Vieja Mansión Deneb

Eitan, Amanda, Todos escribió:

Cierto gesto gracioso se notó en la cara de Omeny al recibir aquel pelotazo en la cabeza. Sus ojos grises brillaron y se posaron fulminantes sobre Eitan por interrumpir así.

¡AHORA VERAS PEQUEÑO RUFIÁN!

Tomó la pelota y del devolvió el pelotazo con fuerza.

Discúlpame Amanda-sempai pero voy a darle una lección.

Se levantó de la banca, corrió hacia la piscina y se arrojó sobre Eitan para volverlo a hundir.  Salió a la superficie y nadó para ir por la pelota.

Bien chico, ¿listos? ¡Allá va!

La golpeó y la bola cruzó la alberca en espera de ver quien la recibía y la remataba.

Kisa escribió:

SunakoSan escribió:

Todos escribió:

Amanda Grudke

La mujer observó detenidamente a Omeny mientras ella le hablaba, al principio respondió con una leve sonrisa, luego habló.

-Es bueno saberlo, Omeny, pero no te menosprecies así, he visto el empeño que le pones a todo y esa es una gran característica que a veces es incluso más valiosa que el conocimiento en sí mismo -dijo- El mundo es demasiado cambiante como para saberlo todo, pero desde que me convertí en vástago ese ha sido uno de mis sueños: saber más cosas, aunque ahora me preguntó de qué tanto sirve si no puedes ayudar a quienes quieres -confesó, dejando la taza de café (ya vacía) a un costado y apoyando ambas manos sobre sus piernas.

-A veces siento que no podré conseguirlo, como no conseguí enseñarle a Haon a ser más fuerte, como le había prometido que haría…

Miró a todos en la pileta, sonriendo y pasando un buen momento para finalmente volver a detener su mirada en la chica de cabello oscuro.

-Yo también estoy aprendiendo mucho de ustedes ¿sabes? -le contó- No tengo recuerdos de mi vida como un ser humano, y desde que los conocí ustedes me han “humanizado” por así decirlo, creo que eso es algo también a destacar -agregó.

Después de unos segundos de seguir escuchando a la chica, la mujer le acarició un poco la cabeza.

-Hace tiempo no tengo una charla de mujer a mujer con una amiga, jaja, que curioso -rió- los únicos amigos que me quedaban eran Noah y Haon. Hay muchas cosas que no se puede hablar con ellos.

Con la frase de Eitan, pudieron ver que Amanda sonreía con diversión por unos pocos segundos. Observó a Omeny, al albino y a Noah y se levantó de su asiento.

-No quisiera volverme plana de ningún lado… -dijo y se fue a cambiar. Al regresar, lo hizo con una bikini de color blanco y el cabello recogido en una larga trenza al costado. Se metió con lentitud al agua y, al principio, solo se ubicó en una esquina para ver a todos jugar con la pelota.

Spoiler:

El pelioscuro se estaba impacientando, como que se estaba demorando mucho Deneb para venir a decir lo que tuviera que decir, estaba a punto de salir de la piscina ya cansado de esperar pero se quedo unos segundos observando el juego que hacían los demás con la pelota de playa, una especie de volley acuático.

Kevin trataba de interceptar el remate de Omeny, pero sin lograrlo caía para atrás y se hundía en el agua, para luego salir a la superficie nuevamente.

-- No se vale Omeny, vos sos muy buena para los deportes, yo soy malisimo. Dijo entre risas mientras se limpiaba el agua de la cara.

-- Dale Eitan, no nos pueden ganar las chicas.  Le reclamo mientras le pasaba la pelota para que el menor de los Chassier hiciera el próximo remate.

Eitan Chassier
Meredith Ackerman

El albino menor terminó siendo blanco de Omeny.

WAAAAH!!

Burbujitas de aire escaparon del sitio donde Eitan estaba ahora hundido. Al salir, sacudió la cabeza y miró a Omeny acomodarse para seguir jugando. El Chassier se sonrió.

Ne, ne, Wendy! no es necesario que saques el polvo de hada, eh!. Las haremos volar de la paliza que le daremos.

En eso Meredith, agrupada de parte de las chicas, rió un poco y mantuvo su sonrisa para agregar:.

Te ves confiado, Eitan... a pesar de ser el único en terminar hundido más de una vez el día de hoy.

El juego continuaba y Amanda ingresaba en bikini, cosa que distrajo por momentos a Eitan (quien planeaba bloquear el remate de Omeny primero, siendo Kevin quien intentó hacerlo fallídamente). Dejó escapar un fino silbido pero volvió a enfocarse en el juego. Se sonrió por el comentario del más chico del grupo.

Eso fue un golpe de suerte, Levin. Ni creas que las dejaremos ganar!

Se preparó para recibir el pase y tras un buen brinco, remató con fuerza la pelota hasta la zona rival.

TOMA!

Todos escribió:

Deneb

Joseph bajó finalmente, luego de atender unos asuntos. Los vio a todos en la piscina y no dudó en acercarse. Inesperadamente se quitó los zapatos, las medias, se levantó su pantalón negro de vestir (de siempre) y se sentó a orillas de la piscina a ver el match de sus "hijos".

-Fue una semana difícil...

Luego de un rato, observó a Noah y a Amanda. Y luego a todos los demás, en cuanto el partido hubo finalizado.

-Fausto quería entretenernos, para que pudiera comenzar algo más grande en medio del caos -les comentó a todos- pero mientras ustedes se quedaban peleando, VI me advirtió que la zona de Pandemonium que se había creado en Shangai comenzó a expandirse frenéticamente.

Deneb hizo una pausa y luego agregó:

-Quien está detrás de Fausto, que asesinó a Gabrielle y a Haon, es Bastorius, quien ustedes conocen como Malabi. Al principio, todos sabíamos que era una persona especial, muy hábil. Sin embargo, nos enteramos luego que era más de lo que creíamos, y pensamos que era un Vástago poderoso.

Deneb negó con la cabeza, y luego continuó explicando.

-Pero después de lo que VI y yo vimos, no hay dudas de que sus poderes corresponden más a los de un Dios, por su potencia. Esta semana, ha cambiado todo, y se definirá como acabará esta historia. Si el camino es juntar dolor y rencores, y seguir con la guerra... acabará con la victoria de Bastorius sobre todos, sobre Apóstoles, Arrows y humanos. Pero si ustedes... y repito, ustedes Arrows jóvenes, se animan a intentar parar toda esta locura, hay una carta que puedo presentarles. Una carta tan fuerte como los poderes de Bastorius...

Deneb los miró, por más que sintiera que no se había ganado la confianza de sus "hijos".

-Necesito sentir el alma de cada uno de ustedes primero... para decidir si les presento o no el poder que podría acabar con esto...

Todos escribió:

Deneb finalmente se acercaba y de alguna manera también compartía aquella alberca, Dereck se ubicó en una orilla mientras le escuchaba.

¿Bastorius? Llegué a pensar en él por lo que ocurrió conmigo la última vez, Spica me comentó que casi me quita el alma y fue por eso que tardé en recuperarme. De hecho no recuerdo mucho de lo que ocurrió solo que de pronto todo fue oscuridad y cuando desperté estaba en aquella tienda.

Comentó meditando unos segundos.

