[ER] - Misión Nº 4 - Raíces Profundas

Kyoto era una ciudad magnífica, pero no pudieron disfrutar de un viaje juntos los tres (Dereck, Alex y Mae) porque no podían ingresar como pacientes los tres al mismo tiempo. Entonces, Mae viajó por la mañana, Alex por la tarde y Dereck por la noche, en uno de los últimos autobuses. Cada uno vio cómo el bus cruzaba las ciudades, luego los campos, luego los bosques y... finalmente llegaba a un camino, medio perdido en medio de la nada/bosque. Se internaba en una caminata de 15 minutos hasta una tranquera blanca, un puesto de vigilancia con un empleado que pedía los datos a los ingresantes.


Luego, ingresaban a un lugar construido recientemente. Algo estructurado, todo pintado de blanco. No parecía un hospital, sino un complejo habitacional. Y detrás había una casona que no parecía estar en uso... más al estilo japonés. Y había canchas de tenis, y pista para correr, y corrales y establos.

Pero los médicos les dijeron, a cada uno, que donde vivirían no sería en ese gran edificio blanco. Había, tras todas las canchas y establos (y antes de más bosque) algunas cabañas conectadas por lindos y rústicos caminos. Eran para dos personas, pero no se permitía que hombres y mujeres vivieran juntos.

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Acciones:

-Reunirse por la noche en ese lugar, ya como "pacientes".
-Charlar sobre la "enfermedad" (generalmente mental) que dijeron padecer.
-No es necesario que la enfermedad sea obvia o muy visible.
-Comer en el comedor (edificio blanco) e intentar averiguar sobre Natsumi.

Mae, Dereck escribió:

El viaje de Dereck había sido sumamente tranquilo. Aquellos días en la tienda con Spica le habían ayudado bastante. Al menos tenia un mejor semblante, de forma interna aún había cosas por sanar.

Por medio de Spica supo la finalidad del viaje a Kyoto. Durante el camino estuvo meditando lo que haría.

-Discúlpame por lo que haré, mi amada Isabella.-

Mencionó por lo bajo mientras disfrutaba del trayecto. Al bajar del bus caminó esos 15 minutos sin prisa alguna. A Dereck le satisfacía poder caminar un poco por aquel agradable sitio o al meno eso le parecía.

Al llegar realizó los tramites de rutina y papeleo,pronto estuvo ingresado e instalado como paciente.

Dereck deambulaba por el sitio con un libro en la mano,parecía estar sumido en aquella lectura hasta chocó con alguien y libro resbaló de su mano.

-Cuanto lo siento, fue mi culpa ¿Se encuentra bien?-

Aquella persona era la linda rubiecita a la cual a Dereck le alegró ver, pero debía disimular, entre los demás pacientes pudo ver a la distancia a Alex con la mirada le saludó.

-Disculpa mi torpeza, últimamente estoy muy distraído y una de las consecuencias de tal distracción es algo cómo esto...-

Una leve sonrisa se asomó. Dereck ingresó en ese lugar por "Depresión".

Dereck escribió:

Slade escribió:

Iwata Mae

Después de saber más o menos de que iba la misión, se preparó para lo que seguía. Se fue a dormir muy temprano y al día siguiente tuvo que levantarse por la madrugada, ya que le tocaba viajar en la mañana. A pesar de vivir por muchos años en Japón, no conocía cada rincón de este y el viaje fue de su agrado; solo conocía el centro de Kyoto y no fue difícil notar que el edificio de destino estaba un poco más alejado que eso.

Caminó por más de quince minutos en un lugar que se le hizo entre atractivo y escalofriante. Tardó un poco, puesto que llevaba consigo una mochila cargada y una maleta. Al llegar al puesto de vigilancia, tuvo que dar sus datos.

-Mae Iwata, 18 años -con solo esos datos pudo acceder al hospital. Evidentemente, Arrows ya se había encargado de los trámites pertinentes.

El lugar le pareció un tanto extraño, sobre todo porque por partes parecía un centro de atención médica pero por otro, se veía como un lindo lugar vacacional.

Como sus compañeros tardarían un poco en llegar, tuvo tiempo de recorrer las canchas y las habitaciones y descansar un poco más. Ya llegada la noche fue hasta el Gran Comedor del lugar, donde tomó una pequeña ración de comida y miraba a todos lados casi frenéticamente.

En eso fue que alguien chocó de forma directa con ella, se alivió un poco al ver que se trataba de Dereck. Su rostro lucía más sano que la última vez, pero las circunstancias lo obligaban a verse un poco en mal estado.

-N-no, está bien… qué lindo libro -dijo fingiendo no conocerlo. Levantó el objeto con calma, pero no se lo devolvió rápidamente al chico.

Al escuchar de su problema, se avergonzó un poco. Hizo una leve reverencia como disculpándose. También miró indirectamente a Alex a lo lejos.

-Lo lamento mucho, te entiendo. Y-yo… te devuelvo esto -mencionó alcanzandole el libro con algo de dificultad- Es parte de mi problema llevarme cosas que no me corresponden, pido mil disculpas, pero no lo puedo evitar, a pesar de que ya tengo una gran colección de cosas -comentó evidentemente turbada. Mae había acusado un "Trastorno Obsesivo-Compulsivo" para entrar como paciente.

-¿Dónde está tu habitación? No se dónde está la mía, y la comparto con otra “chica” -mencionó haciendo énfasis a que esa chica podría llegar a ser quien buscaban. En ningún momento dejó de mirar a su alrededor, en todo aquel comedor podría ver una cabellera azul que le ayudara a comenzar con la investigación.

