[ER] Instituto Elemental y Superior de Distrito Tokyo

Recuerdo del primer mensaje :



La escuela elemental y superior de la ciudad ofrece a los alumnos una completa cobertura estudiantil con las obligaciones de la currícula y muchas opciones deportivas y extra-curriculares. Quizás no tenga la distinción de un colegio privado, pero el nivel de la escuela pública es bueno, y los profesionales que trabajan allí suelen ser, algunos, maestros en colegios privados también. El aprendizaje está garantizado.

A esta escuela asistía Ibuki Taiga y actualmente concurre Iruka Kevin.

El miembro 'SunakoSan' ha efectuado la acción siguiente: Lanzar los Dados

'Dado de 10 Caras' :

Resultados :

Okazaki escribió:

Meredith Ackerman

La peliroja dobló en un callejón y se detuvo. Respirando muy agitadamente, se asomó por el borde del callejón. Ya 4 de las bestias no se veían, pero le sorprendió que una por poco le agarra la cabeza con sus enormes manos. Un grito de espanto se escuchó de la chica, esquivando por los pelos el que el Gurak la atrapara y volvió a tomar a Haruki para seguir corriendo. No habia tiempo para descansar.

Un poco más lejos, Midorikawa san!

Mencionó al chico, sin intenciones de detenerse.

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'Dado de 10 Caras' :

Resultados :

Meredith escribió:

Haruki Midorikawa

La chica había corrido bastante rápido... los Guraks consiguieron herirle, pero no tan significativamente como para que dejaran de correr, por lo que al continuar, se alejaron momentáneamente de aquellos enemigos. Haruki corrió como Meredith le pidió, pero en cuanto se pararon del todo, recuperó un poco de aire y volvió a mirar a la chica.

-Oye... yo no vi ningún policía, y te escuché gritar... ¿qué es lo que está pasando? -preguntó el chico.

Aunque, de pronto, él también pudo verlos. Meredith no supo bien por qué, pero había más ahora, a su alrededor. Y Haruki podía verlos.

-¿Qué son esas cosas? -deslizó- esto debe ser una broma... -dijo sin poder creerlo.

Aunque, se repuso. No podía simplemente negar lo que veían sus ojos. Y por algo Meredith había huído de esa manera. Miró el rostro de Meredith... como para asegurarse de que lo que estaba pasando no era ninguna broma. Pero comenzó a entenderlo... relacionó lo del atentado en la universidad con esto. Alguien debía de saber lo que estaba pasando y retiró a los alumnos del lugar.

-No voy a preguntar por qué nos persiguen, ahora hay que hacer algo. Y no puedo dejarte todo el trabajo... -mencionó.

Aparecían 10 Guraks... 5 sobre los techos de los edificios circundantes, con ballestas listas para dispararse. 5 por debajo, con espadas y cuchillos.

Haruki se quitó la chaqueta y se rodeó el brazo con ella, mientras que sacaba una navaja de su bolsillo.

-En el orfanato a menudo lidiábamos con pandillas, para que no nos robaran el almuerzo y el dinero. Es una locura pero no creo que podamos escapar por siempre...

Unas risas graves se escucharon por el lugar. Los Guraks se mofaban de la resolución de pelear de Haruki. Uno sólo de los 5 de debajo se acercó lentamente, haciendo alarde de sus músculos y de su feo rostro. Gruñó y se colocó delante del chico, quien le hacía frente sin problemas. La bestia le llevaba una cabeza.

Aquel Gurak se decidió a matarlo, subió su espada y en ese momento, Haruki lanzó su navaja rápidamente, dando en un tendón de la mano del Gurak. La espada cayó al suelo y entonces, Haruki empujó a su enemigo. El Gurak, enceguecido de bronca, se lanzó hacia adelante... Haruki lo esquivó tirándose al piso, tomó la hoja de su enemigo y le cortó los tendones sobre el tobillo, imposibilitándolo. Con su navaja, y la espada del Gurak, miró a los otros.

De pronto, por unos segundos, los Guraks no hicieron nada. Era como si se preguntaran qué diablos había pasado, y luego uno gruñó y todos comenzaron a atacar.

