Vieja Mansión Deneb

Quienes están con HAON escribió:

Amanda Grudke

En medio de la charla, Haon recibió por parte de Amanda una llamada informando que estaba llegando al apartamento. Pocos minutos después, la pelivioleta entró con apremio a través de la puerta con una copia de la llave. No se adentró demasiado a la habitación pues se la notaba especialmente apurada.

-Ya vi las noticias, pero eso tendrá que esperar… -adelantó, dio un largo suspiro y los miró a todos con seriedad- Mientras toda la atención estaba centrada en Yamamoto han aprovechado para enviar una invasión de Guraks a este plano,. Están por todo el país… también en la universidad donde están Haruki y Meredith. Hay que ir de inmediato porque van a aparecer muchísimos más -dijo terminantemente.

Con prisa los guió a todos, incluido Haon, hasta su camioneta color champagne para llevarlos a donde el resto de sus compañeros estaban.

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Acciones:

-Esperar el post en Misiones con la nueva misión/entrenamiento.

Ahora sí, se sigue en: https://animasu.forosactivos.net/t883-er-mision-n-5-un-mar-rojo#56527

Lo que pasó en la playa antes de regresar:

Dereck había vuelto a tienda y posteriormente aparecía en la mansión. Si Deneb y Vi estaban en casa, el chico tenia algunas cosas que compartir con todos y que le inquietaban.

Aquella mansión no dejaba de tener ese cálido toque. Dereck se dirigió a la que fue su antigua habitación, la cual compartía con Alex.

Entró con suma cautela, aún tenia ciertas pertenencias ahí, pero lo que fue curioso es encontrar una rosa y un sobre sobre con su nombre en que era su cama.

¿Esto, desde cuando está aquí?

Aquella rosa estaba impecable y desprendía un aroma delicioso, tomó la rosa y el sobre y salió de la habitación tal y como había llegado, en silencio.

Bajó y se sentó en aquel sillón de la dependencia abrió el sobre y para su sorpresa era nada más y nada menos que un dibujo que había hecho Gabrielle. Dereck lo había visto en aquella playa cuando visitaron la posada de Noah.

En verdad no se explicaba cómo había llegado ese dibujo ahí, incluso tenia cierto mensaje escrito.

"Hay ocasiones en que nos da miedo afrontar algo diferente sin darnos cuenta que perdemos hermosas oportunidades... No lo pierdas".

¿Qué significa esto? Esta no es la letra de Gabo.

Se quedó pensando un poco en aquellas palabras mientras contemplaba aquel dibujo, Gabrielle había hecho un retrato de Dereck tocando el saxo, estaba muy bien detallado, pero a la vez le hizo recordar lo ocurrido y que Gabrielle se había sacrificado por él.

Suspiró pesadamente y sintió pena nuevamente.

Discúlpame, Gabo, en verdad donde quiera que estés discúlpame por ser como soy y no brindarte aquello que esperabas de mi, pero tu bien sabe que al corazón no se le puede obligar y yo jamás me hubiera aprovechado de tus sentimientos para llenarte de falsas ilusiones. Espero que algún día puedas perdonarme...

Dereck sabía que no era alguien tan importante como haberse sacrificado así. Solo era un estúpido vástago idealista que trataba de salir por sus propios medios, sin pretender ser alguien más o sentirse superior.

Le pesaba que lo vieran lleno de cualidades, virtudes o le tomaran como ejemplo. Tal y como le decían, "el príncipe o héroe de los cuentos" Sabía perfectamente que no era nada eso porque, ni toda su valentía, ni toda su caballerosidad ,educación, atenciones o muestras de afecto pudieron contra el destino. Aquel "príncipe" de cartón tuvo ver partir a su amada princesa años atrás.

Pero no podía ir en contra de su naturaleza y de lo que era.

Al fin regresaba a la mansión, frente a lo que había dicho Amanda anteriormente, se quedo callado, no valía la pena decir más, no entendían el concepto al que apuntaba, siempre le había costado expresarse, y por lo visto cada cosa que decía molestaba a cada uno del grupo de Arrows, le mejor sería no decir más nada.  Se pego el baño de su vida, realmente eso fue hermoso después de todo lo que había pasado.

Se quedo mirándose al espejo, dándole vueltas a algunas cosas, jamás había dicho que Amanda fuera un fracaso como maestra, con lo que estuvo de acuerdo en cuanto a lo que decía la mujer errante era con que no tenía sentido enfrentar a enemigos como Fausto con esas simples habilidades, porque estaba claro que estaban en desventaja, pero la profesora había tomado su expresión, y su forma de actuar en contra de ella, de hecho se sintió insultada.  Dereck le había planteado que no confiaba en sí mismo, no es no confiar, conozco mis limitaciones.  Se dijo as sí mismo, Mae también ponía el grito en el cielo.

Por otro lado, si insultaba estaba mal, si decía que le caía bien la Dama Errante por su perspectiva de  las cosas, también parecía estar mal, es lo malo de hablar tanto, y decir las cosas que uno piensa o siente.  Además en un momento de tanto dolor era normal decir cosas fuera de lugar, no podía contenerse, pero apenas si comprendían eso, y cada palabra era una molestia para sus compañeros, Rania podía insultarlos directamente, decirles que habían fracasado, que Gabo había muerto por culpa de ellos, pero a nadie le importaba, ahora si esas palabras estaban en su boca, eran tomadas de la peor manera.

-- Que hago aquí? Cómo seguir ahora... Se sentía encerrado, no encontraba un camino para seguir, los enemigos eran poderosos, su hermano lo había perdido, sus compañeros ya no lo toleraban por las cosas que decía, de que forma iban a lograr esa unión cuando había tanta diferencia entre ellos, tanto reproche, ya sea de su parte como la de ellos.  No veía que las cosas pudieran mejorar.

