -asintió con la cabeza a manera de agradecimiento, sin mucha emoción, sólo normal, al parecer había asumido la situación perfectamente, depués de todo nunca se había cerrado a que no existieran cosas sobrenaturales.

Miró, desde esa misma posición a Noah, y concluyó después de todo que no se trataba de un travesti, sino de un chico con cara demasiado pulida.

-Cuidalo bien -se refería a Haon-. y gracias por cuidar de estos "críos". -se refería a los integrantes del grupo.

Posteriormente se levantaría de su lugar y lentamente pasaría entre la gente, como en dirección al hotel.

Alex Slade

Mientras terminaba de recomponerse, observaba como Eitan y Soar, se tomaban todo aquello con toda naturalidad, sin sobresaltos.  Mientras que Alex apenas si podia moverse, emitir palabras después del shock que había producido toda la situación anterior, ellos salieron caminando y hablando como si no hubiera pasado gran cosa.  Luego recordo lo que había dicho Noah a Fausto de que ellos descendian de sangre pura, por eso se estaban dispustando nuestro destino como si fueramos objetos.  Será por eso que prácticamente no los afecto, y si era así entonces con Alex se habían equivocado, porque a él si que lo había afectado en gran medida.  O acaso Eitan y Soar estaban perdiendo su humanidad, no sabía que pensar al respecto.  Pero de algo estaba seguro aquellos dos iban a ser buenos vástagos mientras que Alex no estaba seguro de poder lidiar con todo esto.

Taiga Ibuki

Taiga no podía creer lo que había pasado en verdad estaba algo confundida pero quedo totalmente anonadada y sin palabra alguna, se pregunto a si misma

-Quien será aquel chico?-

En verdad le daba miedo pero trato de no demostrarlo, no quería ser la débil en el grupo, quería demostrar que ella podría seguir adelante, dejar de lado su cobardía, así que solo miro con seriedad a los demás como si lo que había ocurrido no la hubiera asustado ni en lo mínimo, miro a Noah y solo bajo su mirada, ni siquiera pudo mirar a Haon parecía muy lastimado y ver heridas para Taiga era lo peor, podría llegar a desmayarse con algo así y ya bastante lio se había armado.

Por otra parte pensó si todos ellos tendrían un poder como ellos, en verdad esa idea la atrapaba demasiado pero con todo eso confuso en su cabeza prefirió ir hacia la posada a descansar un poco

Alex Slade

Cuando pudo calmarse se levanto de la arena, paso por su lado Taiga, esa niña que parecía tan débil también lo había tomado bastante bien, empezaba a sentir que el más débil del grupo era él.  Iba a tener que asimilar mejor las cosas y trabajar en eso porque sino el que no iba a durar mucho era él mismo, más si en algún momento le tocaba enfrentarse a un vastago caído como ese tal Fauso, y no estuviera Noah y Haon para defenderlos... aunque todavía le resultaba dificil creer que él podía llegar a hacerle frente a ese vástago alguna vez... pero si tenían sangre pura... quizás había posibilidades.  En ese momento escucho lo que Dereck le decía al hermano.

-Totalmente de acuerdo, como dije antes, mientras nosotros charlabamos en la playa, nuestros "cazadores" que resultaron ser vástagos caídos, ya estaban moviendo las fichas. Por lo menos en una cosa había acertado penso. - Si teniamos alguna duda de que esto fuera verdad, por lo menos a mi ya me quedo bien saldada.  Agregó y sonrio.

Observó que Dereck estaba ayudando a Joan, se acerco a Noah.

- Se que no es el momento adecuado, ya que tienes que ocuparte de las heridas de Haon, pero Noah deberíamos empezar algún tipo de entrenamiento, esta vez estuvieron ustedes para salvarnos pero la proxima vez no sé que pueda pasar.  Al final Eitan no estaba tan errado, para que estamos eligiendo carreras y pensando en integrarnos con los humanos cuando tenemos a ese Fausto atrás nuestro.  Somos un blanco demasiado fácil.  

Empezo a caminar lentamente hacia la posada, miles de cosas pasaban por su cabeza, fue directo a su habitación, no quería alargar más el día que ya de por si había sido muy largo.  Se recosto en su cama, fijando la vista al techo, mientras escuchaba el romper de las olas.
Así que soy un vástago, que locura, queria cazar a aquellos que me quitaron a mi familia y resulta que yo soy la presa ahora; acaso, no habran sido los vástagos caídos que masacaron a mi familia porque me buscaban... sintio que algo le atravezaba el corazón... No séra que mi hermano esta en sus garras... No quería ni pensarlo, se dio media vuelta y trato de mantener la mente en blanco para dormirse, pero no era nada fácil.

Taiga Ibuki

Al llegar a su habitación se tiro boca abajo en la cama, no estaba segura de que era lo que estaba haciendo que era lo que sucedía, el porque ella fue elegida, se sentía atrapada sin salida en un mundo que no entendía, ella de por si era bastante distraída armando mundos de fantasía  para librarse de su triste vida, sin sus padres no era lo mismo los extrañaba, y pensaba que si ella no estuviera ahí con su nueva vida de vástago tal ves estaría en el cielo con sus padres, quiso superar su miedo a volar y eso ocurrió, sucedió lo mismo que con sus padres, un accidente de avión, ahora sabría que el destino le tendía una trampa o así ella lo veía, como un túnel sin salida del cual ella no podría escapar.