Ahora bien, también pensé en otra persona, aquella mujer vestida de negro llamada Cyon. Cuando estuve en el Pandemonium en calidad de testigo neutral con Spica. Se comentaba sobre la muerte de Kazuo, Rania en primera instancia pensó que había sido obra de Varsovia ya que al parecer el chico tenia datos del origen de Natsumi y Nanami, ella le mostró una fotografías a Rania y efectivamente la muerte de aquel muchacho parecía un suicidio, pero Rania alcanzó a ver rastros de sangre que no le pertenecían a él, Rania dijo que al chico le habían disparado desde otro punto, que era como si su propia sombra lo hubiese hecho.

Hizo una pausa tratando de recordar algo más.

Se estaba hablando sobre ese asunto en aquella sala cuando apareció esa mujer y dijo que nos estabamos adentrando en terreno peligroso y por eso no iba permitir que siguiéramos avanzando, le dijo a Spica que le iba a dejar ir, pero a mi no. Y eliminaría a Rania y Varsovia. Me puse en alerta, pero de pronto comencé a sentirme extraño como si algo de mi quisiera desprenderse. En ese punto perdí la noción y cuando volví a la realidad solo estábamos Gabrielle y yo, pero él estaba herido, después nos encontramos ante Mephisto y fue cuando se acordó la tregua.

Observó a todos

Es por ello que he estado inquieto desde entonces, la última vez que estuvimos en la tienda Spica se disculpó con Gabrielle, argumentado que el poder de las sombras de Cyon era muy fuerte. ¿Recuerdan a la dama errante? Pues justo cuando se marchaba de aquella playa, me percaté que a su paso iba eliminando ciertas sombras que estaban acercándose al lugar. Ella se dio cuenta y sabía que en nuestro estado pudimos ser atacados por dichas sombras. Todo esto se vuelto un enorme rompecabezas. Y más ahora que menciona a Bastorius, ¿Creen que se haya puesto de acuerdo con Cyon y Fausto? Si sus poderes igualan a los de un Dios, por algo Fausto tenia tremendo poder tan de repente.

Afirmó.

¿Y de qué forma puede sentir nuestra alma? ¿Cual es esa carta que tiene bajo la manga?

Preguntó de forma muy seria el mayor de los Chassier ya que, si todo aquello ya era una locura.

Al fin Deneb llegaba a la piscina y hablaba con el grupo, Dereck también hacía su aporte, era mucha información en el aire, y había cosas que no le terminaban de cerrar.

-- A ver, vamos por partes, en un principio había dos bandos enfrentados, con objetivos claros, los apóstol querían la sangre que llevamos algunos para abrir la puerta de los cielos y con eso llevar a cabo una especie de venganza celestial, el otro bando, Arrows, quería detenerlos.  Aclaró tratando de poner todas las cartas sobre la mesa, y rompiendo ese silencio en el que estaba sumergido estos días.

-- Actualmente aparecieron nuevos frentes, pero sus objetivos no me quedan del todo claro.  Planteo algunas teorías: Por un lado si Bastorius es un Dios, no debería querer defender su reino de los cielos, y para eso ir contra los apóstol, teniendo el mismo objetivo que Arrows? Sin embargo nosotros también somos enemigos para ellos.  Se quedo uno segundos en silencio y continúo.  

-- Por otro lado, quizás Bastorius pretende que los demás Dioses sean destruidos para no tener competencia, pero en ese caso no deberían ayudar a los apóstol a lograrlo?, y sin embargo también ellos son sus enemigos.  Por lo tanto no me queda claro que es lo que persigue ese Dios, cuales son sus verdaderos objetivos.  Volvió a hacer una pausa para seguir analizando toda la información que tenía hasta ahora.

-- Qué papel juega Yamamoto en todo esto? Esa tecnología se la facilitó Bastorius? Para qué, si con esa misma tecnología los humanos le están dando caza a todas las alimañas que salen de Pandemonium.  Siendo que Bastorius quiere extender aquello, o era para que nos dieran caza a nosotros y ellos tengan una preocupación menos?

Era un panorama muy confuso, había mucha gente metida en ese juego macabro, y no sabia bien que objetivos perseguían algunos de ellos.  Por otro lado Deneb les hablaba de una carta bajo la manga mas fuerte que el mismo Bastorius, lo hacía ver demasiado fácil, a que ser refería con esa carta.

Como si ya no hubiera demasiados frente en juego, también estaban algunos como esa tal Cyon, o la Dama Errante, de las cuales no sabía nada, o que interés tenían en toda esta guerra.

Escucho con atención lo que decía Deneb, mas lo que agregaba Dereck y Alex.  Realmente hubiera preferido seguir disfrutando de la piscina, todo aquello era sumamente confuso, y nadie sabía con exactitud que papel desempeñaba cada grupo, por que todo tenía que ser tan complicado.

Deneb hablaba de un poder que quizás pudiera poner fin a esta guerra, pero para eso tenía que ver sus almas, no se le ocurría como es que haría eso, quizás alguna habilidad mental, pero si con eso terminaban todo esto, pues bienvenido sea.

-- Y cómo hacemos para que veas nuestras almas? Se limitó a preguntar sin entrar en todo ese embrollo de los bandos, de los objetivos y demás cuestiones.

Todos escribió:

Dereck escribió:

Slade escribió:

Mae Iwata

Después de unos pocos minutos de jugar con la pelota, Deneb se acercó a ellos y metió los pies en el agua, era evidente que quería hablar de algo importante y prefería no hacerlo de manera tan formal, eso predispuso un poco a la rubia a escuchar lo que sea que el hombre tuviera que decir. Aunque claro, también tenía sus dudas.

Escuchó a Deneb y atendió primero a lo que opinaba Dereck.

-Recuerdo ese día, Dereck, Malabi parecía escribir lo que te sucedía en un cuaderno y a pesar de estar a la distancia, lo que el predijo sucedió. No se si tiene el poder de leer el futuro o de, alguna forma, manejar la realidad a su antojo. Ahora que dicen que es un Dios, siento que seguramente es capaz de hacer cualquier cosa -comentó al respecto de lo que había mencionado el albino. Por otra parte, se sorprendió por algunos datos que daba el chico sobre otros enigmas, por ejemplo el de Kazuo y los poderes de Cyon.

Pocos segundos después, quien hablaba era Alex. Mae estuvo bastante atenta a lo que decía, y aunque a veces parecía poco interesada o algo despistada, había prestado atención a todas las etapas que se habían dado desde que llegó a la mansión hasta ahora.

-Puede ser Alex, pero piensa: Si Malabi es un Dios que ha mostrado que sus objetivos van en contra tanto de la humanidad como de los otros dos bandos, ¿no es probable que su objetivo sea eliminar todo aquello creado por los Dioses, sin importar si es bueno o malo? -se explayó mirando seriamente al pelioscuro- Quizá tiene algún problema personal con todo en la tierra y simplemente quiere destruirlo. -mencionó con seguridad pero a la vez con algo de angustia en sus palabras. ¿Y si aquello era cierto? ¿Cómo luchar contra un Dios para salvar a sus padres, a sus amigos y al resto de la humanidad? Se abrazó a sí misma dentro del agua.

Miró a Joseph algo dubitativa, pero a la vez se acercó un poco más a donde estaba el hombre.