-- Irme es la solución?  Era un monólogo que tenía con él mismo, pero que sentido tenía, que iba a ser sólo, lo más probable fuese que Fausto o alguno aprovechara eso y terminará con su vida, cosa que en ese momento no le parecía tan mala, no había nada ya que lo motivará a seguir adelante.

-- Por quién estoy peleando en esta guerra? Por mi familia? Esta muerta.  Por mi hermano? Es mi enemigo.  Por mis compañeros? Mi relación con ellos es desastrosa.  Por la humanidad? No lo creo, ellos también son mis enemigos ahora.

Definitivamente no encontraba salida, se acostó en su cama, cerró los ojos y no quiso pensar en nada más, no sabría que iba a hacer de ahora en más, para él ya nada valía la pena.

Había hecho caso omiso a todo lo que discutían los demás, estaba demasiado triste, no emitió palabra alguna, sólo veía como el resto de sus compañeros discutían, y se decían cosas, si esa era la fisura cada vez se hacía mas grande, pero no tenía ni ganas, ni fuerzas de omitir opinión alguna al respecto.

De regreso a la mansión tampoco dijo nada, se quedo con la cabeza hacia abajo, y con su mirada pérdida.  Estando en su habitación se miro al espejo y no pudo contener sus lagrimas silenciosas, que no paraban de fluir, se dio un baño caliente para despejarse un poco y sacarse todo eso de encima, pero no había dado mucho resultado.

Observo la cama vacía de Gabrielle, y las lagrimas volvieron a surgir, se acostó boca abajo y lloro silenciosamente hasta quedarse dormido.

Por fin regresaban a casa y descansarían o al menos lo intentarían. Omeny tomó un baño caliente, no quiso cenar, se fue a la cama para dormir abrazada de Mae, pero e realidad, aún exhausta no pudo dormir del todo bien.

Tuvo pesadillas, con Fausto, Haon y Gabrielle. Iba ser difícil borrar aquellas imágenes. No sabría lo que pasaría de ahora en adelante, pero lo que si sabía era que seguiría poniendo su empeño para avanzar.

Al no poder conciliar el sueño se levantó despacio para no perturbar a Mae, le sonrió mientras dormía y la abrigó bien.

Omeny salió de la habitación, aún faltaba un poco para que amaneciera, pero sentía una necesidad le liberar tensiones y para ella una forma de hacerlo era el ejercicio. Aun que le mañana era algo fría no le importó y se dirigió hacia aquella enorme alberca, ya llevaba consigo el atuendo necesario para nadar un buen rato.

A ver si no se enferma lol:

Se aventó un clavado y comenzó a nadar. La chica empezó hacer ejercicio excesivo, incluso si estuviera compitiendo ya hubiera impuesto un récord por la velocidad que llevaba entre una vuelta y otra, esa era su forma de liberar todos aquellos sentimientos que la agobiaban.

Pasando un tiempo considerable salió del agua y permaneció sentada en la orilla mientras el agua goteaba por su cabello y se deslizaba por su rostro, su mirada se mantuvo en el agua con la cabeza baja.

Eitan Chassier

Los días que siguieron a aquel extraño momento que pasaron todos, tenía algo perturbado al albino. Conciliaba menos el sueño de tantas cosas en su cabeza que cuando pegaba un ojo por el extremo cansancio, se despertaba minutos después, algo sobresaltado. Además, Cada vez que bajaba a desayunar, se daba cuenta de que la costumbre de encontrar algo hecho por Gabrielle ahora sería imposible experimentarlo ahora; así también como la ausencia y buena compañía de Rania algunas veces, aunque sea para cosas relacionadas a sus traducciones. Pero sobre todo lo primero le daba pesar y mucha frustración, por lo que siempre acababa por subir muy enojado a su habitación de nuevo a hacer cosas con Megu.

Un día 15, no se había dignado a bajar a nada. Estaba apoyado y asomado a su ventana, aburrido, viendo el panorama de esa mañana. Se veia cansado, con buenas ojeras como si noches atrás no hubiese tomado tiempo para dormir. Estaba al menos bien vestido y con todos sus cabellos muy peinados en su lugar...había tenido demasiado tiempo de sobra mirándose al espejo mientras se arreglaba, con su mente divagando sin más en lo que ocurrió hace días. Divisó desde su ventana a alguien en las cercanías de la piscina, pero desde su habitación no podía mirar bien de quién se trataba. Si algo que hacer y pobremente entusiasmado para adelantar algo de su trabajo (cosa que le traia recuerdos de Rania a su cabeza), salió de su habitación y cruzó la puerta del salón, en su mismo piso. Se acercó a la ventana que conectaba a la piscina y se asomó. Parecía un tanto sorprendido que se tratara de Omeny. La joven nadaba y Eitan sólo se le quedaba mirando como iba de un lado al otro. Apoyó su mentón con comodidad de la mano con el codo apoyado en el marco de la ventana. Su cabeza comenzaba a distraerse, aunque por otro lado comenzaba a notar otros "dotes" que no se había percatado antes sobre su blanco visual. Con atención, escaneaba con disímulo cualquier rastro de curvas en el cuerpo de la jovencita, aunque toda clase de opiniones claramente se quedaban en su cabeza.

Eitan se sonrió cuando la chica había salido. Sacó uno de sus caramelos y lo arrojó a la cabeza de Omeny desde las alturas.

Ne, Wendy! ¿Vas a dejar el fút para dedicarte a la carrera de pescados?