Dereck, Mae escribió:

Alex Slade

Como Dereck no se presento en la mansión le dio los detalles de la misión a Mae, luego supo que el mayor de los Chassier ya estaba al tanto de todo gracias a Spica.  Al día siguiente comenzo el viaje a Kyoto, al principio fue algo aburrido ya que viajaba sólo, los tres se fueron en diferentes momento del día para no levantar sospechas.  Cuando llego a la ciudad, se veía bastante movida, y linda, pero enseguida la dejo atrás y el paisaje era siempre campos, para luego transformarse en bosques, y al fin llegar al lugar.

Bajo del autobus y emprendio la caminata, era un lugar muy hermoso, mucha naturaleza, habrá tardado unos 30 minutos en llegar, ya que iba tranquilo, disfrutando del paísaje; hasta llegar a la civilización, lo recibía un puesto de vigilancia en donde le pedían sus datos para luego dejarlo pasar.  Luego se encontraba con un edificio grande de color blanco, más alla se veía una casona bien al estilo oriental, tambien llego a ver canchas de tenis, establos, el complejo era enorme.  

Atrás de las canchas habían cabañas inmersas en el bosque, allí fueron derivados, es donde iban a vivir, eran para dos personas así que probablemente iba a tener un compañero, esperaba que no estuviera demasiado fuera de sí como para llevarse bien esos días.

Mae habría llegado ya por la mañana pero todavía no se la había cruzado, y Dereck llegaba a la noche, por lo tanto aprovecho el cansansio del viaje para dormir una buena siesta, a la hora de la cena, la mayoría de los pacientes se reúnian en el comedor del gran edificio blanco.

Allí recibio las miradas de Mae y Dereck a modo de saludo y se las devolvio, pero decidió no acercarse a ellos todavía, era muy pronto, no quería levantar sospechas.

Observo que uno de los Doctores que andaban por el lugar miraba a Mae y Dereck, luego a Alex, estaban analizando las acciones de los nuevos pacientes seguramente.  Se sento sólo en una de las mesas del comedor, para la cena, mirando para todos lados, como si en cualquier momento saliera alguien de la nada a atacarlo, y tendría que defenderse, era parte de los síntomas que tenía que demostrar, todo el tiempo a la defensiva.

En primer instancia iba a analizar el movimiento del lugar, ya mañana tendría tiempo de empezar con la investigación, de seguro empezaría con su compañero de cuarto si es que tenía uno.

Ficha de paciente:

Mae, Alex escribió:

-Descuida, si el libro te gusta puedes quedártelo. Ah ya lo he leído tantas veces, me trae recuerdos, pero me han dicho que debo comenzar a "desprenderme" de ciertas cosas si en verdad quiero retomar mi vida como ... normalmente lo haría. Por cierto me llamo Dereck.-

En esa ´última parte, tampoco estaba tan equivocado ya que también comenzó a "desprenderse" un poco de su hermano y no querer estar detrás de él como una madre lo haría.

-Aún no ubico mi habitación, pero en las credenciales que nos entregaron quizas venga alguna indicación o referencia. ah ¿Te dirigías hacia el comedor? Yo también, no tengo mucha hambre, pero quizás cene algo ligero.-

Con un gesto de la mano invitó a Mae a dirigirse hacía el comedor. El lugar poco a poco se llenaba. El albino tomó dos charolas y una se la entregó a Mae, para ir por sus alimentos. (Digamos que era tipo buffet) Cada uno podía elegir lo que quisiera.

Dereck tomó una porción de fruta, gelatina, galletas y leche. Posteriormente buscó en donde sentarse.

-Mira, parece que allá hay lugar, vamos.-

Llegó a la mesa dónde Alex estaba.

-Eh, ¿Disculpa? ¿Podemos sentarnos aquí?-

Cuestionó con calma y tomó asiento. Dereck tomó algo de melón con el tenedor y lo comió.

-Espero que no te incomode que nos hayamos sentado aquí.-

Le mencionó sin mostrar expresión alguna. Dereck no parecía ser mismo Dereck.

Todos escribió:

Natsumi

Julie

Todavía hacía frío, mucho frío, pero las nevadas llegarían recién al día siguiente. Los pacientes y doctores (era difícil distinguir con claridad quién era quién en aquel lugar, y fácilmente podías llevarte una sorpresa) no dejaban de repetir que pronto nevaría y tendrían mucho trabajo que hacer. Sin embargo, muchos otros sostenían que era una "hermosa época" o "el invierno está muy bien por aquí".

Entre tanto, muchos de los pacientes y doctores estaban cenando ya. Hablaban bajo, nadie levantaba nunca la voz, ni reía, ni daba señales de sorpresa. El tono con que hablaban era tan uniforme que daba la sensación de que todos hablaban sobre lo mismo. Aunque improbable, eso era lo que se percibía.

Mientras comenzaban a recoger su cena y se disponían a sentarse y comer, entraron Natsumi y una mujer algunos años mayor que ella. Natsumi llevaba un enterito de jean y debajo un jersey blanco. Terminaba su vestimenta con unas botas de lluvia.

Pudieron comprobar empíricamente que lo que decía Omeny era 100% cierto: Natsumi era el fiel reflejo de Nanami antes de ser cooptada por Fausto. Su tez era muy blanca, pero los trabajos en el instituto y alguna actividad o deporte diario, le habían dado seguramente un poco de tono saludable a su piel. Mas allá de ese único detalle, realmente lucía como Nanami.