-Durante mi infancia siempre pensé que era mejor desaparecer del mundo, que todo lo malo que me rodeaba no podía ser cambiado por mi y que nadie más lo haría en mi lugar… pero ahora, se que esos pensamientos solo ayudan a que las cosas empeoren. Si tengo que hacer cualquier cosa con tal de realizar un mínimo aporte a “terminar con toda esta locura”, lo haré… -concluyó, accediendo al pedido de Deneb. Ahora solo restaba saber cuál era esa carta de la que hablaba el hombre y cómo este podría ver a través de su alma.

Mae escribió:

Mae también daba su opinión sobre el tema, la cual escucho con atención.

-- Es otra posibilidad, en vez de la venganza de los humanos que después fueron vástagos contra los Dioses, al contrario, la venganza de los Dioses contra la humanidad y todo aquello en este planeta.  Le costaba imaginar la destrucción del planeta, la extinción de la humanidad tanto como la de los vástagos.  Un escalofrío paso por todo su cuerpo.

-- Pues si vamos a morir de todos modos, mejor morir luchando que quedándose de brazos cruzados, quien te dice hasta salimos victoriosos?  Expresó, volviendo un poco esa pizca de humor que lo caracterizaba.  Le resultaba difícil creer que podían vencer a un Dios, pero tampoco lo veía tan imposible.

Todos escribió:

Deneb

Noah

Dereck era el primero en hablar con Deneb. Indicaba lo poco que se acordaba del incidente sufrido por Bastorius, mientras que Mae intervenía para apuntar lo que había ocurrido.

-Es cierto, pero aunque parecía que Bastorius había podido leer el futuro o cambiarlo, también cabía la posibilidad de que no fuera así. Debíamos de confirmarlo de alguna manera... pero como sabrán, investigar a alguien así es una tarea difícil...

Al escuchar Deneb aquellos datos sobre la reunión, en el que se discutió la muerte de Kazuo, el hombre frunció el ceño y pensó por unos segundos.

-Entonces Cyon mató a Kazuo, por saber sobre los experimentos de Nanami y Natsumi. Quiere decir que Fausto, Pollux y Cyon ya están con Bastorius desde hace mucho tiempo...

Hablando sobre Spica, Noah hizo una breve pero necesaria acotación:

-Escucha, Dereck, el hecho de que Spica sea la hermana de Cyon, no quiere decir que ella deba disculparse por todo lo que la otra haga con sus sombras. Cada quien es cada quién, así que la próxima vez dile que ya no se disculpe por los miembros de su familia...

Deneb asintió sobre lo dicho por el actor, y continuó:

-No tengo dudas de que la Dama Errante vio las sombras de Cyon. En Shangai, VI y yo estuvimos conteniendo fuegos y sombras muy fuertes, intentando expandir el Pandemonium -aseguró.

Movió un poco el agua con sus pies... de pronto el agua de toda la piscina comenzó a hacer un suave remolino, y se calentó un grado o dos.

-¿El propósito de Bastorius? -preguntó- pues si es un Dios me gustaría saber quién es. No es que haya un sólo Dios ¿saben? Tienen nombres, especialidades, ocupaciones... quizás debilidades. Yo creo que es un sujeto muy inteligente, pues se cuida de que no sepamos qué quiere. Ataca a todos, y parece no hacer nada concreto. Y quizás cuando nos demos cuenta ya sea tarde...

Suspiró y los miró a todos con tranquilidad, buscando la manera más rápida y fácil de decirlo.

-No puedo entender por qué un Dios querría destruirnos, pero puede haber razones claro. Sinceramente, sospecho que simplemente no puede hacerlo. Ni siquiera siendo un Dios. Hay otros Dioses, como dije, hay todo un Reino de los Cielos que no lo permitiría. No es cuestión de apuntar con un dedo y volar un planeta sin consecuencia alguna -explicó- creo que lo que intenta Bastorius es convencer a los Dioses de que no valemos la pena, y así conseguir finalmente el apoyo necesario. Por eso no quiero que los XII intenten revelarse contra los Dioses. Creo que Bastorius los anima a revelarse y nosotros le estorbamos. Pero al mismo tiempo, quiere volver paranoico al grupo de los XII para que cometa errores. Si todo se vuelve un caos inentendible de traiciones y muerte, nos destruiremos entre nosotros. Y quizás basado en nuestro horrible ejemplo intentará convencer a todos de que la humanidad fue un gran error. -opinó.

Noah por ejemplo, era el primero en asentir. Pero su semblante era triste, algo desesperanzado.

-Es muy difícil que la humanidad vaya bien si hay un Dios que se ocupa de engañarla y engendrar Caos -dijo Noah- ¿no es algo muy injusto? Hay un Reino de los Cielos ¿no ven ellos esta injusticia? Perdemos amigos mientras intentamos parar el caos ¿y quién nos ayuda?

Deneb observó a Noah, y contestó rápidamente.

-No, Noah, nosotros somos la ayuda de las personas. Y hacemos lo que podemos... pero conociendo todo esto ¿podrías echarte atrás en tus decisiones y ya no ayudar a nadie? -preguntó.

Cuando el dueño de casa volvió a mirarlos a todos, hizo una pequeña sonrisita.

-Lamento que me hayan tomado tan literal, pero no veré sus almas de verdad. Ya lo hago cuando invocan a su Bestia Interior. Esta vez, estaba preguntando sobre su parecer. Pues... habría una posibilidad. Noah ha dado en el blanco. Si un Dios ataca a la humanidad, ¿por qué un Dios no la defiende? En realidad... sí había un Dios protegiendo la humanidad, hace tiempo... -dijo- pero ha perdido sus poderes. Intentar devolvérselos sería muy peligroso, y pocas veces se ha intentado.

Noah se sorprendió con las palabras de Deneb, tanto que ahogó un grito que apenas fue susurro.

-No puede ser...

-Sé que podría robarte otro de tus afectos más profundos, Noah... pero todo depende de la valentía de estos chicos. De si están dispuestos a abrir el libro y leer aquella historia para darle continuación.... -sentenció- si ellos lo quieren intentar, a pesar de saber que pueden sufrir, pueden morir o incluso quedar atrapados en aquel libro... si hay aunque sea uno solo que quiera intentarlo, dejaré que corra el riesgo. Ni siquiera importa lo que yo mismo opine, no puedo negarles esta información ni prohibirles nada... después de todo tienen cada uno una llave...

-Si se meten ahí pueden no salir, o morirse -dijo Noah como si fuera un imposible.

-También podrían traer de vuelta los poderes del Dios que debe proteger este lugar, Noah.

Sin querer, y sin que sea normal para Noah, se había armado una pequeña discusión entre el líder y el peliceleste. Noah golpeó el agua con un puño y el remolino de Deneb se rompió.

-¡Ella ya no quiere hacerlo! ¡Déjala en paz! ¿No podemos hacerlo sólos?

-No lo sé Noah, pero aunque no esté llorando por cada rincón, ¿crees que me agrada ver cómo mueren mis hijos? -preguntó- los Dioses deben cumplir sus funciones, para eso están. Se supone que yo debiera mediar entre Dioses y Vástagos por tener algo de ambos, y es lo que intento. No me lo hagas más difícil sólo porque te agrada la mujer en la que el Dios de este mundo se ha convertido.