Le gritó desde su lugar.

Meredith Ackerman

Los eventos previos habían dejado pensativa y un tanto distraída a la peliroja. A pesar de tener menos tiempo que los demás en la mansión, la ausencia de Gabrielle la hacía sentir algo triste. Rania tampoco estaba con el grupo, cosa que la hacia sentir incluso algo extraña por tener que acostumbrarse a no verla durante los desayunos o cualquier hora común. Le preocupaba la chica e, independientemente de su opinión, la peliroja esperaba que estuviera bien y que pronto muchas dudas le sean despejadas.

Esa mañana, había ayudado a preparar el desayunoy tras dejar arreglado los trastos de manera manual, fue directo a la biblioteca. Tenía intenciones de leer un libro de ficción(aunque de por sí, había bajado con un libro en manos) para salir mentalmente del silencio y mala vibra que se respiraba en la mansión por esos días. Al escoger uno, salió de la biblioteca con el libro que tomó y el que había traido manteniéndolos abrazados y se dirigió al jardín. Tomó asiento allí, y cerró los ojos para respirar el delicioso aire de la mañana. La brisa jugaba suavemente con sus largos cabellos.

Ésta es una situación muy difícil.

Se susurró a sí misma y abrió los ojos para admirar el cielo. Minuto después, baja la mirada al otro libro que había traido desde antes de entrar a la biblioteca. Era un libro de autodefensa...aquel que Haon le había regalado de cumpleaños. Miró con tristeza lo que ahora sería tan solo un recuerdo, con la palma de su diestra paseándose suavemente por la portada de aquel libro.

Haon...

Dijo en voz baja para luego abrirlo y decidirse a leer un poco de él.

Cierto golpecillo en su cabeza la hizo regresar.

¿¡Pero quién rayos...!?

Sus ojos grises dieron con aquello que había caído en su cabeza. un caramelo de inmediato volteó hacia una de las ventanas.

¿Tú, despierto ya y esta hora, Peter pan? Vaya creo que si lloverá

Se levantó y se puso en pie.

Claro que no, solo me dieron ganas de nadar un rato aunque no tengo muchas ganas de ir al club.

Tomó una toalla que había traído consigo y comenzó a cercarse para despúes colocarse una bata y sus sandalias.

¿Y qué hacias? ¿Estabas espiándome a caso?

Bromeó aunque Eitan ya había estado un buen rato observando en la ventana.

Mae Iwata

Luego de los eventos sucedidos, el ambiente se volvió algo extraño. Por momentos, Mae parecía intentar ser alegre y animar a todos, casi como escapando de la realidad, pero de vez en vez lloraba sola por la pérdida de dos seres queridos. A pesar de intentar demostrar lo contrario se la veía utilizar más seguido el atuendo que le había regalado Gabrielle.

Spoiler:

-Aún recuerdo cuando me lo dio… “para una chica dulce” dijo… -recordó, extrañando a montones la presencia del rubio. No solo al desayuno, sino pensando en el trabajo y cada vez que sentía hablar de la TBS o de Smile! Love.

Además, había dado un lugar especial en su cama al peluche que Haon le había obsequiado para su cumpleaños. Aquellos objetos eran lo único que tenía físicamente como recuerdo de ambos fallecidos. Se sentía bastante triste por no haber podido despedirse de los cuerpos, pero sabía que poco a poco lo superaría. Mientra tanto, seguiría intentando mostrarse lo más alegre posible.

Spoiler:

El día 15 se levantó algo más tarde, ya sin Omeny como compañía en la habitación. Bajó a la cocina y se hizo un submarino.

-¿Cómo estarán Noah y Amanda? -se preguntó, aún algo sorprendida de cómo los vástagos más experimentados habían demostrado tener fuertes sentimientos hacia sus seres queridos. Luego de decirse a sí misma aquello, su mirada se desvió a la ventana, el día estaba algo nublado. “Que coincidencia” pensó.

Meredith escribió:

Guardando aquel dibujo nuevamente, Dereck se paseó por la mansión un rato y finalmente salió. A la distancia ciertos cabellos rojos podían verse.

Se acercó despacio, Meredith estaba sumamente entretenida en una lectura, llegó por detrás e ella y se inclinó un poco para estar a la altura de su oído

Buen día, pequeña.

Besó se mejilla y rodeó el lugar donde ella estaba sentada para ponerse frente a ella.

¿Cómo estás, ya más tranquila?

Preguntó con interés.

Discúlpame, si te interrumpí, ¿Puedo acompañarte?

Kisa escribió:

Eitan Chassier

El albino se sonrió por el comentario de la chica.

Puede ser, puede ser! Pero será tu culpa, eh! No todos los días se ve una chica bañándose en la piscina.

Comentó. A la última pregunta que le exponía sobre si espiaba, soltó una carcajada.

Ne! ¿Es que acaso no puedo esperar con libertad a que venga una princesa azul de los cuentos a salvarme del primer piso de ésta mansión embrujada? Ora! Los hombres también tenemos derecho, eh!

Bromeó. Apoyó ambos brazos de la ventana.

¿Entonces no tienes nada que hacer hoy? ¿Qué tienes en mente, eh? Me aburro aqui dentro!

Preguntó, con intenciones de colarse.

Meredith Ackerman

La peliroja se sobresaltó al escuchar repentinamente la voz de Dereck: no lo habia visto venir.

Ah! Dereck! Muy buenos días.

La peliroja sonrió con gusto a su acompañante para luego verlo sentarse cerca de ella.

Un poco. Aún me es complicado asimilar todo lo que ha pasado. ¿Y tú cómo te sientes?