La mujer de unos años más que Natsumi, no parecía traspasar la treintena. Llevaba un guardapolvo color blanco, un pullover negro debajo con una fina cadena de oro por encima. Entró apagando un cigarrillo en un cenicero portátil, de esos con tapa. Hablaba animadamente aunque sin gritar, con una voz algo ronca pero muy agradable, cálida. Vieron que el comedor estaba casi lleno (ya que estaba dividido al medio por un biombo y sólo se usaba la mitad del espacio, y todos parecían haberse sentado ya), por lo que tomaron asiento cerca de los "nuevos".

La otra mujer habló primero.

-¿Cómo están? Me llamo Julie. -les dijo, dando la mano a todos y dejando su bandeja en la mesa.

Natsumi también llevaba la suya y la apoyó para saludar, pero no dio la mano a nadie.

-Natsumi, encantada de conocerlos...

-No se preocupen, son nuevos pero aquí no serán la comidilla del lugar por mucho tiempo, en seguida se acoplarán, no tengan dudas. -aseguró Julie- pero cuanto más sepan del lugar, mejor que mejor.

-Julie habla tanto que en seguida lo sabrán todo -bromeó Natsumi.

-Aquí nos ayudamos entre todos. Este no es un hospital normal, aquí no hay tratamientos. Pueden verlo de esta forma: el tratamiento es la vida que llevamos aquí. Horarios fijos, ejercicio, comida sana, aire puro y aislamiento del mundo exterior. No hay radio, ni televisión, ni internet, tampoco teléfonos móviles. Tenemos cultivos, somos casi autosuficientes... -explicaba.

Natsumi sólo comía. Por fin Julie comenzó a hacer lo mismo.

-¿Quieren contarnos algo o hacernos alguna consulta? -dijo la peliazul, para llenar el espacio.

Dereck escribió:

Slade escribió:

Noah escribió:

Iwata Mae

La chica se dejó guiar por Dereck, solo para pasar desapercibida. El ambiente estaba bastante calmo por el momento, pero nunca se sabía cuando podía cambiar la situación. Tomó la charola que le pasaba el albino y simplemente se decidió por una ensalada.

-Me llamo Mae, espero que no te moleste que nos sentemos por aquí -fingió frente a Alex, tal como había hecho su compañero.

La gente del lugar no parecía nada animada, simplemente hablaban en un tono tan uniforme que incomodaba. La rubia comió con tranquilidad sin dejar de mirar alrededor. Al no haber visto una cabellera azul, decidió solamente enfocarse en la puerta, esperando quizá una llegada.

Y así fue, luego de empezar a comer vio entrar a Natsumi con otra mujer. Disimuladamente le hizo señas a sus compañeros, de forma que solo ellos las notaran. Se sorprendió de que casualmente las dos mujeres se acercaran a ellos, pero su rostro no lo demostró, a pesar de que dentro de si eso era lo que sentía.

-A-ah, yo soy Mae, un gusto -dijo con cierta verguenza. La mujer llamada Julie parecía bastante desenvuelta, de alguna forma no parecía encajar en el lugar. O al menos, eso le pareció a la rubia.

Se movió más a un costado, como haciendole lugar a las dos.

-Por lo que dices aquí hay de todo, no pensé que fuera para tanto, pensé que tendría un tratamiento convencional pero no será así por lo que veo... -mencionó con cierto nerviosismo, mirando a las dos chicas para incluirlas por igual. Obviamente, más le interesaba Natsumi.

-Sinceramente desde que llegué me siento muy nerviosa, pero quizá sea de provecho estar aquí, aunque no me gusta para nada estar lejos de mi familia... apenas estoy aquí y ya quiero saber cómo están, supongo que a ustedes les habrá pasado lo mismo cuando llegaron ¿ne?-comentó, dándole un bocado a su ensalada y dejando que sus compañeros también hablen.

Ante la propuesta de la peliazul de preguntar algo, la rubia vio una oportunidad, pero tenía que ser discreta.

-¿Hace mucho están en este lugar? Si es así, quizá saben qué hay detrás de ese biombo -agregó señalando el elemento que dividía el comedor en dos- La verdad es que me da intriga saber qué hay allí -concluyó.

Todos escribió:

Alex Slade

Dereck y Mae se acercaban a la mesa en la que estaba sentado Alex, y de hecho pidieron su permiso para sentarse allí también.  El chico los miro con desconfianza, para luego hacer un gesto con la cabeza como asintiendo que se sentarán si así lo querían, pero siempre con cara de "pocos amigos".  Y sigio comiendo su arroz con pescado.

En un momento se percato de una seña que le hizo Mae y levanto la cabeza para darse cuenta que acaban de entrar una mujer y Natsumi, era idéntica a su hermana, por lo menos a la que intentaron rescatar en aquella primer misión bastante frustrante.  La suerte los favorecía, y las mujeres se sentaban cerca de ellos, y empezaban a presentarse.

-- Axel Daniels.  Dijo con un tono seco como forma de presentación para luego seguir comiendo.  Cuando la rubia comentaba algo sobre su familia, Alex hacía un gesto de molestia, que cualquiera que lo observará se daría cuenta que algo de la palabra "familia" le molestaba.

Frente a la pregunta de la mujer sobre sus inquietudes dijo.

-- Afuera hay un puesto de seguridad, ¿Es realmente seguro este complejo?  La intención de Alex era no dejar duda alguna que debía estar en ese lugar por su enfermedad mental.

-- Según lo que dicen estamos totalmente incomunicados con el exterior entonces.  ¿O te permiten hacer llamadas al exterior desde algún telefono de línea?  Bajo la cabeza y comento.

-- Pido disculpas, según los doctores padezco Estrés postraumático y eso hace que a veces pueda ser algo paranoico.  Finalizó diciendo con una leve sonrisa en sus labios pero algo avergonzado.