-Es sólo que Nanako es feliz ahora... pero...

Deneb ya no dijo más y se volteó a ver a todos.

-Como ven, existía y todavía existe el Dios que debe proteger y evaluar este mundo. Pero con los últimos acontecimientos, podríamos concluir que ya sabemos lo que le ocurrió: tememos que Bastorius se ha encargado de hacerle un boicot a esta Diosa y finalmente la ha reemplazado. Esa historia, está escrita en un libro muy especial, que debe seguirse con mucho cuidado. Dependiendo del final de esa historia, todo podría empeorar o mejorar... y si ustedes toman la decisión de intentarlo, deben estar muy seguros.

-¿Les pides que estén seguros? Si ni siquiera saben lo que deben hacer en esa historia...

-Por supuesto que no saben. Ni yo lo sé, no conozco la historia. No he podido leerla... el libro se abre sólo con sus llaves. Por algo la Diosa los eligió para tenerlas. Sólo les estoy diciendo que deben de tener plena confianza...

Noah se sentó fuera de la pileta. Parecía haber entrado en calor lo suficiente como para aguantarse el frío y sólo mojarse los pies como lo hacía Deneb.

-¿Por qué no dejamos que opinen Amanda y los demás? Después de todo creo que es mucho mejor a quedarnos discutiendo sólo nosotros delante de ellos...

Deneb asintió.

-De acuerdo. Los escucharemos a todos...

Al parecer el juego con aquella pelota había quedado en empate, por lo cual la hora de hablar seriamente había llegado.

Todo aquello apuntaba hacia Bastorius y tenía sentido por lo ocurrido con Dereck. Ese sujeto era muy hábil y una vez conociendo parte de aquella situación a Omeny le parecía poco equilibrada dónde ellos llevaban las de perder. Si Bastorius era un Dios y estaba del lado de los apóstoles aparentemente solo para causar caos, en verdad si le parecía injusto todo aquello.

Sabía de ante mano que en la humanidad se encontraba de todo, tanto buenos como malos y que cada uno sufría las consecuencias de sus acciones, pero ¿Qué había con aquellas personas inocentes, como los niños por ejemplo? En ocasiones uno podía ir por la vida haciendo el bien y sin embargo el destino te prepara cosas feas o incluso pierdes hasta la vida. Esas veces la chica llegó a pensar. ¿Esto es el pago por ser "bueno" con todo lo que te rodea?  

Ahora sabiendo que alguien quería mostrarle a los Dioses que la humanidad no valía la pena con engaños y jugando sucio, más injusto era todo a su parecer.

Deneb mencionó la forma de equilibrar la balanza y era trae de vuelta los poderes de aquel Dios que defendía a la humanidad, aunque "No todos fueran defendibles". Por una parte Noah estaba en contra, tal parecía que Nanako era como la reencarnación de ese ser sublime llevando una vida normal.

De alguna manera, Omeny también deseaba tener una vida normal aún siendo un vástago y aunque, tal y como mencionó Noah, no sabía cual era su parte en toda esa historia, trababa de hacer lo mejor posible.

Para que todo aquello tuviera un equilibrio, debía conseguirse un libro muy importante, pero había consecuencias al intentar llegar a él. Por unos instantes la chica observó a todos y pensó.

Si Dereck quería intentar, Eitan se opondría y viceversa, Kevin aún tenia que conocer su historia y encontrar a su familia tal vez. Alex aún tenia que lidiar con el asunto de su hermano, Mae y Meredith eran chicas que tenían mucho para dar y querían crecer en lo que les gustaba. Noah y Amanda tenían aquel lazo de amistad y cariño y ya habían perdido a otra persona importante para ellos, Haon. Y a todos de alguna manera les había afectado la muerte Gabrielle. ¿Cuantos más? ¿Cuantos más debían caer por no tener una pelea justa o  cuantos más debían llorar, llenarse de rencor y sed de venganza por perder a un ser querido o especial?

Omeny salió de la piscina y con pasos firmes se acercó a Deneb.

Yo... quiero intentarlo. Si es la única forma de que todo esto termine o al menos tenga un equilibrio, quiero hacerlo.

Podría parecer que la chica no estaba en sus cabales aún sabiendo lo que podría suceder, pero de alguna forma pensaba que no tenia nada que perder a excepción de su amado soccer.

Jamás tendré esa vida que un día visualicé, si no hago nada para que así sea. Y aunque pudiera tenerla, ¿De que me sirve incluso disfrutarla si me olvido de los demás? Si ahora soy un vástago es porque se me ha hado una segunda oportunidad de continuar aquí y seguiré si saber cual es mi papel en esta historia si no me atrevo a escribirla o darle un sentido.

Sonrió un poco y observó a todos.

Descuiden yo.... voy a estar bien, he salido de peores y además, no creo que los Dioses, en el reino de los cielos, quieran a una chica loca dando pelotazos por aquí y por allá. Les conviene que siga haciendo todo eso aquí o podría ser un dolor de cabeza.

Deneb tomo la palabra, había muchos nombres que tomaban importancia, enemigos que todavía no había enfrentado, Cyon y Pollux por ejemplo.  En varios de ellos había un familiar, como si fuera tradición que dos hermanos elijan diferente bando y terminen enfrentado, tanto como él con Martín.  Ahora si Fausto que no era un Dios tenía terrible poder, que podía llegar a esperar de alguien como Bastorius.

Por qué será que este supuesto Dios tienen tanto interés en destruir la humanidad, en que lo beneficiaría, o quizás, simplemente estaba aburrido y quiso jugar un juego.  Ahora Deneb hablaba de que existía otro Dios, que era el que defendía la humanidad, pero había perdido sus poderes y despertarlo podría ser muy peligroso.  A Noah no le pareció para nada bien lo que estaba diciendo.

Se trataba de un libro, de leer una historia, no terminaba de entender bien a que se refería, recordó una película que había visto cuando era niño llamada la historia sin fin.  Deneb explicaba que en esa historia se podía sufrir, quedar atrapado y hasta morir, pues para el pelioscuro no había gran diferencia a como estaba ahora, sufría igual, se sentía atrapado en un mundo donde ya nada parecía valer la pena, y no estaba muerto físicamente pero en lo que se refiere a alma tenía sus dudas.  Noah otra vez pegaba el grito en el cielo, era la primera vez que lo veía sentir con tanta profundidad algo.

Se armo una especie de discusión entre ellos, hasta que luego dejaron que los demás opinen sobre el tema, Omeny fue la primera en hablar, y decidió que quería arriesgarse a leer esa historia, aunque a su parecer, la chica no había entendido que en realidad no es algo que tenga que hacer uno sólo.  Salió de la pileta y se puso su bata.

-- Yo estoy dispuesto también a correr el riesgo, no tengo mucho que perder, no tengo a mi familia, no tengo a mi hermano y como están las cosas dudo que lo pueda hacer volver, pues si puedo hacer algo para que los demás aunque sean puedan vivir una vida plena, y feliz, no me importa afrontar los riesgos que hagan falta.  Entre esos chicos que jugaban en aquella piscina, todavía había ganas de vivir, algo de felicidad entre tanta maldad, y muchos de ellos tenían familiares a los que amaban y quería proteger... él no tenía nada de todo aquello.