Agregó respecto a lo segundo. Por la última pregunta, volvió a sonreirle.

Las veces que quieras, Dereck. Tu compañía me es muy grata. ¿Quieres algo de té? Puedo prepararte un poco si gustas.

Ofreció. Cerró el libro,manteniendo un dedo entre las páginas en que había quedado y miró hacia el cielo. La brisa volvió a soplar con suavidad contra sus cabellos.

Da la impresión de que va a llover. Creo que muchos se sienten como el clima el día de hoy, ¿no crees?

Suspiró.

Eitan, Mae, Amanda, Noah escribió:

Las palabras de Eitan terminaron por hacerla reir.

Tonto. Pues ni chicos, ni chicas se ven todos los días, aquí, tenemos una pisicina enorme y creo que no la aprovechamos. Pero hoy me decidí a hacerlo y me la verdad se siente muy bien, deberías hacerlo también tú, es un ejercicio muy completo.

Comentó.

Puedes esperar lo que quieras a la princesa, pero te dará hambre si esperas demasiado asi que mejor baja para desayunar algo y ya veremos que hacer.

Le invitó mientras ella se disponía a entrar en la casa, pero antes fue bañarse y cambiarse rápidamente antes de bajar y llegar a la cocina.

Hola...

Saludó a todos aunque no supo que más decir realmente.

¿Gustan un café u otra cosa calentita?  Puedo preparar algo más si les apetece, iré a decirle a...

De momento tuvo un olvido muy marcado, ya que el que siempre le ayudaba con el desayudo era Gabrielle.

Pondré la cafetera.

Después de algunos minutos ofreció aquel cálido liquido oscuro a los que presentes y galletas.

Eitan Chassier

El chico juntó sus labios a modo de pez mientras ponía una expresión de aburrimiento.

Ora, ora! Los ejercicios y yo no nos llevamos, Wen.

Luego piensa en algo y se sonrie.

A menos que hagamos una parrillada con todos o algo así. Yahahha! será divertido usar la piscina!

Agregó. Por lo final, movió su mano derecha como si evadiera la idea.

Paso! No le tengo ganas al desayuno. Ne! Mejor voy a mi habitación. Si ves a la princesa, dile que suba a despertarme con un beso. Yahahaha!!!

Se movió a la par que Omeny cuando ésta ingresó a la mansión. Eitan se fue a su cuarto y se echó en la cama a revisar su teléfono celular.

No era mi intensión asustarte

Se disculpó por el sobresalto y respondió.

Si, estas cosas no se asimilan de la noche a la mañana de igual forma sigo en proceso aunque, hay otras cosas que me han estado dando vueltas por la cabeza y quiero cometarselo a todos para poder encontrar alguna explicación de lo ocurrido o al menos ir hallando respuestas.

Le devolvió la sonrisa por el comentario.

El sentimiento es mutuo, bonita, a mi también me agrada tu compañía y aceptó tu ofrecimiento del té. Gracias.

Sus ojos también se posaron el cielo.

Si, eso parece, pero hasta las nubes grises forman parte del paisaje.

Se atrevió a preguntar algo.

¿De que trata tu lectura?

Meredith Ackerman

Por lo segundo, la chica asintió un poco con la cabeza.

No es mala idea, Dereck. Yo también tengo mis propias dudas. Soy la que menos ha convivido con todos y aún me falta por entender muchas cosas sobre éstas situaciones.

Agregó. Sonrió a su acompañante al éste aceptar su invitación sobre el té.

Voy por él. No tardo.

Dejó los libros sobre la mesita y se puso de pie para encaminarse a la cocina. Divisó a algunos en el comedor. Allí, ya estaban varios disfrutando del desayuno. Meredith le sonrió cálidamente a los que estaban presentes.

Buenos días, Omeny, Mae. ¿Descansaron bien? Tengan un buen provecho.

Dijo, atenta. Comenzó a andar a la repisa de la cocina donde se guardaban las cosas. Sacó una bandejita, un par de tazas con sus platillos y cucharas. Calentó el agua y preparó lo necesario para el té. Incluso acomodó un platillo con algunas galletitas con chispas de chocolate por si les provocaba algunas. De vuelta al jardín, pasó de nuevo por el comedor.

Estaré en el jardín con Dereck, por si necesitan algo. ¿De acuerdo?.

Les sonrió a modo de despedida y caminó de regreso donde el albino le esperaba.

Estoy de vuelta. Siento la demora.

Colocó la bandeja en la mesita y sirvió ambas tazas de té, cuyo aroma era suave y reconfortante. Incluso se podía adivinar del pequeño toque de menta que la chica había añadido a la bebida. Tomó asiento de nuevo. Sujetó con delicadeza del asa de tu taza y dio un breve sorbo para luego reposarla de nuevo en su platillo. Prosigió con la conversación sobre el paisaje. La chica volvió a sonreirse por la idea de su acompañante.

Así es. Creo me estoy enfocando solo en una parte del cuadro. La escencia del producto final es lo que verdaderamente importa, y espero que nuestra pintura tenga un final muy colorido para todos.

Añadió, agradada. Por la pregunta siguiente, bajó un poco la mirada con cierto pesar. Luego se animó y tomó uno de los libros para admirarlo un poco.

Leía un poco éste manual de defensa personal que Haon me había obsequiado. También saqué de la biblioteca éste otro.

Le mostró el otro libro.

Es El Caballero de la noche. Es una novela de licántropos y vampiros... diría que una de mis preferidas. Mi padre me regaló un libro similar hace tiempo ya, pero me animé a leerlo de nuevo. Su historia y personajes me atraen mucho y creo me servirá un poco para sobrellevar todo ésto.