Mae, Natsumi, Julie, Alex escribió:

Después de un periodo considerable, dos chicas llegaban. entre ellas Natsumi, Dereck se sorprendió bastante por el parecido e incluso visualizó a Omeny cruzada de brazos con mirada fulminante y diciendo "'¿No que no? Te lo dije"

-Dereck, mucho gusto.-

Dijo hacía las dos y apropósito rosó el vaso con leche al querer darles la mano derramando el contenido un poco, ya que volvió a tomarlo para que no cayera del todo..

-No de nuevo, esta torpeza mía va a causarme problemas si sigo así.-

Con algunas servilletas limpio su lugar. Julie comenzaba a contarles algunas cosas.

-Creo comprender un poco. Imagino que aislamiento es una forma de que apreciemos otro tipo de cosas. Porque la vida allá afuera la mayoría de las veces es algo acelerada y dejamos de apreciar los pequeños detalles.-

Suspiró como recordando algo. Se dirigió a Mae

-Tú familia también se ha de preguntar como estás, es inevitable no extrañar a un integrante cuando esta lejos de casa.-

Sonrió un poco.

-Supongo que el "tratamiento" me ayudará para recobrar el interés y la inspiración de lo que solía gustarme.-

Comió algo más mientras escuchaba a Alex, hizo un esfuerzo sobre humano para no soltar una sonora carcajada cuando mencionó su padecimiento.

-La tranquilidad del lugar, te ayudará a con tus niveles de estrés. Supongo que has llevado una vida bastante presionada o intensa.-

Comentó tranquilamente.

-¿Ustedes cuanto tiempo llevan aquí? ¿Han tenido avances positivos, se sienten bien?-

Preguntó a Natsumi y a Julie.

Noah escribió:

Natsumi

Julie

-¿Detrás del biombo? -dijo Natsumi a Mae- está la otra mitad del salón... es igual a aquí -le contestó la chica.

Luego siguió comiendo su comida sin problemas hasta terminarla, y tomar un poco de agua. Julie en cambio no parecía muy entusiasmada con lo que se había servido.

-Natsumi ha llegado hace poco. Yo ya llevo 7 años aquí... así que me tocó ayudarla a adaptarse -dijo Julie, mientras dejando su plato por la mitad encendía un cigarrillo hacia el final de la comida- este lugar es más seguro que estar en la capital, supongo. Y no, no permiten llamadas. Pero sí cartas...

Natsumi rió tímidamente ante el comentario de "Axel".

-Te quitarás fácilmente tu estrés, aquí no hay mucho de qué preocuparse. Te veo saliendo de aquí muy pronto -le dijo.

Ante los comentarios de Dereck, la que habló fue Julie. Natsumi simplemente le escuchó sin decir nada.

-No, no me gustan los pequeños detalles. Simplemente quiero estar en un lugar para arreglarme... si es que hay tiempo.

-No quiero hablar de esto, Julie -dijo Natsumi, y se levantó.

Julie pareció entender a Natsumi y se levantó también.

-Es lógico lo que siente Natsumi, aquí la gente no suele hablar tan abiertamente sobre "estar bajo tratamiento". Se trata justamente de intentar vivir simple y no tener actitudes como si se estuviera en un hospital. Quizás tu hayas ido mucho a terapia Dereck, pero la mayoría aquí no solemos contar rápidamente lo que nos trajo aquí ni cómo estamos en verdad. Solemos... trabajar, y conocernos primero.

De alguna manera, se notaba que el ambiente se había roto de buenas a primeras. Pero Julie no se enojó, y Natsumi estaba aún allí de pie. Y la muchacha del guardapolvo blanco dio una palmada.

-¡Pero qué ambiente! No no... vamos Natsumi, tu no eres así, si queremos ayudar y que nos ayuden, como acostumbramos aquí, tendremos que romper este hielo que se formó.

-Sí, tienes razón, ya me dijiste que no debía de ser una chica tan cerrada -reconoció.

-Eso es, y ellos pueden comenzar a entender cómo somos aquí. ¿Qué tal si les mostramos los bloques de habitaciones y eso? Son las cabañas, justo en el linde del bosque. La vista es genial, sobre todo en invierno. Como es su primera noche podemos hacer algo ¿no? Como una welcome party.

-Julie es profesora de música -dijo Natsumi- suele tocar la guitarra en nuestra cabaña. Si somos más creo sería mejor -dijo la peliazul en un gran intento por no cerrarse.


Fueron hasta las callecitas del bloque 3, donde había cada tanto una cabaña. En una en especial entraron. Era donde vivían Natsumi y Julie. El lugar era acogedor, tenía una pequeña mesa con varios asientos cerca de la cocina/comedor, donde también había un sofá cama. Mas allá una habitación con sus dos camas y dentro de ella, un baño que compartían.

Y había discos, un equipo de audio, libros y una guitarra que debía de ser de Julie, llena de etiquetas de cosas que le gustaban y de lugares que había visitado.

-Pero más les vale que sepan hacer algo también, porque no voy a ser su showoman toda la noche, ne -dijo Julie riendo, y quitándose el guardapolvo.

Natsumi, Mae, Julie, Alex escribió:

Durante el trayecto a las cabañas, Dereck se mantuvo algo callado. miró de reojo a Natsumi y se acercó un poco mientras caminaban.

-No era mi intensión incomodar con mis preguntas...-

Metió las manos en sus bolsillos y dirigió unas rápida mirada hacia Mae y Alex.

-Esto es tan nuevo, que me siento extraño y la vez nervioso.-

Suspiró mientras su tibio aliento escapaba, seguía viendo el camino, sus pisadas hacían ruido sobre la blanca nieve, Dereck volteaba de vez en vez hacia la chica.