---

Acciones:

-Aguantar peleando unos 5 minutos.
-El personaje verá que por la ayuda de Haruki, la fuerza de Meredith se duplica, su daga tiene el doble de largo y filo y las habilidades impersonales duran x2.
-Arrojar los dados como en el anterior post (1d10 por cada Gurak, y quedan 9). Pero esta vez, los éxitos son con 5, 6, 7, 8, 9 y 10, por la ayuda de Haruki.

Okazaki escribió:

Meredith Ackerman

A la primera pregunta, Meredith no contestó de momento. Respiraba agitadamente por la carrera, aún un poco preocupada por si las bestias seguían cerca. Para completar todo, la tranquilidad en el ambiente no duró mucho. Otro grupo de demonios les rodeaban desde diferentes puntos, con la chica mostrando asombro y espanto a la vez por ésto. Aparentemente, ahora Haruki si podía verlos: durante la carrera anterior, le había parecido extraño que el chico no se percatara de los monstruos que le seguían... quizás los humanos normales no podían verlo, pero ¿por qué ahora si le era fácil percibirlos?.

No tengo idea de lo que sean, pero no se ven amigables.

Respondió la chica, manteniéndose en guardia cerca de Haruki. Al final, no veía mucha salida más que enfrentarlos, no importa que Haruki presenciara sus poderes. Era cuestión de sobrevivir para ambos. Con mucha preocupación, se topó momentaneamente con la mirada del chico y no tarda en devolverla a diferentes puntos donde se asomaban los demonios. Por lo que luego mencionó el joven, Meredith asintió.

Ten cuidado, Midorikawa san.

El chico se preparaba... parecía dispuesto a pelear con todo. La peliroja suspiró y se ajustó las gafas sin aumento.

Creo que si tienes razón. Demos lo mejor.

Los demonios incluso se burlaban descaradamente, pero Haruki se las ingeniaba para lidiar contra uno. El plan del chico de atacar a sus tendones estaba funcionando. La peliroja inspiró profundo.

Midorikawa san, iré por los del tejado. Por favor, resiste!

La chica pensó que las ballestas de los que estaban arriba, podrían terminar siendo muy molestos para ambos. Corrió hacia el edificio donde se concentraba buena parte de los demonios en la parte superior. En el interior, se transformó en gato e inmediatamente usó su habilidad de Cat sneak, aumentando un 50% de su agilidad, y su visión nocturna era perfecta para ver a través de la oscuridad que reinaba en varios pisos mientras ascendía. Al llegar a la cima, volvió a adquirir su forma humana.

No me gustaría hacerles ésto, pero me parece que es necesario.

Aunque los Guraks se giraban a apuntarle con sus ballestas, la chica elevó un poco su mano al frente. De inmediato, la gravedad en la zona donde estaban los demonios aumentó considerablemente, cosa que incluso les impedía mantener en alto sus armas, y el que osara disparar como fuere, la flecha caia de golpe contra el piso por la fuerte gravedad gracias al Gravem I. Meredith aprovechó ésto, con su aura dorada rodeándole y su navaja apareciendo en su diestra, aunque su tamaño no parecía ser el habitual. No tenía tiempo de pensar a qué se debía aquello pero se dirigió a toda prisa hacia la zona donde los demonios lidiaban contra la gravedad misma, siendo inmune la peliroja a su propio hechizo. Como lo habia visto en Haruki, la joven como pudo, aprovechó para cortar los tendones de muñecas y tobillos de los que había logrado alcanzar.

Sin embargo, desde arriba, se veia la cantidad de demonios que iban tras Haruki. La peliroja mostró sorpresa y se retiró del tejado. Era necesario darle una mano al chico.


Recitó lo primero que se le pudo ocurrir para saciar su compensación mientras bajaba veloz los escalones. Estando de nuevo abajo, se aferró de su arma y buscó apoyar a Haruki, cortando puntos débiles de los enemigos más que enfrentándoles con fuerza bruta.

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Okazaki escribió:

Meredith Ackerman

Por lo visto, el trabajo de ambos rendía frutos. De los 9 demonios que quedaban en pie, tan sólo quedaban dos.

Eres bueno en éste tipo de peleas, Midorikawa san!

Halagó la chica, sonriente y a la vez respirando agitada por tanto movimiento.

Ah! Allí vienen otros!

Alertó, notando que los dos últimos a la vista se acercaban peligrosamente con armas en manos. La peliroja pensó en sacar del juego a uno primero para ambos encargarse mejor del otro. Extendió nuevamente su mano al frente, con la tierra temblando brutalmente debajo de uno de los monstruos, quedando atrapado entre la tierra.