Cerró los ojos y suspiró con pesadez. Luego los abre y los enfoca en Dereck mientras le sonreía con dulzura.

¿A tí te agrada un género en particular? Podría recomendarte algunos libros interesantes.

Comentó.

Todos escribió:

Noah

Naturalmente, Noah necesitaba un tiempo. Los días siguientes no se dejó ver demasiado, aunque algunos sabían que únicamente salía para trabajar, y para visitar a Amanda en su apartamento, preguntándole cómo se encontraba, dejando en la casa de la chica algunos chocolates para levantar un poco el ánimo.

El día 15 el corvette rojo de Noah se escuchó a eso de las 11 de la mañana y él bajó con una mochila a cuestas. Cuando pasó por el jardín, para entrar a la casa, observó a Dereck y a Meredith charlando y disfrutando de un té. Se sorprendió, pero le agradó lo que veía.

-Buen día Meredith, Dereck. ¿Oigan no tienen frío? Qué valientes... -dijo bromeando- bueno, no quiero interrumpir. Nos vemos adentro -dijo, pero antes de entrar a la casa por la cocina, le sonrió a la chica guiñando un ojo- ah Meredith, también tengo un ejemplar de "501 Métodos de Detectar, Evitar o Defenderte de Abusones, Idiotas y Pervertidos". ¡No te pierdas el capítulo "El poder de tu meñique", es mi favorito.

Entró a la casa como había planeado. No vio a Alex, Kevin o Eitan, pero Omeny andaba por ahí.

-Uff, ¿habré llegado tarde para el café? Son casi las 11...

Miró por la ventana. El filtro de agua de la piscina aún funcionaba.

-Hey ¿alguien se cayó a la piscina o algo hoy? -preguntó.

Los últimos días no podía dormir bien, siempre tenía pesadillas donde veía a Fausto asesinar a Gabo una y otra vez, a tal punto que decidió componer una melodía con el piano que le había regalado Alex en su cumpleaños, había sentido muchísimo la muerte del rubio.  Se la pasaba horas en su habitación tratando de armar aquella melodía.

Un nuevo día amanecía, estaba bastante fresco, miró el almanaque, era un 15 de febrero, le parecía que el tiempo corría muy lento, era muy temprano y estaba desganado, pero tenía que terminar la melodía que iba a dedicar a la memoria de Garbrielle, necesitaba un aire nuevo, su habitación no le daba mucha inspiración, por lo que decidió que su lugar de composición iba a ser el balcón de la dependencia de servicio era bastante grande, y tenía una vista al a piscina bastante linda, aunque sentado no la llegaba a ver, pero sí la naturaleza del lugar, árboles, pájaros, además el viento en la cara, a pesar de que era frío, le daba mas inspiración que las cuatro paredes de su habitación.

Se abrigó bien, y salio con su piano al balcón, lo acomodo con unos soportes, se trajo un banquito y empezó a tocar las notas salían solas, era eso lo que le faltaba se dio cuenta, el paisaje.


Con lagrimas en sus ojos dejo escapar esa hermosa melodía y cuando finalizó dijo en voz baja.

-- Es para voz Gabo.  Mientras se limpiaba las lagrimas con la manga y sonreía al cielo.

Slade escribió:

Joseph

Por supuesto, quien era dueño de aquella Mansión no siempre venía en su auto color negro, sino que tenía sus propias formas de trasladarse a su lugar. Tampoco avisaba a alguien siempre que llegaba, pues no tenía por qué. Y a menudo, simplemente observaba lo que ocurría allí sin estar presente. Pero esa vez, intentó ser lo más silencioso posible para no interrumpir la canción. Una vez terminada, sí se permitió hablar:

-Te han sentado bien las clases -dijo el líder de Arrows- ¿así que eso fue para Gabrielle, Kevin? Lo has hecho muy bien.

Deneb asintió firmemente como si quisiera apoyar con su actitud lo que acababan de decir.

-Una vez quise consolar a un amigo que estaba muy triste. Y le conté una experiencia similar que me había ocurrido a mi. Me habían dicho que eso provoca una afinidad entre las dos personas, que comienzan a entenderse y de a poco a sentir menos dolor. ¿Y sabes qué me dijo? -preguntó, una pizca divertido- me miró y me dijo "mi dolor es mi dolor, no me importa lo que te ha pasado a ti, déjame en paz" -sonrió- y desde entonces dejo que cada uno pase los momentos malos como le parece, o como pueda.

Joseph miró a Kevin largamente para ver qué podría llegar a contestar el chico, pero ambos se quedaron unos segundos en silencio.

-Pronto los reuniré y les comunicaré cuánto hemos avanzado mientras ustedes se esforzaban, y verán que a pesar de todo no todas son malas noticias.

Esos días se hicieron largos y fríos, con sus compañeros apenas cruzaba palabras como "buenos días", o "buenas noches" cuando se topaba con alguno.  Había tomado por costumbre levantarse bien temprano tipo seis, siete de la mañana e ir al cementerio que se encontraba detrás de la mansión, en general nadie iba por ahí, pues claro quien iba a querer visitar un cementerio donde vaya a saber quienes estaban enterrados en esa gran casona.

Allí se pasaba de 3 a 5 horas entrenando, con su espada, sus habilidades, hasta las 10, 11 y luego iba a su habitación para pegarse un baño caliente y de esa forma sacarse el sudor, la tierra, y la adrenalina del entrenamiento.