-Debo romper el hielo y hacerme un iglú por si a la persona con la que me toque compartir una cabaña no le soy del todo agradable, al menos viviré ahí como esquimal.-

Le bromeó y sonrió levemente. Por fin llegaron hasta su cabaña y como siempre cedió el camino primero a las chicas y después a Alex, para entrar de último. .

-Me agrada el lugar.-

Recorrió el espacio con la mirada.

-¿Hacer algo dices? mmmm comparto contigo el gusto por la música Julie, solo que.... olvidé mi sax-

Se dio un golpe en la frente por su "olvido"

-Y ahora que lo recuerdo... creo que también dejé mi libro en el comedor.-

Eso si fue un descuido curioso.

-¿Ustedes que quieren hacer?-

Preguntó a Mae, Natsumi y Alex.

Todos escribió:

Alex Slade

Durante la conversasión en el comedor, Natsumi se vio incomoda al tocar el tema de los tratamientos del lugar, al parecer ellas no querían sentirse que estaban en un hospital, sino más bien de vacaciones o algo así.  Cuando parecía que el climax se había roto Julie djo algunas cosas que calmaron a Natsumi para nuestra suerte.  Luego de eso nos invitaron a su cabaña.

En el camino Dereck se acercaba a Natsumi, no se llego a escuchar que le decía, pero estaba claro que se estaba disculpando por lo anterior, Alex seguía con su actuación y mientras caminaba miraba para todos lados siempre alerta, como si alguien los estuviera siguiendo y en cualquier momento atacará.  De hecho tropezo en un momento por mirar para otro lado, pero no llego a caerse.

La cabaña era muy bonita, parecía un centro de sky, realmente así valía la pena recuperarse en un "hospital".

-- Es muy bonita, aunque algo insegura, cualquiera podría entrar y... Bajo la cabeza avergonzado como había sucedido en el comedor por su paranoia.  -- Olvídenlo.  Dijo con una leve sonrisa.

-- Hace años tocaba un poco el piano, no era tan bueno pero me defendía, más alla de eso no hay mucho más de música que pueda hacer, menos cantar.  Expreso cambiando de tema rápidamente, recordando que había incluso tenido algunas clases de piano cuando era chico, ya lo habia olvidado.

-- Creo que empiezo a entender a que se referían, realmente parece un complejo vacacional, puede que me ayude a olvidar... y liberarme del éstres.  Comentaba mientras miraba por una de las ventanas.

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Iwata Mae

La rubia escuchó con atención y observó el comportamiento de ambas chicas mientras acababa con su comida. Al parecer, no habían comenzado al 100% bien pero tenía sentido que Natsumi no se confiara de buenas a primeras, sobre todo porque no sabían bien cuál era el problema que padecía la peliazul.

-Siempre ser nuevo en un lugar es algo complicado, tómalo con calma -dijo como gesto de apoyo a Dereck, después de todo, se suponía que no le conocía.

-Yo tampoco quiero ser cerrada, mi idea es salir lo más pronto posible pero de la mejor manera. Asi que ¿por qué no? Una fiesta de bienvenida me ayudaría bastante ¿ne? -comentó, intentando mostrarse alegre.

Las siguió hasta la cabaña. Personalmente, el paisaje si le parecía lindo pero de alguna forma le incomodaba bastante el frio y la lejanía del lugar. Lo disimuló lo más que pudo hasta que entraron al lugar y volvió a desaparecer el frio.

Miró un poco todo el lugar, especificamente en los objetos personales de cada chica.

-Música, libros, instrumentos musicales y cosas de viajes, todo muy cultural, me agrada -confesó. Se sentó en uno de los asientos comodamente y esperó a ver qué hacian ambas mujeres- Yo puedo cantar un poco, aunque no soy una gran estrella que digamos… -bromeó.

Esperó un poco mietras Julie se preparaba e hizo algunas preguntas.

-Natsumi-san ¿cierto? Antes dijiste que Julie-san es profesora de música ¿a qué te dedicas tú? -preguntó por mera curiosidad, aunque ya sabía mas o menos la respuesta de antemano- Yo estaba preparandome para ser maquilladora y diseñadora de modas, espero salir y seguir con eso, que es lo que más me gusta en el mundo -dijo sinceramente.

-¿Qué es lo que les espera allá afuera? Ya saben, una carrera, un amor… -preguntó dirigiendose a TODOS en la sala, tanto a las dos chicas como a los dos muchachos. Aquella era una forma de disimular el que se conocieran de antemano o que quisiera indagar demasiado en sus vidas.

-Ya estoy lista, nee, cuándo Julie-san diga… -dijo finalmente, carraspeando como para preparar su voz.

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Natsumi

Julie

Natsumi asintió ante lo dicho por Dereck.

-No lo menciones, no hiciste algo malo realmente. Es que, sólo es un mal tema para comenzar una charla, es todo -le explicó Natsumi.

De alguna manera, el acercamiento y el pedido de disculpas de Dereck le hizo poder relajar un poco los hombros y mirar a su amiga Julie un poco más tranquila. Entró entonces Natsumi a la cabaña, un poco menos tensa.

Julie sacó de la nevera unas latas de cerveza, y abrió con un sacacorchos una botella de vino blanco.

-No me miren así, ya soy casi una vieja de 30 y Natsumi ya está lo bastante grandecita. Soy casi de la plantilla aquí ¿saben? Ayudo mucho... así que suelen hacer la vista gorda si es sólo cerveza o vino, y en pequeñas cantidades. Como no podemos ir a la ciudad excepto visitas al dentista o algo así, suelo pedirle a alguien de la plantilla que compre algunas cosas como esto, o tabaco -dijo y puso varios vasos en una pequeña mesa bajita, al lado del sofá. Ambas se sentaron tras la mesa, sobre una alfombra.