Aprovechemos ésta oportunidad, Midorikawa san!

Asintió al chico y sujetó su puñal-cuchilla con ambas manos mientras corría del lado opuesto al que estuviera su acompañante, para ya sea uno u otro, lo terminaran distrayendo para hacer los cortes que ya habían hecho con el resto de los monstruos. Luego, al ver el momento de ir por el faltante, la peliroja no dudó en buscar desarmarlo de la misma forma.

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Okazaki escribió:

Meredith Ackerman

Inesperadamente, el monstruo se la ingenió para escapar a último minuto del agujero donde Meredith lo había atrapado. Furioso, el demonio dio un fuerte golpe en el estómago de la chica, lo cual, sumado a lo liviana que era, la manda a volar unos cuantos metros. Cae de bruces de espalda contra el piso, con su puñal escapando de su mano por la colisión. La peliroja se echó de lado y se encogió, abrazándose el estómago con un claro gesto de dolor en el rostro. Cerró un ojo, con una pequeña lagrimita asomándose por el rabillo de éste. Haciendo un esfuerzo, se logra sentar en el piso, con su diestra posada en el sitio golpeado. Indefensa en su sitio, se sorprendió al ver cómo el Gurak se aproximaba a ella con su espada en alto, dispuesto a cortarla por la mitad. La peliroja mostró enorme asombro y en un acto desesperado, rodó rápidamente hacia un lado en el suelo, con la espada del Gurak incrustándose en el asfalto de la calle.

Meredith sabía que era ahora o nunca. Mientras el demonio buscaba sacar su espada del suelo, la peliroja hizo desaparecer y re aparecer su daga en su mano, aprovechando que estaba cerca para propinarle unos cuantos cortes más a la bestia.

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Okazaki escribió:

Meredith Ackerman

Por desgracia, el Gurak se habia dado cuenta de lo que la chica tramaba. Soltó una de sus enormes manos para sujetar de la muñeca que estaba usando la peliroja. La alzó, despegando a Meredith de unos cuantos centímetros del suelo. Se escucharon algunos moderados gritos de dolor proveniente de la chica: el demonio la sujetaba con tal fuerza que por poco podría lograr fracturarle la muñeca.

Entre el dolor, Meredith dirigió su mano libre al suelo. Ésta vez, la gravedad era muy inestable por el Limbo, cosa que podía sentir el demonio bajo sus pies. La peliroja en un intento por liberarse, dio una patada que lo máximo que podría hacer es empujar al Gurak... pero eso era suficiente para que la extraña gravedad actuase e hiciera caer a la desacostumbrada bestia de enorme tamaño.

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Okazaki escribió:

Meredith Ackerman

La idea de la peliroja daba éxito. El Gurak caía y ella era liberada. Como pudo, tomó con su zurda de su navaja que ahora estaba de nuevo en el sueloe inhabilitó de movimiento al demonio con cortes en tendones y articulaciones.

C...creo que son todos...

Dijo, respirando algo agitada con sus gafas casi llegando a la punta de su nariz.


Recitó automáticamente con el mismo tono melodioso que Meredith solía hablar.

SunakoSan escribió:

Haruki

Meredith se encargaba de la mayoría de ellos, y lograban salir de aquella situación complicada. Haruki estaba algo agitado. Se sentó en el asfalto para recuperarse un poco.

-¿Y ahora qué? No se qué está pasando... pero una vez que me tomaste de la mano, comencé a escucharlos. Y luego... pude verlos. ¿Qué son? -le preguntó.

Pero volvió a pensar algo más, y le miró de arriba a abajo.

-Mejor dicho ¿quién eres? ¿y por qué me buscaste?

Okazaki escribió:

Meredith Ackerman

La chica juntó ambas manos junto a su pecho y negó con la cabeza.

Eso también me gustaría saberlo, Midorikawa san.

Respondió al chico, siendo realmente honesta en aquella respuesta. La peliroja nunca habia puesto un pie en el pandemonium y menos había tenido experiencias previas con aquellas criaturas. Por la siguiente pregunta, abrió más los ojos con cierta sorpresa y parpadeó dos veces, con sus gafas resbalando un poco por lo que volvió a ajustárselas.

¿D...de qué hablas, Midorikawa san? ¿A qué vienen esas preguntas? Vengo contigo, ¿lo recuerdas?.