De un pequeño bolsillo en su vestido saco una foto, era el único recuerdo que tenia de sus padres, de su vida y de lo feliz que en ese entonces fue



recordó muchas cosas mas las cuales la hizo sonreír y con esas imágenes en su cabeza se quedo profundamente dormida.

Todos escribió:

Noah

Cuando lo agitado de la noche hubo pasado, todos encontraron un momento para ir a dormir. Algunos pudieron dormir bien, otros no tanto. De todas maneras, al día siguiente se encontraban con una mañana agradable. Y la posada era cómoda y discreta. Aunque había otras personas alojadas, rara vez se veían. Y era difícil ser molestado. En verdad la posada estaba algo apartada del pueblo por lo que ni siquiera había ruido a tránsito ni nada por el estilo. Apenas si se escuchaban pájaros, y algunos sonidos típicos del movimiento del lugar.

Para respetar los horarios de cada uno de los chicos, Noah eligió esperar hasta después del mediodía para llamarlos y reunirlos. Les había comentado que por la noche había atendido a Haon y que éste se encontraba descansando en el microbús. Eventualmente, se recuperaría.

Pidieron a la dueña de la posada, una habitación grande para poder hablar todos juntos. Les otorgaron por unas cuantas horas el lugar más grande de la posada, que era algo así como un salón de té, obviamente al estilo oriental. Estaba situado al centro de la edificación, en un primer piso. Cuando fueron hacia allí cerraron las puertas y pidieron no ser interrumpidos por nadie. Las asistentes se fueron dejando algo de comida y té, y les desearon provecho a todos. Al fin, luego de un tiempo, estaban todos allí reunidos otra vez, luego de lo que había ocurrido en la playa.

Naoh tomó la palabra en primer lugar. Estaba serio, lógicamente. Se sentó sobre sus piernas y comenzó a servir las tazas. Mientras hacía aquello empezaba la charla.

-Entiendo que algunos pueden estar aún un poco nerviosos por lo de anoche -dijo teniendo cuidado al servir- lamento que haya sucedido.

Él, Noah, daba una imagen curiosa con su ropa tradicional y un estilo de look innovador, que tenía que ver más con lo occidental.

-Entiendo el apuro de algunos en dejar de ser un blanco fácil. Sin dudas es conveniente que aprendan a defenderse, pero todo lleva su tiempo.

Terminando de servir, Noah tomó algo de su propio té y continuó.

-Yo podría contarles quién es Mefisto. Por qué los mató con ese accidente, por qué los persigue ahora, y hasta podría aconsejarles sobre qué hacer a partir de hoy. Pero son un grupo diverso, ustedes. Hay personas a las que todo esto les importa. Otras, que siguen dudando un poco, y otras personas que prefieren olvidarlo todo.

Noah se tomó unos segundos para observarlos antes de seguir hablando.

-Así que estaba pensando en lo siguiente. Quizás sea lo mejor: La organización de Deneb les va a ayudar, a aquellos que quieran, a desarrollar sus habilidades con la condición de tener cierta disciplina e interés por lo que hacemos. Los que no estén de acuerdo en unirse con Deneb, serán protegidos por la organización, pero deben comprometerse a esforzarse en sus empleos, para al menos aportar a la causa.

Alex Slade

A pesar de la noche que había tenido, pudo dormir bastante bien, se desperto un par de veces porque le venían algunas imágenes a la cabeza de ese tal Fausto, de su hermano, de su debilidad... pero esa mañana se encontraba descansado, y mas tranquilo.  Se vistió y bajo a desayunar, pidio un cafe con leche con medialunas.  No vio a ninguno de los chicos, estarían durmiendo, o ya habrían terminado de desayunar.

Salio un rato a la playa, la mañana era mas que agradable, asi que aprovecho la tranquilidad y fue a caminar por la orilla mientras pensaba en todas las cosas que habían sucedido, aunque a cada ruido extraño enseguida se ponía en alerta, no se sentía seguro despues de lo de anoche.  Cuando se dio cuenta ya era casi el mediodia, emprendio la marcha de regreso pensando que iba a almorzar.  Cuando llego a la posada estaba Noah reuniendo a los chicos.

Le alegro saber que Haon estaba mejor, despues de todo le debia la vida, se había sacrificado por gente que ni conocía y que no creían en ellos.  Decidió no almorzar, despues de todo no hacía tanto que había desayunado y casi no tenía hambre, además tenía mucha curiosidad sobre que iba a decirles Noah, asi que fue para el salón de té del primer piso donde se iba a realizar la reunion.

Una vez acomodado escucho atentamente lo que iba diciendo Noah, mientras tomaba el té, que estaba bastante delicioso.  Cuando Noah termino decidio hablar.