-Usen ustedes el sofá, si quieren -propuso Natsumi.

-Disculpen, ningún vaso es igual al otro. Es que se fueron rompiendo, y además no necesitamos demasiados. Espero que no les importe, creo que es lo de menos.

Al ver las caras de todos, Julie rió de forma pícara y luego miró a Natsumi. Ellas se observaron un segundo y luego contaron.

-3... 2... 1... ¡bienvenidos a la fiesta de bienivenida! -dijeron con un tono cantado, medio en broma, y los aplaudieron despacito a todos.

Julie puso un disco para animar la velada. Uno viejo, en un gastado winco.


-Natsumi y yo sabíamos de su ingreso por las reservas que hicieron sus familias, y como Natsumi es nueva y no ha hecho demasiados amigos, creo que otros chicos nuevos pueden compartir su nerviosismo jaja...

La peliazul parpadeó y miró a su amiga, y Julie miró a Dereck.

-¿Sax? Ah, si tocas saxo y piano ¿qué me dices de guitarra? Aunque no toques muy bien sería bueno que te animaras con una canción ¿te presto la guitarra? -le dijo Julie.

Mientras tanto Natsumi dijo atónita.

-Hay tanto por hacer, que leer se hace un poco difícil, sobre todo cuando compartes vivienda con una persona. Probablemente no extrañarás ese libro. ¿Cuál era? -preguntó la chica a Dereck.

-Bill Evans es clásico, me gusta -dijo Julie, encendiendo un cigarrillo Seven Stars y sonriendo- Axel ¿te relajas un poco? -dijo dándole un vaso y unas palmaditas en la espalda- nosotras somos tres damas con unos sujetos que no conocen muy bien ¿no sería mejor que tengamos miedo y tu nos tranquilizaras? -rió.

Natsumi se estiró por sobre la mesa, y tomó una mano de Mae. Mientras, seguía el disco de Bill Evans y se veía una hermosa línea de árboles nevados por la ventana.

-¿En serio? -le preguntó muy seriamente- ¿cantarás? Esto es muy importante, los números de esta velada tienen que venir desde el fondo del corazón -dijo Natsumi, sosteniendo su postura- porque... nosotros hacemos esto creyéndolo... -le aseguró.

Julie encendió unas velas, y apagó las luces artificiales, por lo que sólo quedó un tenue resplandor bailarín de color amarillo y naranja, con sombras de rojo oscuro en los rincones y que encendía de morado las caritas de todos en medio del frío bosque, pero de la tibia cabaña.

-A mi no me espera nada, por eso creo que ya perdió sentido el salir de aquí -para mí- pero algunas personas sí tienen familia y tal -contestó a Mae mientras se tomaba un poco del vino blanco y luego daba una pitada- creo que no voy a salir de aquí...

Julie, Natsumi, Todos escribió:

Cuando observó que Julie sacaba cervezas y vino se sorprendio bastante, no la pasaban nada mal al parecer, y no se privaban de nada.  Luedo de comentar algunas cosas le dieron la bienvenida a los nuevos bastante animadas, ya hasta le daba un poco de pena mentirle a esas mujeres como lo estaban haciendo, aunque cuando mataron a su familia, le hubiera gustado tener un lugar así donde recuperarse de todo aquello, de hecho es probable que esa enfermedad mental que fingía tener, hasta la haya tenido de verdad en aquel momento, cuando investigo sobre ella para la misión se dio cuenta de aquello.

Cuando la mujer se le acerco para alcanzarle un vaso y le dio unas palmaditas en la espalda, lo que le dijo era bastante cierto, y le causo algo de gracia.

-- Debo admitir que tienes razón.  Le dijo sonriendo, aceptando el vaso, y sentandose junto al resto en el sillón.

En un momento que Natsumi tomaba la mano de Mae y decían algunas cosas, se la quedo mirando unos segundos.

Es una chica muy especial, una mezcla de inocencia, tierna y soñadora, una lástima que le este pasando lo que sea que le este pasando.

-- Pues brindemos porque así sea Natsumi. Dijo con una sonrisa y extendio el vaso a modo de brindis.

Julie empezaba a decir algunas cosas sobre que no le esperaba nada allí afuera, era muy parecida a él, cuando le paso lo que le paso con su familia, casi tenia los mismos pensamientos.

-- Te entiendo Julie, tampoco tengo familia... y tampoco me espera nada allí afuera, pero trato de tener esperanzas de que puedo comenzar una nueva vida, de que van a llegar cosas buenas en algún momento.  Eres una mujer joven, sería bueno que lo vieras por ese lado.  Le dijo con voz tranquila, y sonriendo; para luego cambiar de tema, no quería estropear la velada que podía acercarlos a aquellas chicas y luego a la verdad, pero se sentía muy identificado con algunas cosas.

-- Pues, tratare de acompañar a Mai, a modo de coro, si se rompe algún cristal, lo cargan a mi tarjeta.  Comentó a modo de chiste, y diciendo mal el nombre de Mae para que se mas creible que recién se conocían.

Sentándose tranquilamente aceptaba un vaso de vino.

-Para ser una vieja de casi 30 te conservas bastante bien, Julie, te lo digo con todo respeto y mira que he conocido chicas más jóvenes y realmente lucen mayores y algo... acabadas.-

Aquella música era muy buena a Dereck le hizo saber su agrado.

-Bueno lo intentaré, solo espero no destrozarles los oídos.-

Fijó su atención en Natsumi.