Contestó la chica con cierto fingido nerviosismo, aunque la verdadera Meredith se estaba preguntando si aquel chico se había dado cuenta de algo más que quizás ella no se había percatado aún.

Okazaki escribió:

Eitan Chassier

En tanto, el Chassier menor salió del edificio por unos momentos luego de recibir el nuevo papeleo. Avisó a Rania que daría una vuelta y luego volvería por ella. Por la mente del chico, pasó la idea del color del siguiente tinte que buscaría usar... quizás el mismo de antes o aventurarse a otro que no hubiera usado... intentaba imaginarse las diferentes posibilidades de encontrar algo que le sentara bien. Sin embargo, a medida que pasaba varias cuadras a pie, se daba cuenta que había lugares prácticamente desiertos.

Ora ora. ¿A la gente se los tragó la tierra o qué?

Se preguntó con extrañeza. Se detuvo, curioso, en varios lugares con postes caidos o rincones algo demolidos. Alzó una ceja con incomprensión.

¿Pero qué onda con todo ésto?

Siguió andando, algo perturbado mentalmente con todo aquello que estaba viendo. A lo lejos, al final, se topó con un par de personas: una, un chico sentado en plena calle y a pocos metros, una peliroja que le era enormemente familiar desde lejos. Se acercó al par.

Ehy! Ustedes! Odio interrumpir su cita, pero ¿A qué hora fue la fiesta que no me enteré, eh?!

Preguntó, mirando alrededor.

Ne! Esto parece zona de guerra.

Soltó con ligereza mientras tomaba el palillo de su piruleta (ya sin el dulce) y lo arrojaba a un lado. No tarda en sacar una bolsa de malvaviscos de su bolsillo, la cual abre y comienza a engullir. Desvió su mirada a Meredith. Bufó, reprimiendo una carcajada al mirarla detenidamente con esa pinta de niña Nerd.

SunakoSan escribió:

hendrixkin escribió:

Mae Iwata

En cierta medida, a Mae le alivió que alguien más compartiera su preocupación. Se preparó para salir y en el camino le contó un poco a Gabrielle lo que sabía.

-Después de que descubrimos que Xionia y Natsumi eran un experimento, Deneb le pidió a Meredith que se acerque a un chico llamado Haruki que es idéntico a Mandos, sospechando que ambos serían de lo mismo que las chicas. Lo raro es que Mandos es el hermano de Alex, y que él supiera su hermano pequeño no tenía un gemelo -le dijo con mucho cuidado para que el rubio no se mareara con la información.

-Supuestamente Meredith está en el instituto de Tokyo haciendo de nuestra informante, supongo que no está usando su verdadera identidad por lo que vamos a tener que cuidarnos en lo que decimos si la llegamos a encontrar con Haruki -comentó con apremio.

Una vez que se iban acercando al instituto, notaron que el ambiente estaba bastante raro y algo destruido. Aquello le llamó la atención a la rubia quien miró a Gabrielle buscando complicidad en sus sospechas. Comenzó a caminar algo apurada, tratando de acercarse más a la zona del desastre.

-Allá están, y Eitan también… parece que están sanos pero algo raro está pasando. Tendremos que actuar un poco, calculo que no tendrás problema con ello ¿ne? -comentó confiada en las habilidades del rubio.

Finalmente se acercó a donde estaban los chicos, le costó un poco reconocer a Meredith con aquel aspecto, su impactante cabello rojo era lo que la hacía inconfundible. Su rostro mostraba una gran preocupación.

-¡Maldición! ¡¿Qué rayos pasó por aquí?! -preguntóhaciéndosee la desentendida del asunto. Y no estaba tan alejada, ya que no sabía que hasta hace unos momentos Meredith se había enfrentado a una serie de Guraks.

Suzume, Sunakosan escribió:o__o

Gabrielle Cohen O.

Gabrielle hizo lo que pudo para levantarse y seguir a Mae, no quería que notara su cansancio que, más que físico, era emocional. Pero podía más su preocupación por sus polluelos que otra cosa. Escuchó con atención lo que le decía, todo iba tomando forma en su mente. Así que iban a buscar a alguien parecido al hermano de Alex.

