The Last Story - The World of the Outsider

Recuerdo del primer mensaje :



Al abrir los ojos, Suzume, Haon, Dereck, Alex y Mae se encontraban en una pintoresca taberna, alrededor de una mesa circular, con una bebida delante de cada uno. Las ropas que llevaban eran similares a las que llevaba el grupo de al lado de ellos. Ese grupo parecía que eran mercenarios, tipos que peleaban o hacían de guardaespaldas, si los contratabas.

La mujer de cabellos rosa pálido le decía al rubio de la derecha.

-Zael ¿vas a acompañarme esta noche, verdad? -sin decir lo que insinuaba.

Pero el que contestaba era el otro, el de la izquierda.

-Syrenne, no intentes arrastrar a Zael, sólo quieres que alguien te pague el alcohol cuando se te acabe el dinero, y además no ser la única que quede dormida babeando sobre la mesa...

-¿Acaso te hablé a tí, Lowell? Cierra la maldita boca si no quieres que te la abra más de un tajo...

-Me voy a dormir, esto es aburrido -dijo el chico del parche en su ojo, al estilo pirata.

-Ya hicieron que Yurick se aburriera -dijo la chica de cabellos negro/azulados.

El chico de cabello oscuro negó con la cabeza.

-Yurick siempre hace lo mismo, no creo que sea por la pelea de Lowell y Syrenne...

-Dagran, me voy porque estoy cansado, eso es todo. Hoy hemos trabajado mucho...

-Y mañana trabajaremos más, no olviden que debemos asistir a la fiesta del Conde Arganan, el mandamás de esta Isla. Una oportunidad única en la vida... podría ser el primer paso para convertirnos en Caballeros...

Dagran y Zael se miraron con cierto aire cómplice, mientras que los demás discutían con entusiasmo sobre aquella posibilidad.

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Acciones:

- Comentar sobre lo que han escuchado.

- Tratar de ganarse la simpatia de alguno de los mercenarios.

- Hacer las preguntas que crean sean adecuadas y les ayude como inicio a comprender mas la situación.

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Cuando abrieron sus ojos, Bridget, Noah, Omeny, Haruki y Kevin habían estado caminando por un lugar que no conocieron nunca en su vida.


Además, lo curioso es que vestían algo que tampoco conocían de nada.


Un hombre vestido como ellos andaba delante.

-Vamos, el Conde Arganan quiere esta cueva libre de réptidos... mañana es el gran día y nada puede arruinarlo...

Avanzaron hasta un lugar circular, y estaban atravesándolo cuando una flecha sorprendió al Capitán de esa pequeña patrulla, clavándose en su cuello y matándole en el acto.

Chillidos y gritos se escucharon y salían por todas partes unos réptidos... criaturas que los Arrows conocían por haberlos combatido, junto con los Guraks, en ocasiones de ataques de Mephisto y Bastorius, en su mundo. Los reptidos, como siempre, eran formas mitad humanas mitad reptilianas, que poseían cierta armadura, espadas, cuchilos y arcos.

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Acciones:

- Rescatar el cuerpo del que estaba a cargo de la expedición.

- Combatir a los Réptidos y limpiar la cueva de esas amenazas.

- Retornar al castillo del Conde Arganan (al salir de las cuevas se ve, al fondo de la isla Lázulis, donde se encuentran ahora)

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Vs los gemelos malosos

Omeny



De acuerdo, Kevin, te apoyaré

Omeny invocó su arma y se preparó para atacar, golpeo fuertemente el suelo utilizando Grounder para sacar de balance aquellos dos con aquel temblor.

¡Leónidas, te necesito, apoya a Kevin y cuando el te indique dispara!

Su pigmaleon guerrero apareció junto a Kevin estaba más que preparado..

Neru!

¡Vamos Kevin, hay que patearles el trasero!

Clamó estaba lista para cubrir a Kevin y usar Dissonance I

Spoiler:

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Omeny iba a poyar al pequeño, y le dejaba a su pigmalion como soporte de ataque.  Enseguida se puso en una posición más estratégica algo más alejado de los gemelos y de Omeny quien actuaría un poco de tanque en esa situación... pero era riesgoso para la chica estar en la primera línea.