Esa mañana fue algo diferente, cuando se dirigía  hacia la dependencia escucho una melodía que provenía del balcón, de seguro sería Kevin, hacía días que estaba encerrado en su habitación tocando el piano, al menos le daba un buen uso a su regalo, pero teniéndolo en la habitación de al lado era algo molesto escucharlo todo el tiempo, aunque al parecer esta vez la había logrado componer, no le erro a ninguna nota, y la melodía le congelaba el alma, debía admitir que el pequeño era muy bueno en aquello de la música.

En general desayunaba en la mansión con el resto, aunque casi no hablaba, era bastante incomoda la situación, pero tampoco quería aislarse en la dependencia de servicio como alguna vez había hecho.  Una vez termino de ducharse, la melodía de Kevin había terminado, en vez de eso escucho una voz algo mas grave que le hablaba al pequeño Arrows, parecía ser Deneb, pero prefirió no meterse entre ellos y se dirigió hacia la mansión.

En la mansión se encontraban Omeny y Noah solamente.

-- Buenos días.  Saludo a los allí presentes y se preparo su habitual café con leche, para luego sentarse a la mesa a desayunar, tenía hambre, siempre venía con mucha después de los entrenamientos.

Se sobresalto un poco cuando escucho una voz detrás de él, era el Señor Deneb, que había aparecido como desde las sombras no lo había escuchado venir.  Se quedaron unos minutos en silencio cruzando miradas, hasta que el pequeño decidió romper con aquello.

-- Es lo menos que puedo hacer por Gabo, era una gran persona, lo quería mucho.  Guardo silencio unos segundos para continuar diciendo.  -- Si, en el instituto me enseñan muchas cosas, y tengo facilidad para esto, quien sabe quizás en mi pasado fui un gran músico.  Dijo a modo de chiste, sobre la historia que Deneb había contado sobre su amigo respondió.

-- Vaya, pues tú amigo tenia muy mal carácter, aunque a veces cuando uno esta mal busca esa soledad, a mi me ayudo mucho la música, me siento en otra dimensión cuando estoy tocando, y siento que la melodía me acerca más a Gabo este donde este.  Expresó con cierta nostalgia y tristeza, para luego sonreír nuevamente.

-- Pues me imagino que en el lugar habitual de reunión, el living de la mansión, vamos?  Quiero tomar algo caliente, la naturaleza me inspira pero también me enfría hasta los huesos.

Se levanto lentamente, guardo su piano en la habitación, y espero a que Deneb fuera con él, estaba contento ya que al fin había podido terminar la melodía para Gabo y sonaba muy bien.

Noah y los que estén o vayan estando. lol escribió:

Meredith entraba a la cocina y saludaba.

Hola, Mere, si gracias, te llamaré si hace falta.

Después era Noah el que entraba a la casa, Omeny se alegró de verlo.

Nunca es tarde para un café, aquí tienes Noah.

Le ofrecía una taza.

No, nadie se cayó en la piscina, yo desde muy temprano me metí a nadar un rato. Tuve esa necesidad, pese al agua fría. Pero el agua fría ayuda a reafirmar los tejidos y también a circulación sanguínea y...

Estuvo tan metida en sus pensamientos que no había prestado tanta atención a la temperatura del agua.

Fue relajante, podríamos hacer algo divertido en la alberca, jugar con una pelota o simplemente relajarnos. Como en las aguas termales.

Su comentario parecía que solo estaba invitando a Noah, al percatarse de ello se sonrojó un poquito.

Sería una buena forma de pasar un rato agradable entre todos. Es que... creo que no nos hace bien estar así, con los ánimos por el suelo, también lo digo por mi aunque esto llevará tiempo. Se que todos están poniendo de su parte para sobrellevar las cosas, pero llega un punto en que la nostalgia pega.

Le acercó el plato con galletas.

¿Gustas?

Alex aparecía en la cocina.

Que onda, Alex.

Le saludó.

Meredith escribió:

Gracias, pequeña

Agradecía el té.

Nunca es tarde para comenzar una buena convivencia con los demás. Mae y Omeny son chicas muy abiertas, puedes comenzar con ellas y podrían volverse muy buenas amigas.

Sugirió

Por mi parte yo no tengo inconveniente en convivir contigo, al contrario, de hecho...Me encantaría conocerte más.

Tomó su taza y bebió.

Está delicioso y más con ese toque de menta, me encanta el té de menta por cierto

Sonrió al saber de que trataba aquel libro.

Ya veo, si Haon te lo obsequió fue por una muy buena razón. Bueno te diré algo y no me lo tomes a mal, pero eres una chica que trasmite ternura y a simple vista pareces muy frágil como una hermosa muñeca de porcelana. Pero te he visto en las misiones eres decidida y tienes habilidad. Ese libro te ayudará a sacar la guerrera que hay en ti. Y desde ahorita compadezco a aquel que quiera ponerte un dedo encima.

En esos instantes Noah llegaba.

Buenos días Noah, tomamos algo de té para entrar en calor ¿Gustas?

Ofreció, pero el peliceleste se retiraba no sin antes recomendar otro libro más a Meredith.

Podría ser otro buen libro para complementar el de Haon. Con lo que respecta a mi, me atrae la poesía y el genero romántico, la aventura, las novelas también son buenas y más cuando vienen con algo de suspenso. Ahora que recuerdo, creo tener entre mis pertenencias un libro de poesía francesa, pero digamos que es poesía gótica, bueno viene una mescolanza de ello.

indicó a la joven.

Ame, livre ta grâce, Beauté, livre tes sens
Aux profondes caresses qui sont des talismans.

Alma, entrega tu gracia; Belleza, entrega tus sentidos,
A las profundas caricias que son tus talismanes.

Recitó brevemente.

Buscaré el libro y te lo daré.

Meredith Ackerman

Por el consejo de Dereck, sonrió al chico.