-Probablemente ellos sean el siguiente paso... - murmuró tratando de acomodar sus ideas. Si habían iniciado con las gemelas, el siguiente paso lógico era el golem... ahora la cuestión era que habían dado un viraje... éste golem tenía corazón, no como el de la leyenda... quizá estaba pensando horas extras pero podía ser una respuesta. Asintió a lo que le decía Mae, tendría que fingir que no conocía a la joven.

Con forme llegaban a su destino, podía comenzar a sentir un ambiente diferente, al ser más alto que Mae podía caminar con un poco más de calma pero sin que ello implicase que no le importaba la búsqueda. Sólo debía mantener la calma, sólo eso. Pronto dieron con ellos, al menos estaban "bien" y en una sola pieza. Le sonrió a la rubia.

-Ten cuidado- dijo Gabrielle tomándola del brazo y ayudándola a pasar por una serie de ruinas -¿Quién demonios pudo hacer esto? ¿Acaso fue una bomba?- parecía proteger a la rubia, levantó la cabeza y vio a Eitan, Meredith y el chico, de inmediato tomo un tubo y los encaró -¿Quienes son ustedes?- preguntó poniendo a Mae atrás de él para protegerla.

Meredith Ackerman
Eitan Chassier

La peliroja hizo un gesto de interés por Eitan, como si por su cabeza no entrara que el chico no se hubiera enterado de al menos la señal de alarma. Apenas separó los labios para contestarle cuando otros dos jóvenes aparecen: Gabrielle y Mae. Meredith, aún en su papel, retrocedió del susto por la reacción del rubio, tropezándose y cayendo torpemente sentada al piso. Eitan volteó a mirar a Gabrielle con el tubo y alzó una ceja. Luego se sonrió.

Ora! ¿Dos personas descansando en el piso y otra comiendo malvaviscos es una clara señal que vamos a atacarte salvajemente a tí y tu novia? Pffff... Yahahahaha!

Llevó su índice a su oreja y dibujó círculos en ella como llamándole "loco" a Gabrielle. Baja la mano y toma otro de sus dulces en la bolsita.

Ne! Mejor baja esos ánimos. Soy Eitan para tí, niño del tubo!

El albino engulló su malvavisco como si nada, sin muchas intenciones de ocultar su identidad; mientras tanto que al mismo tiempo la peliroja, aún tirada en el piso, se ajustaba sus gafas. Se acercó un poco a Haruki para susurrarle.

¿Q...que hacemos, Midorikawa san? Pareciera que no han visto esos enormes ogros.

Oigan, oigan!

La peliroja se sobresaltó un poco al Eitan dirigirse a ambos.

¿Y ustedes qué? ¿Van a quedarse allí todo el día? Al menos díganme sus nombres, eh!

Soltó el chico, siguiendo el juego de hacerse "los desconocidos" mientras seguía comiendo sus malvaviscos. La peliroja miró con intriga a Haruki, con el movimiento moviendo un poco sus gafas. Volvió su mirada a los recién llegados, con clara timidez en su expresión. Se ajustó sus gafas.

Emmm.. Alice... Alice Stuart.

Contestó. Luego vaciló en proseguir.

Me es difícil creer que no supieran nada.

La chica se puso de pie y se limpió la arena del pantalón.

Las autoridades desalojaron los alrededores por una alarma de emergencia... y, bueno... mmm... -se vio mucho más tímida al respecto, como si dudara mencionar lo siguiente-... sonará una locura, pero habia ogros enormes. Midorikawa san y yo tuvimos que enfrentarnos a ellos.

Mencionó la joven con ambas manos unidas en su pecho, como nerviosa y predispuesta a que le llamaran Loca por esa historia.

Se sigue en: https://animasu.forosactivos.net/t883-er-mision-n-5-un-mar-rojo#56527

Para su alegría tanto Amanda como Deneb aceptaron ir a verlo cantar, se fueron a cambiar y partieron hacia el instituto, el lugar tenía una pequeña sala de ensayos donde se solían hacer también shows y diferentes eventos.  Ese día las estrellas iban a ser los chicos que estudiaban en el lugar y en otros Institutos de renombre; que tenían ganas de convertirse en cantantes, mientras que el público serían los familiares de los mismos chicos.

Sala de ensayos:

El evento contaba también con la presencia de profesores, y del Director del colegio así como también, de un importante representante que buscaba nuevos talentos, aunque allí había asistido más que nada porque la hija del Director era novia de su hijo, pero no le llama mucho la atención asistir a eventos amateurs de ese estilo, donde salían niños y jóvenes a desafinar, y generarle un dolor de cabeza.