-- Ishum!! Ve y ayuda a Omeny en la primer línea de combate.  Invocó a su pigmalion, y se hizo una especie de intercambio de pigmaliones, Leonidas apoyaría en la ofensiva al pequeño, Ishum por su parte ayudaría a Omeny a recibir el ataque frontal... enseguida fue con su caballo hasta la posición de su compañera, y se colocó en pose defensiva.

-- Estoy con vos Omeny, listo para atacar!!  Respondió con determinación, levanto su ballesta pero antes utilizo Electra sobre su arma para que sus flechas provocaran una descarga al impactar con sus objetivos.

-- Ahora Leonidas!!  Le dio la orden al pigmalion para que el ataque fuera conjunto, el cual uso su habilidad Armor Break II para que la defensa de los gemelos disminuya y tanto el ataque de su compañera como el suyo causaron más daño, además apoyaría las flechas del pequeño con sus cañones.

Ishum también haría su parte, por un lado con su gran escudo, tratar de defender a su grupo de la ofensiva enemiga, y complementar el ataque de los demás con sus potentes bolas de fuego.

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Gemelos Gurak

Para entender el comportamiento de los Gemelos Gurak, había que comprender primero el contexto. Una invasión largamente planificada estaba fracasando estrepitosamente. La oscuridad de su amo Zangurak estaba debilitándose a pasos agigantados. El mar de Guraks en la isla comenzaba a huir en desbandada y los enemigos eran más, y más poderosos de lo que habían imaginado.

El Gurak de Aura azul lanzó con fuerza su espada oscura hacia Omeny, pero Ishum y la fuerte defensa que les había preparado Suzume, hicieron que aquella arma explotara en oscuridad y se deshiciera antes de tomar contacto con la jovencita.

-Este poder es demasiado...

El Gurak de aura roja se interpuso ante el otro y colocó su espada para bloquear las flechas que lanzaba Kevin. Incluso Electra desapareció tragada por aquella voraz oscuridad. Entendieron entonces qué difícil hubiese sido para los habitantes de ese mundo, pelear con tales enemigos.

Entre Armor Break y los cañonazos y las bolas de fuego, rompieron también la espada del Gurak de aura roja y les dañaron a ambos.

-Rey Zangurak...

-Nosotros...

-L-Le fa-fallamos...

Por último, muy atenta, Omeny lanzó su Dissonance y ambos gemelos fueron barridos, junto con su oscuridad, desapareciendo de la Isla de Lázulis, donde no volverían a ser vistos.

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Cambio de escena

Todos reunidos en el maltrecho salón de baile del Castillo, hablaban sobre todo cuanto había ocurrido en los últimos dos días en la Isla de Lázulis, junto con Yurick, Dagran, Mirania, Syrenne, Lowell, Zael...

El Conde Arganan estaba parado frente a su sillón de mando. A un lado, Calista y Jirall -quien había corrido por su vida cobardemente con el primer malón de asustados de la fiesta- y al otro lado del Conde, el General Ashtar y Sir Therius lucían serios.

Era ahora el momento de charlar un poco entre todos y despedirse. Viajeros y Vástagos sabían que el tiempo se estaba agotando y que pronto volverían a Twilight Town. Pero el Conde sabía que el grupo de Caballeros que había venido de la Capital del Reino se iría luego del evento, y la banda de mercenarios podía cambiar de miembros de un momento a otro, por lo que estaban cubiertos con una buena coartada.

Por ahora, el compromiso de Jirall y Calista había sido postergado, aunque no suspendido. En ese lugar, todavía faltaban algunas cosas que mejorar, pero Viajeros y Vástagos esperaban que los que se quedaban allí pudieran solucionar los problemas que pudieran surgir en un futuro.

De pronto irrumpió Haon, a quien hacía rato no veían ya, hablando con una mucama del Castillo. La linda jovencita de uniforme parecía estar en un humor muy coqueto y no importarle demasiado sus deberes y tareas por el momento.

-Ah, te prometo, aunque tenga que partir siempre pensaré en ti, Aisha...

-P-pero yo soy Ágatha...

-¡Claro claro, es que es el amor, el amor que me hace decir tonterías...! -salió del paso.

A la mujer le pareció una explicación perfecta, ya que seguía embobada en las mentiras románticas del albino. Mientras tanto, Lowell miraba a Haon y le daba un OK de aprobación con la mano, mientras que Syrenne bufaba.