-Ah, era un libro de...poesía, supongo que tienes razón, si compartes el tiempo con personas agradables como ustedes, un libro pasa a un segundo terminó.-

Agregó con simpatía

-Ah eso es trampa. ¿Te da pena hacer algo solo, eh?-

Le bromeó a su amigo, Dereck ya había comenzado a "tramar algo desde antes" con algunas cosas que había ahí. Las luz de de las velas daba un toque más acogedor al lugar-

-Gracias por bievenida y salud por ustedes. Por invitarnos a compartir esta noche tan agradable y mágica y digo mágica porque siento que cosas sorprendentes pueden ocurrir.-

Miró a Natsumi con cierta expresión de sorpresa.

-Se los dije, está señorita tiene algo oculto tras la oreja, veamos.-

Se acercó a ella con delicadeza, pasando su mano aun lado de su oído y sacó algo casi mágicamente..

Spoiler:

Lo mostró y entregó a Natsumi mientras sonreía con amabilidad.

-Aprendí por mi padre, solía hacer este juego con mi hermano, con monedas o dulces.-

Suspiró profundamente, su mirada se tornó algo nostálgica de pronto, pero no por mucho, fue por la guitarra y tomó una de las sillas para acomodarse mejor.

-No me especialicé en la guitarra, pero pude aprenderme una canción. Ya tiene mucho tiempo, espero no haberla olvidado.-


Dereck comenzó a seducir las cuerdas de aquella guitarra para que comenzara a liberar sus hermosas notas, incluso cantó también, desafinado, pero lo hizo. Cerraba los ojos y de vez en vez los abria para mirar a los presentes, conforme la canción avanzaba también podían notar como su voz se quebrantaba un poco.


Al finalizar entregó la guitarra a Julie.

-Discúlpenme un momento...-

Salió de la casa como si necesitara algo de aire.

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Natsumi

Julie

Julie sonrió muda ante el comentario de "Axel" y encendió otro Seven Stars. Afortunadamente tenían una pequeña ventana abierta, para dejar escapar el humo que expulsaba Julie. Al parecer, no podía dejar de fumar ni aunque hubiera visitas. Luego suspiró.

-Quizás sea joven aún pero, no sé si haya algo en el exterior que quiera ver. O que no me de miedo de afrontar. 7 años es mucho tiempo. Mi familia se hizo nuevamente, sin mí. Y creo que está bien así... -aclaró.

Pero luego, le tiró un almohadón a Dereck.

-Igual, solamente yo puedo llamarme vieja, niñato -le dijo, algo divertida.

Natsumi también parecía de humor para contestar.

-Tenía una amiga fanática de la poesía. Solía escribir... en la secundaria. Aunque ahora es un recuerdo un poco borroso. A menudo me pregunto si no me lo he inventado... -dijo, mirando fijamente su vaso.

Salió de su ensimismamiento con la canción de Dereck. Las dos chicas lo felicitaron una vez terminada la canción. Al salir Dereck, Natsumi lo siguió.

-Ne... creo aquí todos pasamos malos ratos, alguna vez. Pero no hacemos así las cosas... eres un buen chico, créeme, tengo un don para con las personas. Hay dos tipos de gente, los que pueden abrir su corazón y los que no. Tu estás entre los primeros, puedes abrir tu corazón siempre y cuando quieras hacerlo -le dijo y tirando de él, lo metió dentro- veamos qué hacen los demás, y luego intentemos sí, abrir nuestros corazones.

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Aquella canción le trajo un grato recuerdo, pero en realidad fue otra cosa lo que comenzó a inquietarlo. De momento supo que era ¿Un presentimiento tal vez?

Tuvo que desechar aquello cuando Natsumi le alcanzó. Dereck le escuchó y miró con sorpresa.

-Ah, s-si... creo que no fue una buena forma de reaccionar, pero bueno... tu ganas.-

Volvió al interior de la cabaña, invitando a Natsumi a sentarse primero y luego él. Tosió un poco.

-Disculpen, la emoción a veces me gana...Mejor dicho, trato de evitar que me gane. -

Mae y Alex sabían que Dereck estaba mintiendo, el mayor de los Chassier si se mostraba algo inquieto, más no triste.

-Bueno estamos listos para escucharte cantar.-

Animó a Mae.

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Alex Slade

Frente a lo que contestaba Julie, Alex respondía.

-- Entiendo, en mi caso,  no me queda familia a la que acudir.  Luego la mujer le tiraba una almohada a Dereck por decirle vieja, lo que le causo algo de gracia.  

Se quedo escuchando lo que decía Natsumi sobre la poesía, Dereck empezaba a cantar, y se emocionaba... era raro ver al mayor de los Chassier de esa forma, Alex tuvo que contenerse, y para finalizar la novela dramatica salio de la cabaña con tristeza, pero logro su objetivo, Natsumi fue a su búsqueda.

-- Dereck al ataque.  Se dijo así mismo, pero enseguida volvieron a entrar al lugar.  Luego el mayor de los Chassier animaba a Mae a cantar y Alex se unia.

-- Vamos Mai, yo te salgo de coro.  Le dijo sonriendo.

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Iwata Mae

Haciendo caso a lo dicho por Natsumi, Mae cambió de lugar y se acomodo rapidamente en el sofa, tirandose un poco hacia atrás muy relajada.

Se sorprendió por las acciones de la peliazul, y agradeció aquel gesto. De alguna forma, le pareció calido. Sonrió y negó con la cabeza.

-Claro que viene desde el fondo del corazón, sino, no lo haría. Creo que mis padres me inculcaron esa filosofia desde muy pequeña -dijo sinceramente pero con cierta nostalgia. No mentía, pero recordar viejas epocas tampoco era de lo más grato. No le dio mucha importancia, así que se preparó para su “actuación”.