Participaban chicos de todas las edades que iban desde los 16 a los 21 años, el mas chico del grupo era Kevin con sus 14 años.  Cuando llegaron al lugar había bastante movimiento, chicos nerviosos ensayando con sus padres quienes también estaban nerviosos, la presencia de aquel importante representante generaba algo de presión a todos.  El pequeño Arrows asistió creyendo que era una simple prueba de canto, o por lo menos eso le había dicho su profesora, pero cuando vio todo ese ajetreo se empezó a dar cuenta que aquello era un evento más grande de lo que esperaba.

-- Hay demasiada gente, creí que iba a ser mas tranquilo.  Expresó con cierto temor y vergüenza en su voz, por suerte el estar acompañado de Amanda y Deneb lo tranquilizaba un poco más, sino ya se hubiera ido corriendo de ese lugar.  Entre la multitud aparecía Brian.

-- Kev!! Esto esta buenísimo, espero te vaya muy bien.  Le dijo muy animado mientras le daba un gran abrazo como saludo, al mismo tiempo que por el lugar aparecía la profesora que había insistido con que se presente a ese evento.

-- Kevin Iruka.  Me alegra mucho que se animará a venir, como ya se lo dije, tiene una voz increíble, sólo es perder un poco el miedo.  Miró a sus acompañantes.

-- Ustedes deben ser los padres adoptivos del pequeño Iruka, un gusto conocerlos, su hijo es una maravilla, educado, muy inteligente y con grandes dotes musicales.  Les decía mientra extendía su mano para estrecharla con la de ellos.

Estaba claro que Kevin había modificado un poco la realidad, y había dicho a su profesora que Deneb y Amanda eran sus padres adoptivos, algo de verdad había, los miro con complicidad y algo nervioso, esperando que no se fueran a enojar por decir aquello de ellos.

Slade escribió:

Amanda Grudke

La mujer caminó junto a Deneb y Kevin inspeccionando un poco el lugar, había trabajado en escuelas y universidad y ver aquel ajetreo le parecía de lo más normal, no así al más pequeño de los arrows. Le apoyó una mano en el hombro y sonrió.

-Tranquilo, haz como si fuera algo más pequeño si eso te da más seguridad… -intentó convencerlo. Tanto el amigo del pequeño como su profesora se acercaron a donde estaban ellos, justo cuando la pelivioleta buscaba con la mirada una buena posición para ver el pequeño espectáculo.

Tal como la mujer le ofrecía, Amanda le devolvió la estrechada de manos y luego sonrió, sin mostrarse para nada sorprendida por los dichos de la profesora. La mujer después de la invitación de Kevin había comprendido enseguida que quizá el chico había modificado un poco la historia.

-Qué grato todo lo que dice, profesora… ¿cuál es su nombre? Lo siento, no tengo buena memoria con los nombres -comentó de manera simpática- Debo confesar que soy pésima para el canto, pero intento asesorarlo de la mejor manera posible, le agradezco de antemano por el apoyo que le ha dado, se muy bien que a él se le hace mucha ilusión cantar -agregó guiñandole un ojo sin que Kevin le viera.

Volvió a mirar un poco los alrededores.

-¿Podríamos ir buscando un lugar para ubicarnos no creen? -propuso.

Amanda, Deneb escribió:

Amanda entablaba conversación con la profesora del pequeño Arrow, el chico se sintió un poco mas aliviado al ver  que la mujer seguía un poco el juego que había planteado, y actuaba como si realmente fuera su madre.

-- Soy una de las profesora de canto de su hijo, Daiana Kui.  Respondía la maestra frente a la pregunta de Amanda.

-- Si, pasen por aquí, les reserve un lugar en la segunda fila, atrás de los profesores y los Directivos así que van a tener una buena visual, aunque el sentido que mas se va a aprovechar hoy es el oído.  Dijo de forma simpática mientra acompañaba a la familia de Kevin a sus respectivos lugares.

-- Iruka, usted venga conmigo, lo voy a llevar a donde están los otros chicos ensayando y esperando su turno para salir.

Kevin traía consigo la guitarra que le había regalado Haon, con la cual iba a realizar su presentación.

-- Veo que trajo instrumento propio, venga por aquí Iruka.  Observó a los demás.