-- Entiendo que mi comportamiento no ha sido grato para mucho de ustedes, y quizás es como Dereck dijo una vez, estoy perdiendo la confianza en mi, tampoco encuentro un propósito ya en todo esto, pero ustedes tienen mucho por lo que vivir, familia, hermanos, se merecen tener una vida mejor a este caos.  Si había alguien que podía enfrentar esos riesgos sin miedos, sin preocupaciones, sin importar si volvía con vida o no, pero si cumplir el objetivo propuesto era él.

-- Esta historia me vuelve a dar un propósito, despertar a esa Diosa para que ponga fin a todo esto, incluso si mi vida se va en ello, es lo menos que puedo hacer por ustedes, lo más cercano a una familia que tuve estos últimos meses, sería una forma también de emendar mis errores, les prometo que no les voy a fallar.  Empezaba a tener confianza nuevamente, sabía que podía hacerlo, al fin algo lo motivaba nuevamente, no podía salvar a su familia, tampoco a su hermano, pero a esos chicos llenos de vida, le quería dar una oportunidad.

El pequeño Arrows se quedo en silencio escuchando todo lo que explicaba Deneb y las opiniones de Noah, nuevas esperanzas crecían en él, si esa Diosa era despertada al fin podría vencer a los malos.  Los primeros en ofrecerse a llevar a cabo una misión tan peligrosa fueron Omeny y Alex, él también quería ir a ayudar pero si todos iban, quien se quedaría defendiendo, protegiendo a la gente, a Brian de los Guraks, Reptides.

--  Yo me quedo, alguien tiene que quedarse a enfrentar a los enemigos que siguen atacando las ciudades, y si aparece algún apóstol, le haré frente, sé que no puedo vencer, pero al menos frenarlo para darle tiempo a ustedes a que despierten a esa Diosa.

Sabía que en un enfrentamiento de ese tipo tenía las de perder, pero si aguantaba lo suficiente, si retrasaba a los enemigos, y los chicos tenían éxito en su misión, las cosas iban a cambiar para bien.

Todos escribió:

Mae Iwata

Por fin Deneb expresaba a qué se refería con aquella carta que podría dar vuelta la situación, al principio Mae no entendió del todo porque Noah reaccionaba de tal manera pero el pelioscuro con solo pronunciar el nombre de la persona a quien se referían consiguió dar cuenta de lo que pasaba. Se tapó la boca con las manos para ahogar un pequeño gritito.

-¿Matsushima-sama es la diosa que se debería encargar de defender nuestro planeta? -preguntó aunque sin esperar respuesta, aquella pregunta era más bien una reacción a la noticia. Aquella mujer para la que había trabajado, a quien hasta hace unos días había maquillado era en realidad un ser que iba más allá de sus pensamientos. Pero al parecer, estaba debil y según Noah no quería seguir con esa tarea.

Mae se sentía con muchas dudas, por una parte estaba dispuesta a darlo todo pero a la vez no sabía qué es lo que tendría que hacer, además de que Noah mismo no parecía estar nada seguro y el siempre le había dado confianza.

-Siento que tengas que pasar por todo esto, Noah-sempai, pero si lo que dice el señor Deneb es cierto y ella como Diosa, si recupera sus poderes, puede cambiar el rumbo de esta guerra yo voy a apoyar la idea de hacerlo, solo que… -se detuvo para escuchar a los demás. Primero a Omeny, y luego a Alex. A medida que ellos hablaban, la rubia iba adquiriendo un poco más de seguridad.

Ya antes había dicho que era capaz de hacer lo que sea por aportar a la no-destrucción de la humanidad. Pensó en sus padres, seguramente no estarían de acuerdo, y seguramente pelearían como siempre. Pero la rubia los amaba, y tenía amigos, casi hermanos…

-No cambio lo que dije antes, si hay algo que se puede hacer correré el riesgo. Después de todos los esfuerzos que hicimos hasta, de los esfuerzos de Haon, de Gabrielle… no me voy a quedar de brazos cruzados ahora -dijo, tomando su propia decisión.

Todos escribió:

Amanda Grudke

Amanda escuchó con tranquilidad lo que decía Joseph, mientras salía de la piscina y se cubría con una bata. Volvió a sentarse en el lugar donde estaba antes, tomando las flores que había dejado allí y poniéndolas sobre su regazo. Miró alternativamente a los dos hombres mientras discutían, y luego las flores nuevamente.

-Dudo que nosotros en esta situación nos podamos enfrentar a un Dios, incluso teniendo a Joseph que tiene parte de uno, pero si la Diosa recupera sus poderes nos estaría dando una nueva posibilidad, una ayuda con la que no contamos hasta ahora. ¿Pero cómo hacerlo sin perderlo todo? -se preguntó, viendo a Noah con una mirada ligeramente maternal.

En ese momento, no sabía bien qué decirle. Tampoco se sentía en condiciones de consolar o tranquilizar a alguien, por lo cual prefirió no decir más. Miró a los chicos que ya habían hablado y a los que aún no lo habían hecho.

-Si esa historia es desconocida incluso para nosotros, no nos queda otra opción que develarla y mientras tanto andar a ciegas. Suena arriesgado, incluso para mi… Yo no tengo una llave, y no se tampoco cuál es la historia. Pero aún así los apoyaré en lo que decidan, los ayudaré en lo que pueda y los protegeré cuando sea necesario y mis posibilidades me lo permitan -expresó.

Todos escribió:

Sus "hermanos" ya estaban tomando sus decisiones y se mostraban seguros en ello.

¿Estás segura Omeny? No te precipites ya mencionaron lo que puede pasar y no me gustaría que...

Los ojos grises de chica se clavaron en Dereck con cierto gesto de "No voy a cambiar de opinión"

Creo que no te haré cambiar de opinión, bueno no puedo evitar preocuparme, pero se que debo confiar en cada uno de ustedes.

Aún tenia ciertas dudas y la reacción de Noah era comprensible.

Es difícil, pero bien dicen que el que no arriesga no gana y en esta vida muchas veces tenemos que tomar esos riesgos aunque cueste. Nunca sabremos lo que pasará si no lo intentamos y nos atrevemos.

Salió de la alberca y se sentó en la orilla.

Cada uno de nosotros tiene una llave ¿Entonces con cualquiera se puede tener acceso a ese libro?

Si cada uno era diferente supuso que las llaves también, por eso tenia esa duda.

Ya que si fuimos elegidos para portar dicha llave es porque esa Diosa sabía que tarde o temprano debía regresar.

Todos escribió:

Pues no, no voy a cambiar de opinión y estoy consciente de lo que puede suceder. Acabas de decir que se deben tomar riesgos ¿No? Pues eso haré, además deja de preocuparte como si yo fuera una nena de 5 o 10 años

Se cruzó de brazos.

No soy ninguna "princesa" desvalida, no estoy manca ni mucho menos, soy un vástago y como tal se me han brindado y transmitido enseñanzas y habilidades para usarlas con inteligencia, además no tendría nada malo que yo quiera tener el papel del guerrero con brillante armadura. Qué a veces tenga miedo y llore es normal ya que aún conservo parte de mis sentimientos humanos.

Afirmó.