Lo tomaré en cuenta, Dereck. Gracias.

Se tomó unos cortos segundos en dar un sorbo a su té. Al bajar la taza, prosiguió.

Intento adaptarme a todos ustedes. Unos son más abiertos que otros en personalidad pero confío en que me acoplaré muy bien a ésta familia que somos ahora. A pesar que vengo de muy lejos, es agradable sentirse como en casa.

Por el comentario sobre su té, sonrió ésta vez complacida.

¿De verdad? Si algún día quieres que te prepare algo de té de menta, puedes pedírmelo. Lo haré con gusto para tí, Dereck.

Había sinceridad y gusto en sus palabras. El siguiente comentario, le hizo ruborizar las mejillas. Llevó su diestra a sus labios, apenas rozándose con los dedos y rió en voz baja, divertida.

Gracias por decir eso, Dereck. Aunque honestamente a veces me entran dudas si estaré en el lugar correcto. Todos ustedes son muy valientes y habilidosos en situaciones dificultosas; sobre todo tú. Te he visto actuar y puedo decir que eres un gran guerrero capaz de protagonizar mis más soñadas fantasías.

Sus mejillas volvieron a adoptar una suave coloración rosa. Se cubrió los labios y rió un poco, por lo bajo. Al callar, prosiguió.

...Y de verdad no me agradaría terminar siendo un estorbo, para tí o para los demás en esta historia. Aún así, haré lo que esté en mi alcance para ayudarles lo más que pueda.

Luego fueron interrumpidos por Noah. La chica volteó a mirar al peliceleste y le sonrió a modo de bienvenida.

Buenos días, Noah. ¿Descansaste bien?

Dereck respondió al joven quien sin esperar algo más iba entrando en la mansión. Tan solo se detuvo a recomendarle un capítulo. La peliroja le sonrió nuevamente y apenas le despidió con la mano ya que Noah había desaparecido ya de la vista. Volvió su atención al mayor de los Chassier.

Noah parece estar de buen humor el día de hoy.

Opinó sobre aquella primera impresión. No tardaron en retomar la conversación, ésta vez sobre los libros. Cerró los ojos al tiempo que el chico recitaba la poesía, como si de esa manera quisiera captar toda esencia en cada palabra.

Los poemas suenan muy bien, y más si eres tú quien los recita, Dereck.

Abrió los ojos y le regaló una gustosa sonrisa.

Gracias por compartir esos versos conmigo. No cabe dudas que el francés es el idioma del amor... guarda una magia que hace que tu corazón vibre con esa energía romántica. Podría escucharlo todo el día y no aburrirme.

Agregó.

Una vez leí una novela descrita en versos. Es una historia fantástica de romance medieval entre una princesa y un mago de otro mundo. Se titula "Las jaulas del destino". Puede que te guste si te animas a leerlo.

Recomendó finalmente.

Y dime, Dereck. ¿Tienes una chica especial? Eres el hombre más galante, atento y educado que he conocido... seguramente gustarás a muchas chicas.

Indagó.

Meredith escribió:

Muy bien, me encantará beber otra taza de té de menta preparado por ti la siguiente vez.

Estaba bebiendo un poco más cuando el comentario de Meredith le tomó por sorpresa, tosió un poquito, casi se ahogaba. Tomó la servilleta y se limpió los labios. Estaba algo apenado y sorprendido. Incluso la chica despertó su curiosidad, se inclinó poco sobre la mesa.

¿Ah si? y...puedo preguntar ¿Cuales son esas soñadas fantasías que te gustaría que yo protagonice?

Cuestionó con cierto aire coqueto para luego tomar su mano y negar con la cabeza.

Tú misma decidirás si estás o no el lugar correcto. Meredith, no dudes de ti, ni de lo que eres capaz de hacer. ¿Recuerdas lo que dijo Noah y también Amanda? Si estamos aquí es porque cada uno de nosotros tiene algo para dar y por esa razón vale la pena continuar y que sigan compartiéndonos sus conocimientos y créeme que tú no eres la excepción. No tiene mucho que llegaste aquí y has avanzado bastante acoplándote al nivel de los demás. Así que...

Elevó su mano para tomar con suavidad el rostro de la peliroja.

Jamás digas y pienses que vas a ser un estorbo ¿De acuerdo?

Le dijo con cierta seriedad. Retiró su mano del rostro de la chica.

Hagamos un trato, tú me preparas el té y yo a cambio te leeré todos los poemas que gustes en francés.

Era un trato equitativo.

Buscaré el libro y lo leeré, gracias por la recomendación.

La siguiente pregunta de Meredith lo hizo suspirar un poco.

Si, la tengo, pero no está conmigo físicamente, se a convirtió un ángel hace ya varios años, pero la llevo conmigo en mis recuerdos y corazón.

Terminó su té.

Gracias por tus palabras, pero no pienses que por ser todo eso que dices, soy un "don juan" o un "pica flor" Quizás guste a las chicas, pero no sé, a veces suelo encontrar a chicas superficiales, interesadas, vanidosas en extremo, aferradas, egoístas, posesivas, celopatas y eso pierde todo el encanto que tengan por fuera.

Al menos esas eran sus "experiencias"

Me atraen más las chicas, sencillas, divertidas, seguras de si, inteligentes, que se fijen metas para crecer como personas, que sean ellas sin aparentar, que se respeten a si mismas. Es atractivo conocer a una chica independiente que si desea estar con un chico es para compartir con él sin dejar de ser ella y no porque se sienta sola, porque necesite llenar un vacío o por mero capricho.

Sonrió ampliamente hacia Meredith.

Y tú ¿Dejaste a algún chico especial en tu país? O quizás no fue uno sino "varios"

Bromeó.