-- Nos vemos luego familia, espero disfruten del espectáculo. Les dijo mientras se iba alejando del lugar con el pequeño Arrow, los demás chicos estaban ensayando como había dicho, él saco la guitarra sólo para afinarla un poco.  Sentía que iba a ser un gran día.

En el escenario aparecía el Director del Instituto, dando un pequeño discurso, agradeciendo la presencia de los padres, del personal y del Representante al cual alabo de gran manera; para finalizar luego invitando al primer alumno a realizar su presentación, era una chica de unos 18 años, cantaba bastante bien, aunque alguna que otra nota desafinada.

El buscador de talentos, que se encontraba justo delante de Amanda ya empezaba con sus criticas, hablando con uno de sus asistentes.

-- Esto va a ser una pesadilla, como puede desafinar así.  El asistente se encogió de hombros pero no expresó mucho más, así fueron pasando cada uno de los chicos, de los cuales siempre tenía una critica.  El turno de Kevin ya estaba muy cerca.

Slade escribió:

Okazaki escribió:

Amanda Grudke

La mujer sonrió con amabilidad, a pesar de que aún no se sentía con los animos suficientes intentó mostrarse de esa manera para que su alumno estuviera más tranquilo.

-Muchas gracias profesora, nos vemos luego… -dijo una vez que la mujer los guió y despidió, luego despeinó un poco el cabello de Kevin y se puso un poco a su altura para que solo el pudiera escucharla- Puedes hacerlo Kevin, ya verás que después de terminar lo verás como una tontería en comparación a las hazañas que has hecho -bromeó.

Pronto comenzó el “show”, con la participación estelar de un cazatalentos que no le agradaba para nada a Amanda, sus comentarios le hicieron fruncir un poco el ceño pero no dijo nada, lo mejor era no llamar la atención, menos con Joseph Deneb y Kevin tan cerca. Solo esperaba que cuando sea el turno de Kevin no tuviera que soportar los comentarios del hombre.

Por su parte, con el paso de cada alumno la pelivioleta aplaudía con cortesía, porque para ella que no sabía cantar nada bien le parecía que aquellos jóvenes eran excelentes cada uno a su manera.

-Creo que ya casi le toca a Kevin -le comentó al lider de Arrows, sin ocultar una leve ansiedad.

Amanda escribió:

Slade escribió:

Deneb

Ante el primer comentario de Kevin, Deneb alzó las cejas.

-En mi opinión, está muy tranquilo. Es mejor esto a enfrentarte con los Apóstoles ¿cierto, Kevin? Además, no llevas un instrumento cualquiera. Estoy seguro de que te dará la tranquilidad que necesitas.

Ocupó su asiento con Amanda, luego de que la profesora se encargara de aquellos detalles sobre quiénes eran y qué relación tenían con Kevin. Escuchó al cazatalentos pero no le prestó demasiada atención. Miró más que nada a Kevin y a su compañera de asiento. Esperó tranquilamente a que llegara el turno de Kevin. La profe parecía algo nerviosa. Deneb optó por hablar de cualquier cosa para que se distrajera.

-¿Qué se siente estar de pronto casada, Amanda? -le dijo- hoy eres mi esposa para toda esta gente. A eso llamaría yo estar inmerso completamente en la sociedad ¿no te parece? -preguntó.

La miró con una muy leve sonrisa.

-Sólo estoy bromeando. Pero no es la primera vez que vemos a un Vástago que ha estado casado ¿verdad? Noah... es una persona muy especial, pero tu también lo eres. Y para ser franco... te sentaría bien -opinó- bueno... creo que ya no me entrometeré más en tu vida.

Guardó silencio para que Amanda no se lo tomara a mal, esperando el comienzo del espectáculo.

Okazaki escribió:

Amanda Grudke

Amanda se sorprendió un poco por las declaraciones de su acompañante, se tapó levemente la boca con los dedos para ocultar una muy leve risita.

-Si, en eso tienes razón, esto es estar inmersos en la sociedad… supongo que debe ser lindo para los humanos venir a ver a un hijo dar una presentación, como dicen “pasar un momento en familia”. No es del todo cierto, pero sí me siento estar pasando un momento así -confesó, desviando solo unos momentos la mirada al escenario.

Se acomodó un poco en su asiento y miró al pelioscuro con tranquilidad.