Volví a nacer siendo un vástago y tener una vida fácil ya no está en mi destino. He enfrentado y seguiré enfrentando la crueldad de los apóstoles, pero no caeré por ellos, caeré cuando ya no tenga, brazos, piernas, un corazón para pelear y ya no tenga más que dar.

Omeny estaba mostrando una faceta muy diferente.

Eitan Chassier
Meredith Ackerman

El juego acababa y Deneb comenzaba a explicar varias cosas. Algunos intervenían y exponían sus puntos de vista o dudas. Llegó el momento de las decisiones: Alex y Omeny se ofrecían con Meredith (quien se sentó a la orilla de la piscina) se vio asombrada por el asunto. Eitan aguardó en extraño silencio desde la piscina. Dereck intervino en respuesta a la decisión de la jovencita, con la peliroja asintiendo.

Dereck tiene razón, Omeny. Además, puede que haya otras maneras de solucionar ésta situación.

La chica miró hacia Deneb como si deseara que el sujeto sacara otro plan mágicamente de la nada.

Si hay otra manera, daré todo de mi para ayudarlos.

Terminó de comentar la joven. En eso, Eitan sale de la piscina al usar la escalerilla. El agua tibia escurría de su cuerpo y parecía no verse de suficiente humor como para que el frío del ambiente le intimidara. Se acercó un poco más, ubicándose entre Omeny y Alex.

Ne! Yo también voy. Si es por acabar con toda ésta locura de una vez, me anoto.

Mencionó, convencido. Parecia que el tiempo en que habia aguardado en silencio, lo habia utilizado para meditar el asunto un poco. A pesar de los enormes riesgos que conllevaba esa decisión, internamente se sentía motivado a hacerlo: no dejaría que todo aquel peso recayera sobre los hombros de 2 de sus amigos más importantes.

Ya no quiero quedarme haciendo el ridículo mientras los enemigos patean nuestros traseros cada vez que nos lo encontramos. Ese Malavibra con todo y su enigma ya me tiene la vida hecha cuadros. Primero se metió con Dicky...ahora Flamustro se llevó al pulgoso y Danielle... No tardarán en querer volvernos polvo a todos.

Apretó sus puños y bajó el rostro con cierto enojo de recordar a los fallecidos Haon y Gabrielle. Estaba harto Fausto, de Malabi, Mephisto y cualquier persona que se hubiera dedicado a desgraciarles la vida, además que en parte el miedo de perder a más personas de valor lo llevaba a flor de piel.

Todos escribió:

Deneb

Noah

Deneb, Noah y Amanda los escucharon a todos. Finalmente, el dueño de casa decidió.

-Bien… tómense el día. Si quieren vayan a hacer sus actividades, y si no están de humor, pueden hacer lo que sea. Por la noche vendrá VI, con quien he recuperado el libro, y les explicaremos qué hacer a quienes quieran intentarlo.

Noah salió de la piscina y se ató el cabello hacia atrás.

-Si la Diosa ha dejado en sus líneas de sangre las llaves, y han despertado ahora, por algo será. Pero en esto no hay certezas… no sé si eso alcanza. Los que nos quedemos, cuidaremos de todo hasta su regreso -afirmó.

Luego se secó con una toalla para no seguir tomando frío.

-La verdad, lamento que hayan puesto las llaves en ustedes. Si bien intuyo que son las personas indicadas, creo que de arriesgar a alguien debíamos ser los Arrows más viejos -opinó.

Luego de la muerte de Haon, Amanda y Noah andaban claramente más apagados que de costumbre.

-Me gustaría que Nanako viviera feliz, pero sé que esa Nanako es sólo temporal, y que su verdadera identidad debe ser restaurada, por el bien de todos. Así que aunque no sea algo que me agrade demasiado, estaré apoyándolos -dijo finalmente sonriendo.

Deneb también reflexionó un poco de forma general, sobre lo que estaban viviendo.

-Como mediador entre Vástagos, Dioses y Humanos, por ser un poco de cada uno, creo que los Vástagos dejamos la Edad Oscura (al menos algunos) y es una primera señal de algo importante. Ya no somos aquello que se dice en las películas, al menos nosotros. No he visto Vástagos como Noah y Amanda hasta que llegaron mis otros hijos, con sus recuerdos. Creo que Amanda y Noah, sin poseer recuerdos, se parecen bastante a los que sí saben lo que es ser humano. Y eso es alentador… quiere decir que los hijos de Caín pueden redimirse -dijo Deneb.

Llegaba el mediodía. La temperatura subía algunos grados y el cielo se despejaba. Noah se quedó escuchando a Deneb, con su bata, porque no era común que Joseph hablara sobre esas cosas.

-Yo diría que hay chances de que Martín reflexione al final. Y que Rania lo haga también. Incluso quizás, algunos más de los XII podrían ver que hay otra forma. Creo que vale la pena intentarlo -dijo Noah, con sinceridad- ya pasé toda mi vida viendo ocurrir cosas que creía que eran imposibles.

---

Acciones:

-Pueden tomarse el día o ir a trabajar.

Noah, todos escribió:

Las decisiones estaban tomadas e incluso Noah, muy a su pesar, apoyaba.

¿Entonces debemos aprovechar todo este día antes de que llegue la noche?

Si VI llegaría llevando ese libro tan importante, implicaba que debían actuar lo más pronto posible. Deneb y Noah volvían a brindarles algunas palabras aunque Noah era el que más triste se percibía.

Las últimas palabras del peliceleste hicieron pesar a Omeny y bien era cierto que valía la pena intentar. Incluso ella misma recién había dicho que nunca sabría cual era su papel en esa historia si no me atrevía a escribirla o darle un sentido.

Fue a buscar su toalla y se cubrió con ella, ya se estaba enfriando un poco. Finalmente se acercó a Noah.

Ah, Noah. Quizás no sea el momento o no te encuentres con el mejor humor, pero... me preguntaba si...¿te gustaría hacer algo entretenido hoy? Digo, para que puedas distraerte un rato

Su corazón comenzó a latir fuerte, de momento se sintió muy inoportuna.

Si no tienes ganas de salir puedo rentar unas películas y hacer palomitas.

De igual forma pudo decirle que podrían dejarlo para otro día, pero ¿Cuándo? ¿Y si no regresaba? Omeny sintió cierto arrepentimiento por tener que decirle aquello justo ahora,  justo cuando la moneda ya había sido lanzada y no se sabía de que lado iba a caer. Si hubiera aprovechado más el tiempo para compartir con Noah... "El hubiera no existe, solo queda la continuación"

La "fiesta" en la piscina había terminado, de a poco iban saliendo cada uno de los chicos dando sus opiniones al respecto.  Cuando Eitan se puso en medio de ambos, el pelioscuro se hecho atrás y se puso exactamente detrás de Omeny y el menor de los Chassier, los abrazo desde atrás con una mano en el hombro derecho de Omeny y la otra mano el el hombro izquierdo de Eitan.

-- No eres una nena, lejos de serlo, eres muy valiente, y estoy seguro que lo harás muy bien.  Le dijo a la chica.

-- Seguro Eitan? Esto puede hacer que vos y Dereck no se vean nunca más? Pero si ya lo tienes decidido de seguro también lo harás muy bien.  Él no tenía mucho que perder, pero el menor de los Chassier si tenía a un hermano al que amaba y sus padres, esperaba que todo saliera bien y esa familia vuelva a encontrarse y puedan ser felices.  Soltó a los chicos, y respondió a lo que dijo Deneb.