-No puedo creer que haya dos como tú en este mundo, Lowell...

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Acciones:

-Haremos unos posts más, como despedida. Estos son igual de importantes que los que han hecho hasta ahora, tenerlo en cuenta. Lo que digan y hagan puede afectar positivamente en un futuro y será tenido en cuenta.

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Omeny

El trabajo en equipo había dado muy buenos resultados, aquellos seres desaparecieron y fue así como regresaron al castillo.

Gracias, Suzume y Kevin.

Le dijo a su pequeño "Hermano" y la guardiana ya que de alguna manera había sentido su apoyo en batalla.

Me alegra ver que todos estén a salvo, aunque también creo que se van sumar esfuerzos para reparar los daños en el castillo y con las personas que hayan sido heridas en el sorpresivo ataque.

Omeny se dirigió a Calista por unos momentos.

Ha sido un gusto estar a su servicio mi Lady, aunque me disculpo por haberle mentido.

Le guiño el ojo mientras observó a Jirall rápidamente y le enseñó la lengua de la misma manera, aquel sujeto no le había caído nada bien.

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El ataque combinado del pequeño junto a sus compañeras había dejado fuera de combate a los gemelos, los guraks empezaban a retroceder, algunos escapando por donde podían.

-- Gracias a vos Omeny por ir a la primera línea y darme un mejor margen de ataque, y Suzume, las defensas que nos distes ayudaron mucho, son dos personas geniales.  Respondió con una sonrisa.

Una vez en el castillo, cuando ya la amenaza había acabado por ahora, estaban todos reunidos charlando un poco de los últimos acontecimientos en aquel lugar... el pequeño se acercó al General y a Therius.

-- Me despido de dos grandes guerreros, admiro mucho todo lo que hacen, y fue un honor para mí ser un Caballero a sus órdenes, aunque haya sido por un corto período.  Les dijo a ambos, con gran admiración y respeto.

-- Nuestro hogar también esta amenazado, por lo que no podemos quedarnos mas tiempo, tenemos que ir a una última gran batalla, espero que después de eso pueda venir a visitarlos, me gustaría que me entrenen como un caballero de verdad.  Concluyó, para despedirse de esos dos grandes hombres, luego hizo una reverencia a Calista, y por último al Conde, aunque más por respeto que otra cosa, puesto que no le caía muy bien ese hombre.

Cuando Haon apareció le causo algo de gracia la situación, ese vástago era uno de los más terribles de los Arrows, en el tema de diversión y amores.  Parecía que ya todo llegaba  a su fin en ese mundo al que iba a extrañar por su belleza, pero sus amigos, su familia lo esperaban en su hogar, y debía librar una última batalla para al fin poder disfrutar la vida como siempre quiso, aunque había aprendido tantas cosas desde que se había convertido en vástago, de lo cual estaba muy agradecido.

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Bridget se recobraba ya que usó gran parte de su energía con aquella melodía de ataque

-Qué buen trabajo, en verdad fue demasiado para Zangurak. -

Sonrió con bastante satisfacción al ver la labor que habían hecho los Arrows.

-Este lugar tiene una fortaleza increíble y personas por las cuales luchar. Confió en su gente sabrá levantarse y hacer de este lugar algo más armónico. -

Hizo una reverencia ante el Conde y su sobrina, luego se acercó al general y Therius.

- Ha sido un honor conocer a un hombre como usted, General Ashtar ha sabido llevar muy bien su pupilo. -

Sonrió hacia Therius.

-De igual forma ha sido un gusto conocer a tan hábil, fuerte y gentil caballero, estoy segura que alcanzarás tu propósito de pelear por causas justas. Y no dudes en preguntar cualquier cosa, recuerda que no hay preguntas tontas, a veces es más tonto aquel que no pregunta.-

Estrechó la mano del general Ashtar y agradeció.

-Se que esto no es de caballeros, pero si de amiga. -

Bridget le dio un fuerte abrazo a Therius deseándole mucha suerte.

-Creo que tienen muy buenos prospectos para ser caballeros, ¿No es así?  -

Miró al grupo de mercenarios con una sonrisa.