- Y yo quisiera que me cuentes sobre todo eso y me aconsejes, mientras mas información tenga mejor.  Me va a ayudar a entender un poco mas todo esto.  La realidad era que ya a Alex no le importaba lo que el resto del grupo pensaba, creía, o quería hacer...

- En mi caso no tengo una familia alla afuera que me espere, asi que veo como mejor opción quedarme con Deneb, desde ya que quiero que me ayuden a desarrollar mis habilidades si es que tengo alguna.  Me imagino que esta posada, las vacaciones pagadas, todo eso es un dinero importante para Deneb, de alguna manera si avanzamos con nuestras carreras ¿Estaríamos ayudando en ese sentido? No me que claro ese aspecto, igual me parecería justo si asi fuera.

Alex estaba dispuesto a entregarse a esa organización, despues de todo le habían salvado la vida dos veces ya no tenía mucho mas que perder, pero les iba a pedir algo a cambio.

- Definitivamente me uno a su extraña organización, pero quiero algo a cambio... Noah ustedes tienen contactos, necesito que me ayuden a saber quien asesino a mi familia y que me ayuden a encontrar a mi hermano, si hacen eso por mi, me voy a convertir en su mejor soldado, te lo prometo.

Slade escribió:

Noah

Como solía suceder, Alex era el primero en comprender de mejor forma las cosas que sucedían a su alrededor, y las cosas que comunicaba Noah. Esto no quería decir que el chico estuviese de acuerdo con todo, quería decir simplemente que Alex sabía lo que le convenía hacer para lograr su propósito.

-Alex, eres una persona con un fuerte objetivo en la vida. Tal vez, sentir ese deseo dentro de ti hace que no tengas tiempo de pensar en cosas innecesarias. Sí, tenemos contactos. Y recursos. No son ilimitados, pero creo que podríamos ayudarte -le aseguró el peliazul.

Miathamle escribió:

Luego, era Joan la que hablaba. Tenía otro de sus acostumbrados cuestionamientos. Esta vez fue Noah quien negó también con la cabeza y suspiró.

-Mira, Joan. Nosotros hacemos las cosas a nuestro estilo por una pila de razones. No entrenamos personas indecisas, ni inconsistentes. No queremos accidentes, ni que se lastimen entre ustedes.

Entonces miró a la chica a los ojos y habló de la forma más directa y sincera posible.

-¡Si quieren hacer ambas cosas, trabajar y desarrollar sus habilidades, pues mejor que mejor! Pero sepan que para desarrollar sus poderes tienen al menos que interesarse en lo que está ocurriendo. No queremos que ataquen a quien no deben, je. Vamos, no discutamos por todo que me vuelve a dar sueño. Ya son jóvenes adultos algunos -les animó.

Miró al resto de los chicos, luego.

Todos escribió:

-No espero tal grado de compromiso, pero si quieren hacer ambas cosas no me opondré. Creo que el equilibrio entre lo sobrenatural y lo humano es esencial para ser una mejor persona a futuro. No querrán terminar como nosotros, jeje -bromeó Noah.

Soar Grey

Había dormido bien, aunque como era su costumbre por aquellos días, había despertado temprano, aún cuando el sol no se había puesto, y su mente, también algo habitual, lo acosaba con pensamientos constantes acerca de su destino. Alzó sus manos y acercó sus muñecas a sus ojos para mirar aquellas marcas. Dos "estrellas de David", una marcada blanca en su zurda y la otra marcada negra en su diestra, ¿qué era exactamente lo que lo había llevado a materializar aquellas dos marcas?, ¿exactamente qué significaban para él? Eran preguntas difíciles, de hecho Soar desde hace muchos años no comprendía muy bien a su propia mente y lo más difícil era que realmente no entendía qué iba a pasar cuando ya no pudiera simplemente evadir la realidad de sus pensamientos.

-Siempre seré un pervertido -se dijo a sí mismo, como si aquello fuera lo único que podía asegurar.

Pasó un rato largo, y el sol surgió de entre las montañas visualmente. Soar tomó un baño con calma, se arregló y posteriormente saldría de la habitación hacia el comedor. Tomaría un par de tostadas y un omelette además de jugo de naranja. Tomó un periódico de paso que daba las noticias del lugar y lo leyó mientras desayunaba, tratando de medir un par de tetas de paso si veía algo impresionante. Dejó pasar el tiempo y posteriormente fue Noah quien les reunió, a lo que, un poco desinteresado aparentemente, les siguió. Escucharía de manera atenta al peliazul aunque no lo parecíera demostrar, y posteriormente se echó en un asiento cercano.

-Proteger, trabajar o tratar de disfrutar antes de morir -susurró y posteriormente se estiró un poco mirando al techo-. Maldita sea, tengo que escoger eso, ¿no? -su sonrisa parecía agridulce al igual que su semblante, cosa anormal puesto que tendía a mantener un semblante normal.

Bajó entonces su mirada hacia Noah, centrando potentemente sus ojos sobre los ajenos con una convicción anormal, a lo que paralelamente juntó sus manos y entrelazó sus dedos.

-Digamos que quisiera "controlar" estos poderes que supuestamente tenemos latentes. ¿Exactamente cómo quiere o para qué quiere la "organización" que los utilicemos?.