-- En mi caso, me voy a tomar el día, bah, igual no sé si en mi trabajo sería bien recibido después de todo lo que paso, pero si este puede llegar a ser muy último día, tengo cosas mas importantes que hacer que trabajar, de hecho voy a salir, nos vemos luego chicos, cuídense y aquellos que van a enfrentarse a tan dura prueba, disfruten de este día con lo que tengan más ganas de hacer.

De esa manera, se despidió del grupo, con un aire renovado, ahora tenía un nuevo propósito, y lo que más deseaba en ese momento era poder despertar a esa Diosa para que aquellos chicos sean felices.  Se fue a su habitación para cambiarse, ya había decidido a donde ir, y de quién tenía que despedirse antes de esa partida que quizás no tenía regreso.

Había disfrutado mucho esa reunión en la piscina con sus hermanos vástagos, y le apenaba saber que quizás alguno de ellos no volviera de aquella misión tan importante pero no habían mas opciones, era eso, o quizás el fin de la humanidad, y quizás también de los vástagos.  Por otro lado le alegro que Alex tenía otra vez una pizca de esperanzas y volvía a integrarse de apoco con los demás.  Escucho lo que decía Eitan sobre que estaba cansado de que pateen sus traseros y le causo algo de gracia.

-- Es cierto! Eitan! Patea muchos traseros, yo mientras voy a ayudar a Noah a cuidar todo aquí.  Su relación con Eitan había mejorado mucho los últimos días, si bien eran como el agua y el aceite al menos ahora se llevaban un poco mejor.

Salio de la piscina, y se acerco a Deneb.

-- Hoy... hoy tengo una prueba de canto, me la consiguió un Profesor del Instituto, dijo que tenía una buena voz, sólo me faltaba un poco mas de confianza.  Estaba claro que algo más quería pedirle a Deneb pero no se animaba, dio vueltas uno segundos, saludo a Alex que se retiraba del lugar y prosiguió.  

-- Yo sé que usted tienen muchas ocupaciones, y más con todo lo que esta pasando, pero quizás también se podría tomar el día y venirme a ver, me gustaría mucho.  Le dijo algo nervioso, y mirando hacia abajo, luego dirigió su mirada a Amanda.

-- También me gustaría que vengas vos Amanda, es que, mis compañeros, van a tener a su familia apoyándolos, y bueno, yo creí, que ustedes... son como si fueran un papá y una mamá para mi.  Era muy importante para él aquella prueba, después de vivir en el silencio, luego tartamudear, ahora intentar cantar, y tenía muchas ganas de que alguno vengan a apoyarlo, más sabiendo que podían estar lidiando con los últimos días de sus vidas.

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Amanda Grudke

Amanda se sorprendió bastante por el hecho de que Joseph mencionara aquellas cosas, sonrió para sus adentros, como recordando algo.

-Y no solo nosotros no estamos destruyendolo todo como los vástagos de antaño, hay otros buenos dando vueltas por allí, siempre estuve segura de ello. -sonrió levemente, presionando entre sus manos las flores- Haon decía siempre que para él había una forma de que los vástagos recuperen su humanidad, o al menos sus recuerdos… él estaba casi convencido de eso, quizá no estaba del todo errado -comentó, levantándose de su lugar y viendo como todos decidían hacer cada uno sus cosas.

Escuchó lo que Omeny le decía a Noah, a lo lejos. Como tenía que pasar por allí, al hacerlo apoyó la mano en el hombro del peliceleste.

-Anda, Noah, Omeny tiene razón ¿por qué no le haces caso? -le dijo, mirando luego a la chica de cabello oscuro. Siguió su camino y se despidió de Alex, para luego quedar cerca de Kevin, prestando atención a la propuesta del más joven de la casa.

-Vaya, no me lo esperaba… -dijo, realmente con algo de sorpresa. Luego, asintió- Estaré ahí, entonces, será un honor oirte cantar, Kevin -confesó, sonriendo con sinceridad.

Se adelantó algunos pasos, mirando al niño y luego a Deneb.

-Tengo algo pendiente, termino con eso, me cambio y vamos ¿te parece? -propuso, para luego caminar unos cuantos metros hasta llegar al cementerio de la mansión.

Se sentó frente a una lápida en particular, dejando las flores justo a sus pies. Pero aquello no fue todo, también tomó una pequeña cajita que tenía preparada y la depositó junto a las flores.

Spoiler:

-Estoy empezando a pensar que los necesito… -mencionó, quedándose allí en silencio por unos cuantos minutos. Después se levantó, pasó por otra de las piezas de piedra y la acarició un segundo, esta tenía el nombre de una mujer. No dijo nada, pero se quedó observandola fijamente unos momentos más y se fue.

Al cabo de unos largos minutos, Amanda regresó ya bañada y cambiada. Se había puesto un atuendo bastante casual y recatado, no quería de ninguna manera que el chico pase vergüenza por un atuendo revelador o algo por estilo. Busco a Kevin y le señaló que ya estaba lista.

Spoiler:

-Estoy ansiosa por escucharte cantar ¿sabes? Estoy segura que lo harás espectacular -mencionó.

Todos escribió:

Noah

Noah se estaba retirando cuando de pronto Omeny le habló. El peliceleste, a decir verdad, no parecía demasiado convencido del asunto, hasta que la misma Amanda pasó a su lado, aconsejandole con cariño. Quizás debía de hacerlo.

-¿Tanto se nota mi estado? Debo estar fatal -dijo un poco sorprendido- creí que sería bueno llevar a Haruki a ver a Natsumi. Ya debe de estar desesperado. Y de paso ver qué está haciendo el chico...

Se preguntó qué tenían Amanda y Omeny entre ellas como para sacar a Noah de ahí. Quizás estaban algo preocupadas. Pensar en eso le hizo gracia, pues era él en general el que se preocupaba por Amanda, por ejemplo, luego de la partida de Haon, y por los demás, luego de lo de Gabrielle. Pero nunca se había puesto a pensar en él ni tenía ganas de hacerlo.

-Pero voy a almorzar primero, así que ¿por qué no me recomiendas algún lugar que te guste? Salir es buena opción, pero si voy a un sitio de los míos se pondrá aburrido y me interrumpirán. Mejor me pongo unas gafas y voy a un lugar que no haya ido nunca. De paso me cuentas alguna cosa... -le contestó.

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SunakoSan escribió:

Mae Iwata

La chica asintió ante la indicación de Deneb, de hecho, durante ese rato había pensado que no quería irse ya, que quería hacer todo normal por si era la última vez… se encontró riendo hacia sus adentros por lo pesimista de sus pensamientos.

-No sueles ser así Mae… -se dijo a ella misma, luego negó por el comentario de Noah, pero no hacía falta explicar lo que pensaba.

Omeny hacia sus planes, así como Kevin y Alex. La rubia los despidió y se acercó a Meredith.

-No sé qué tienes planeado, Mere-chan, pero yo iré a la TBS… creo que ahí me siento bastante cómoda y puedo descargarme un rato haciendo mi trabajo. No se si quieres ir hacía allí o seguirás yendo a la Universidad, en cualquier caso si quieres podemos ir juntas -le propuso, esperando una respuesta por parte de la pelirroja.