@Okazaki



Después da la ofensiva en conjunto contra el enemigo una visión apareció, donde todo estaba conectado, Zoran había recibido oscuridad de Zangurak, quien a su vez quería quitarles la luz a Calista y Zael para dársela en bandeja a Bastorius, que era lo que quería, para tener un poder completo... cuando la visión termino también había terminado la batalla, y al menos Bastorius no se iba a hacer de la luz a través de Zangurak, ese mundo que se supone les iba a servir de entrenamiento, fue mucho más que eso, puesto que le complicaron las cosas a su gran enemigo.

Las cosas estaban tranquilas, todos reunidos en el castillo cambiando opiniones sobre todo lo sucedido, comenzaban las despedidas, el pelioscuro se acercó a los mercenarios.

-- Bueno, no fue un buen comienzo el mío con ustedes, así que formalmente pido disculpas, y gracias por todo... Dagran eres muy bueno con la espada, y me has dado una mano más de una vez; espero que cuando termine la misión que me espera en mi hogar, me des algunas clases gratis.  Le dijo en tono de broma y se despidió de todos a su manera, con Calista hizo una reverencia de respeto puesto que es lo que muchos hacían.

En un momento dado desapareció del lugar, y fue a la taberna en la que todo había comenzado en ese mundo, para ver como seguía el pequeño al que le habían ayudado en un principio y despedirse de su madre... dejando en claro que iba  a volver en algún momento para ver como iban las cosas y dispuesto a ayudarla en lo que necesitará, tanto ella como su hijo.

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Mae Iwata

Ya todo parecía haber llegado a su fin, habiendo sido Zangurak derrotado y sin la necesidad de hacerle confesar nada puesto que sus planes literalmente habían salido a la luz. Llegaba el momento de despedirse y Mae hizo una pequeña reverencia a los caballeros y luego se acercó a los mercenarios, especialmente a Dagran y Zael.

-Gracias por quedarte a ayudar, Dagran. Al final logramos convencerte ¿ne? nuestra intención siempre fue ayudar -le indicó con un guiño.

-Les veo mucho futuro a ambos, hoy me han enseñado lo importante que es la amistad… enserio, creo que jamás deben perder ese vínculo, fue parte de nuestro éxito estoy segura -comentó, luego miro a Zael y de reojo a Calista que estaba hablando con Omeny- Tampoco hay que perder las esperanzas ¿ne?

Finalmente se hizo algunos pasos hacia atrás pudiendo ver a todos y cada uno.

-Fue muy grato haberlos ayudado, gracias por confiar en nosotros y espero que nos volvamos a ver -indicó finalmente, aunque miró en particular más a los mercenarios dado que había llegado a comprenderlos un poco más e incluso admirar ese espíritu combativo y en busca de un futuro como caballeros que tenían. Sus vidas no habían sido fáciles pero incluso habían llegado a encontrar la luz más rápido que ella.

-Adiós… -se despidió por último para luego desaparecer de aquel lugar.

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Yamada Suzume

Una vez que todos habían hecho sus respectivas despedidas Suzume dio un paso al frente y se dirigió en primer lugar al General Ashtar y a Sir Therius.

-Lo dije anteriormente, pero fue un gusto luchar al lado de tan nobles y valientes caballeros. Han logrado llevar a su gente de manera espectacular y nosotros solamente dimos un pequeño empujoncito. Su comportamiento ha sido inspirador, muchas gracias -comentó haciendo una leve reverencia.

Posteriormente se acercó a los mercenarios, le dio un vistazo a cada uno incluido a Yurick con quien antes había intercambiado algunas palabras.

-Creo que se tienen el puesto más que ganado, han defendido a sus amigos e incluso a gente que apenas conocían. Son valientes y temerarios, pero cada uno tiene una personalidad particular y eso los hace especiales, les agradezco el haber confiado en mis amigos y en mi para ayudarlos, cuando quieran tendrán mi ayuda nuevamente -indicó mostrando una amable sonrisa.

Finalmente se acercó a Lady Calista y Zael.

-Lady Calista no he tenido el placer de conocerla demasiado pero esa luz que llevas es muy importante, cuidala más que a nada y ten presente que sin oscuridad no hay forma de luz que exista. Lo mismo para ti, Zael, eres alguien importante para todos aquí -aseguró con bastante convencimiento. Finalmente, hizo una pequeña reverencia ante el Conde Arganan y volvió con el grupo de vástagos y viajeros, ya era la hora de regresar.