Dereck escribió:

Meredith Ackerman

Meredith rió un poco por la insinuación de la frase que Dereck le había devuelto.

¿Qué te parece el de un muy guapo y romántico héroe que salva el día con sus prosas?... o puede que algo más.

Llevó su índice a su mentón con expresión inocente y sonriente que hacía dudar si estaba siguiéndole el juego al chico o si era real su sentir. El que le tomara de la mano y la forma en que le decía lo siguiente, le hizo sorprenderse un ruborizarse un poco. Al sentir la mano de Dereck en su rostro y por lo siguiente dicho por el chico albino, la peliroja le sonrió con dulzura y sinceridad mientras también elevaba su mano para cubrir con ella la del chico.

Gracias por tus palabras, Dereck. No volveré a decir eso. Lo prometo.

Soltó al chico a la vez que éste abandonaba su rostro. Lo siguiente, le hace llevar sus dedos a sus labios y reir un poco por lo bajo.

Me parece un trato justo. ¿Cuándo empiezo?

Preguntó con cierto tono divertido. Al su pregunta tener respuesta, Meredith se vio inicialmente sorprendida, cubriendo su boca con ambas manos para luego cerrarlas y dejar ver cierta tristeza.

Disculpame, Dereck. No tenía idea... Debió ser una situación muy difícil para tí.

Dijo, apenada por su intromición.

Aunque debo admitir que es lindo la manera en que te refieres a ella. Un amor que trasciende más allá de la muerte... Estoy segura de que esa chica especial está cuidando de tí en todo momento y en todo lugar. Para ser alguien que cautivó tu corazón, debió ser una gran mujer.

Sonrió con amabilidad al joven para luego recoger su extenso cabello rojizo y pasarlo sobre uno de sus hombros. Mientras Dereck hablaba, dio otro sorbo corto a su té para acabarlo y en el interín, peinó un poco sus cabellos con sus dedos. Acabó por sonreir al chico.

Es bueno siempre que tengas bien claro con quien decides encaminarte a una aventura romántica. Me agrada saber que eres un chico bien enfocado y que sabe lo que quiere en una relación seria. Admiro eso de tí, Dereck. No muchas personas guardan esa clase de valores hoy en día. Ya pronto llegará el día en que conozcas a otra valiosa mujer para que te acompañe en ésta larga novela de la vida.

Agregó. Por lo último, llevó nuevamente sus dedos cerca de sus labios para reir por lo bajo, divertida con la pequeña broma que el albino asomaba.

Amores platónicos, tuve muchos. Digamos que de niña siempre le di rienda suelta a mi imaginación. Mi mundo, eran las mil y un historias en las que me podía sumergir... Ya sea apreciando el teatro mientras papá trabajaba, escuchando las historias tras las composiciones de mi madre o leyendo sus libretos u otro tipo de bibliografías; Todo cobraba vida de forma muy divertida.... aunque ahora no creo sirva de algo que a quien admires no sea de carne y hueso.

Rió un poco más, encantada con rememorar ciertos detalles de su infancia.

Aún así, tampoco te puedo ocultar que he tenido pretendientes, sobre todo en la preparatoria. Pero mi intención nunca ha sido tomar una decisión tan importante siendo tan joven. Siempre he soñado con dar mi vida y mi ser a aquella persona que realmente lo valga.

Sonriente, cerró los ojos como si pensara en cosas agradables.

Tiene que ser alguien con el que pueda sincronizarme, compartir y vivir mi vida con tanta emoción como si cada día fuera el último. Alguien que haga vibrar mi corazón con su sola manera de ser.

Abrió los ojos.

Solo pido eso. Me parece que sobre pensar en un estereotipo está demás. Todas las personas son grandiosas tal cual son aún con sus defectos... es más, es lo que los hace únicos, pero el lograr lo que deseo sentir con una persona u otra, no debe ser igual a lo que realmente deseo.

Concluyó.

Meredith escribió:

Dereck después de mucho tiempo soltó una carcajada, la pregunta de Meredith se le había hecho muy divertida por algunos de los conceptos en los que lo tenían.

Oh no preciosa, por favor. Un héroe no.

Retomando su postura, pero aún conservando la sonrisa en su cara respondió.

Me inclinaré mejor por ese... Algo más. Y con respecto a al trato, lo dejó a tu consideración.

Era una señal de que podía disponer de él para leerle.

No te disculpes. Si al principio fue complicado, pero ella disfrutó mucho hasta el final. Algo que siempre le admiré fue su convicción y fortaleza.

Agradeció las palabras de Meredith.

Si, de eso estoy completamente seguro, no solo me cuida sino que también me ayuda en mi camino para encontrar a esa valiosa mujer.

Miró fijamente aquellos ojos rubi mientras le contaba sobre sus amores platónicos.

Vaya, así que desde niña he. Te creo, seguro que si te enamoraste de uno que otro personaje.

Por lo siguiente asintió.

Me agrada que pienses así, porque tienes razón, tú y nadie más que tú decidirás quien vale la pena para que le entregues tu alma y tu ser.

Meredith tenia muy en claro que lo quería.

Los estereotipos son solo eso y claro que toda persona es única. En algún lugar debe estar esa persona que haga vibrar tu corazón y que está dispuesto a amarte hasta los defectos.

Le animó y le hizo una invitación.

Mere, en lo que nuestras "personas especiales" llegan ¿Qué te parece si vamos tú y yo a dar una vuelta, no se a comer un helado o algo? Te servirá para distraerte un poco. Nos pondremos de acuerdo. Por ahora entremos, creo que aparte de Noah llegó alguien más.