-Me llamo Mae, M A E -bromeó, como si el chico se hubiese equivocado enserio.

El primero en hacer algo fue Dereck, la rubia se sorprendió por lo de la canción mas no por el jueguito de la rosa; conocía al chico lo suficiente como para imaginarse qué podría hacer. Lo aplaudió cuando terminaba el tema, y parpadeó al verlo huir.

-Supongo que no se sintió muy bien… -reflexionó, aunque a los pocos minutos Natsumi lo hacia entrar. La chica carraspeó un poco y asintió a lo dicho por Alex.

-Muy bien, primero voy a descontracturar un poco el ambiente ¿qué les parecen algunos chistes? -comentó, riendose incluso antes de empezar siquiera.

-Cual es el colmo de un ciego? -preguntó, haciendo una pequeña pausa de 5 segundos- Que se llame Casimiro, que viva en el noveno B de la calle Buenavista y que trabaje en una fabrica de tuberias -comentó a la par que ella misma soltaba una carcajada.

-Doctor, doctor, tiene que ayudarme! No se que me pasa que enseguida pierdo los nervios y me pongo a insultar a todo el mundo.
-Está bien. Cuéntame sobre el asunto.
-¿Y qué cree que estoy haciendo, pedazo de imbécil? -comentó y acto seguido rió nuevamente. No estaba segura de sus chistes eran buenos o no, pero a ella la descontracturaban un monton.

Finalmente miró a Alex y chasqueó los dedos, ahora si cumpliría con lo prometido.

-Bueno, vas con los coros ¿ne? -propuso y comenzó a cantar una canción, esperaba que el chico y los invitados la conocieran.

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Xionia

La canción de Mae y Alex iba llegando a su fin cuando empezaron a sentir una leve vibración en el suelo que comenzó a crecer a cada segundo hasta convertirse en un fuerte temblor que apagó las velas y dejó a oscuras la cabaña. Acto seguido, una explosión ensordecera se sintió fuera del refugio haciendo volar, incluso, una de las paredes del lugar.

-Natsu-chan, sal por favor -oyeron decir a una voz que iba incrementando su volumen paulatinamente- No me hagas tener que sacarte por la fuerza, sal de una vez y acabemos con todo esto rápido y sin dolor…

La voz no era desconocida para cuatro de las personas allí dentro. Tampoco fue dificil visualizar de quién se trataba.


-¡Aaaaanda! Si no estás sola, estás con estos niños ¿ya nos vimos no? sus caritas de desesperación me resultan familiares je -comentó de forma sádico pero dubitativa a la vez. Levantó su espada en el aire para hacer lugar a unas gruesas cadenas que se desprendían de su cintura y se movían descontrolada y amenazadoramente.

-Vine a matar a Natsu-chan, así que corranse del medio porque sino tendré que hacerlo aunque no quieran y quizá no tenga ganas, y eso me pondría muy muuuy enojada -comentó utilizando un extraño tono de voz bastante simpático.


Acciones:

-Proteger a Natsumi y Julie.
-Pelear con Xionia.
-Arrojar 1d10:
>De sacar 1 y 2, el ataque no funcionará y serán heridos por las cadenas.
>De sacar 3 a 6, quedarán levemente heridos, pero podrán reponerse y luchar.
>De sacar de 7 a 10 podrán salir ilesos y producir un daño en Xionia.

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Alex Slade

Cuando la canción de Mae llegaba a su fin, empezarón a sentir una extraña energía, luego una explosión, que voló una de las paredes de la cabaña.

-- Esa voz... no puede ser.  Salio lentamente de la cabaña y su sospecha era cierta, se trataba de Xionia.

-- Vaya, vaya, si es nada más y nada menos que la chica de metal.  Dijo muy tranquilo aunque por otro lado se sentía molesto, de todos los malditos apostol justo Xionia tiene que aparecer allí que con su espada no le causa daño alguno.

-- Mae, Dereck se las encargo, mis ataques no la afectan.  Enseguida corrio hacia Julie y Natsumi, las abrazo a ambas, y uso su hablidad Reappear para alejarlas unos metros del lugar, luego frente a ellas clavo su espada en el suelo y la energía se iba restableciendo de a poco.

-- Tengo un as en la manga, Blue! Te necesito!  Rápidamente aparecio el extraño pájaro.

-- Bii? Biii biiii... Biiiiiiiiii!!!

-- Al ataque Blue, utiliza Cold Breath!! El animalito volo hacia Xionia y lanzo su rayo de escarcha que había incrementado su fuerza gracias al lugar frío, y la nieve.

El miembro 'Slade' ha efectuado la acción siguiente: Lanzar los Dados

'Dado de 10 Caras' :

Resultados :

Alex Slade

El ataque de su Water Pengdra no habia tenido éxito.

-- Siempre tengo la misma suerte con la chica de metal.  Llegó a decir cuando justo lo alcanzaba una de las cadenas que habían salido de la espada de Xionia haciendolo volar varios metros.

Se levanto del piso algo dolorido, donde le había impactado la cadena tenía la ropa rasgada y algo de sangre empezaba a fluir.

-- Maldición que suerte tengo, Blue!! Hagamos un ataque sincronizado, utiliza otra vez Cold Breath!!.  Mientras el pájaro se preparaba para lanzar otro de sus rayos Alex utilizaba su habilidad Reappear pero esta vez para desaparecer algunos escombros de la cabaña y hacerlos aparecer sobre Xionia con la intencion de que le cayeran encima.

De esa manera hacía un ataque sincronizado con Blue, escombros que caian sobre el enemigo de la nada, y el rayo de escarcha que también se dirigía hacia ella.