La dejó pensar unos momentos indicando que se iría a cambiar, ya no sentía ese calorcito de estar jugando en el agua y por otra parte quería ya secarse. Subió hasta su habitación en busca de un outfit para el día. Como todavía hacía frío, se decidió por un atuendo que le cubriera lo suficiente. Al poco rato, ya estaba lista.

Spoiler:

-Seguro me preguntarán por Gabrielle ¿qué les diré? -se preguntó con muchas dudas.

Una vez cambiado, subió a su auto y comenzó a manejar, pero iba despacio, observaba a sus alrededores, la gente trabajando, los chicos jugando en las plazas, parecía mentira creer que el mundo se podía acabar en un abrir y cerrar de ojos, y toda esa gente allí no tenía idea, seguían con sus vidas a pesar de los ataques recibidos en varias partes del país, y todo lo extraño que rodeaba aquella aura multicolor que se expandía por algunos lados.  Era como sí la gente siguiera con su rutina esperando que pronto el ejercito se deshaga de todo aquello, pero no tenían idea de todo lo que había detrás, de la guerra entre una especie llamado vástagos, demonios y los mismos Dioses.

Su primer parada fue en una plaza, se sentó en uno de los bancos, y se quedo observando, las madres jugando con sus chicos, cerquita de él se había armado un partidito de fútbol entre varios chicos, no sólo sus amigos casi como hermanos merecían vivir y alcanzar la felicidad, toda esa gente, esos niños inocentes, también merecían la oportunidad de vivir, su misión empezaba a tomar más peso.  En eso la pelota con la que jugaban fue a parar muy cerca del pelioscuro, un niño de unos 11 años, despeinado y todo sucio de tanto jugar en el barro, se acercó; de alguna manera le hacía recordar a Martín, era bastante descuidado cuando jugaban en  la plaza y siempre terminaba en ese estado.

-- Me alcanzaría la pelota.  Le pidió muy animado, no le quedo otra que sonreír, se levanto, y le dio un buen pase al chico que se fue rápidamente a seguir con el fútbol dejando un gracias en el aire.

Después de un rato, de contemplar como seguía el partido, se levanto, volvió a subir al auto, y emprendió viaje a uno de sus primeros objetivos, su antigua casa, aquella en donde había pasado los mejores momentos de su vida, pero al mismo tiempo había encontrado a su familia masacrada.  Desde aquella vez nunca la había pisado de nuevo, salvo una vez para buscar fotos de Martín cuando conoció a los Arrows, y pasarle las fotos para ver si ellos con sus contactos daban con su hermanito desaparecido.

Cuando llegó al lugar, se bajo del auto, tomo aire y fue lentamente hacia la entrada, la casa había quedado en el mismo estado de cuando la recordaba, obviamente un poco más deteriorada por la falta de mantenimientos en estos años que pasaron sin ocuparla nadie.  Entró a la casa, prendió las luces, todavía funcionaban, de seguro los servicios estarían sacando los pagos de su herencia que había sido atascada por varios de los socios de su padre y nunca pudo cobrarla.  Lo primero que encontró fue el living, donde había compartido con sus hermanos tantos desayunos, meriendas, almuerzo y cenas; se sentó en la silla que habitualmente se sentaba, aunque antes tuvo que limpiar un poco el polvo que había en el lugar, miro la habitación, parecía enorme aquel linving, y a la vez tan apagado y silencioso.  

Cerro unos segundos sus ojos, y cuando los abrió, allí estaban sus hermanos haciendo chistes y riéndose, para luego empezar una épica guerra de comida, había sido un domingo, y habían quedado hechos un desastre, recordaba a su madre bastante enojada por el chiquero que habían dejado, los tres silenciosos escuchando el reto de su madre mientras sus miradas se cruzaban de forma cómplice.  Las figuras comenzaron a desaparecer y volvió a la realidad y la soledad que lo envolvía en ese momento.

-- Como los extraño a todos, hasta los retos de mi madre.  Se dijo a sí mismo.  La próxima parada fue su dormitorio.

Tuvo que limpiar un poco también porque el polvillo era notorio, de hecho había ya bastante telas de araña en el lugar.  Se recostó en su vieja cama, mirando hacia la puerta de la habitación.  Volvió a cerrar sus ojos, y cuando los abrió en la puerta se encontraba Martín, era de noche, una noche tormentosa, y como era habitual su hermanito allí parado, justo en el límite de la puerta mirando con cara de ternero desgollado que convencía a cualquiera para pedirle si podía dormir con él en su cuarto.  Siempre había tenido miedo a los relámpagos, cuando había tormenta, Alex sabía que a los pocos minutos de que sus padres pasaran a saludarlo iba a aparecer Martín buscando resguardo con su hermano mayor.  Le bastaba una mirada al pelioscuro para que su hermano comprendiera la aprobación, y corriera pegando un buen salto a su cama, y se durmiera abranzandolo.

-- Qué te paso Martín? En qué te convertiste? Ahora no le tenes miedo a las tormentas, vos mismo sos una terrible tormenta que quiere destruir todo a su paso, pero si hay un culpable de aquello no eres tú, soy yo, te fallé hermanito.  Cuando se dio cuenta, la figura de su hermano había desaparecido y le hablaba a la nada misma.

Se levanto de su cama, paso por las habitaciones de sus padres, y sus hermanos, para echar una última mirada, era como una despedida.  Salió de la casa, y otra vez en su auto puso marcha a su siguiente destino.

Mae escribió:

Meredith Ackerman

La peliroja le sonrió a la rubia para luego cerrar los ojos y negar suavemente con la cabeza. Enfoca luego sus fogosos orbes rubí en ella.

No te preocupes, Mae. Gracias por tomarme en cuenta, pero el día de hoy quiero quedarme aqui en la mansión. Siento que seré más de ayuda aqui que en la TBS.

Se puso de pie y fue por su toalla para cubrirse con ella. Volteó a mirar a la chica.

Ten un buen día. Si hago algo apetitoso, guardaré un poco para tí.

Sonrió un poco más y se acercó a la rubia para abrazarla con afecto.

Cuidate mucho, ¿está bien?

Mencionó y la vio marchar. De camino a entrar a la mansión, acarició un poco del brazo de Eitan en señal de apoyo para luego proseguir con su camino.

Dereck escribió:

Eitan Chassier

La cara del albino decía todo. Sabía en lo que se estaba metiendo: muchos riesgos, pero estaba claro en lo que quería hacer. Si era algo para acabar con todo ese lío y vengar así las muertes de Gabrielle y Haon, así lo haría. Miró a Dereck y respiró hondo. Desvió la mirada y caminó con cierta prisa a la entrada. Allí iba él a refugiarse en sí mismo y en su habitación... Lo recordó entonces y se detuvo de golpe. Cabizbajo y sin voltear a mirar a su hermano, preguntó:

Ne, Dicky... ¿Pido mucho si quiero pasar el día contigo?

Se le hizo un nudo en la garganta. Incluso sus manos aún estaban vuelto puños y se apretaban para contener su sentir.

Aunque sea haciendo nada, pero quiero que estés allí.

Murmuró.