-¿Eso crees? Puede ser, no lo había pensado. -dijo rápidamente, pero luego negó con la cabeza- Mentira, si lo pensé y a veces con muchas ganas. Calculo que no es tan fácil que suceda como simplemente pensarlo, aunque creo que ya no me apetece tanto…

Suspiró y sonrió un poco.

-Tendrías que entrometerte un poco más en nuestras vidas, pero solo un poco. Eso te haría ver más “guay” como padre -bromeó también, enfocando sus ojos en el escenario para ver si Kevin aparecía.

Kevin escribió:0__0

Zorrito

Mientras Kevin esperaba su turno una pequeña figura se metió por los vestidores,andaba muy tranquilo porque nadie lo veía y era una pequeña sombra peluda que lograba su cometido con bastante éxito. Apoyó su delicado hocico en la pierna del chico mientras practicaba y lo miró como lo haría un cachorro animando a su dueño. En cuanto Kevin lo miró, el zorrito ladeó la cabeza y se escabulló por donde había llegado sin dejar que nadie pudiera atraparlo. Era como una aparición de ultratumba.

Gabrielle, Deneb, Amanda escribió:

Uno a uno iban pasando, y al fin llegaba el turno de Kevin, tenía un nudo en el estomago, estaba nervioso, como si se tratará de un gran Recital.

-- Su turno Iruka, vamos cambie esa cara, y deje el miedo de lado lo hará bien.  Lo animaba la profesora, realmente le tenía mucha fe al chico.  Cuando se dirigía al escenario, en un momento titubeo y se frenó, escuchaba los murmullos de la gente allá afuera, en ese momento tenía ganas de salir corriendo, o de usar su habilidad Desilución y desaparecer del lugar sin dejar rastros.

-- Tanto se van a demorar, me hacen perder el tiempo.  Se quejó el buscador de talentos.  Cuando parecía que el  pequeño Arrow estaba por tener un ataque de pánico y no salir al escenario, un animalito apareció a su lado, apoyando su hocico en su pierna, era un zorro, como si fuera la bestia interior de Gabrielle, cuando lo miró, el animalito escapo rápidamente.

-- Vamos Iruka, parece que hubiera visto un fantasma, no haga esperar al púbico.  Le dijo la maestra con una sonrisa.  De alguna forma Kevin sintió que era Gabrielle que este donde este lo animaba a salir adelante, eso le dio muchas fuerzas.

-- No vi un fantasma, vi un ángel.  Le dijo con una gran sonrisa para luego salir al escenario, mientras la maestra se lo quedo mirando sin entender mucho.

Se sentó en un banquillo frente al micrófono, con la guitarra de Haon en sus manos.

-- Hola... hola a todos... quiero dedicar esta canción a una persona que fue muy importante para mí, su nombre es Gabrielle.  Y empezó a tocar la guitarra, la prueba de canto no tenía mas acompañamiento que el instrumento que cada joven había elegido.

-- No puedo creerlo, acaso participaban los del Kinder también.  Le dijo a sus asistente el buscador de talentos viendo que el pequeño arrows era muy chico para estar allí arriba, pero enseguida hizo silencio cuando Kevin empezó a cantar.



Una vez empezó a cantar ya nada le importo, la música salía de su ser como si fuera algo común para él, siempre pensando en Gabo, dio una gran Show de canto.  Por momentos su mirada se posaba en Deneb y Amanda que pentenciaban su fuerza.

El buscador de talentos no pudo emitir queja alguna, el asistente se dio cuenta de aquello.

-- Bastante bien no señor?

-- No esta mal, pero tampoco es algo tan grandioso.  Aunque su cara demostraba lo contrario, pero no podía dar el brazo a torcer.

Cuando el pequeño Arrows termino de cantar, los aplausos se hicieron escuchar, agradeció a todos con cierta timidez ya que no estaba acostumbrado a aquello y se retiró del escenario donde lo esperaba la maestra quien le dio un fuerte abrazo.

-- Muy bien Iruka, se lo dije, era cuestión de perder el miedo.  Kevin asintió con la cabeza.

Atrás de Amanda y Deneb había una mujer bastante extraña con una adolescente a su lado la cual tenía una mirada triste y de asombro a su vez; la mujer hablaba por teléfono.

-- Les digo que es él, parece que no hicieron bien su trabajo.  Cortó bastante molesta, tomo a la chica de la mano y salieron rápidamente del lugar.