[ER] - Misión Nº 3 - Hinohara

Recuerdo del primer mensaje :


Guiado por su instinto, Eitan deambuló por Tokio durante la noche, hasta llegar al sector oeste a una villa llamada "Hinohara". Era una zona boscosa, de montaña, donde el espíritu rebelde de la bestia interior del chico se sentía un tanto más calmado.

Después de unos 30 minutos de avanzar por el barrio, el león en miniatura llegó al monte y encaró a los primeros árboles que se movían con la brisa nocturna. Allí, Eitan vio que incluso en Tokio había algo verde para disfrutar. Ése fue el primer pensamiento consciente del chico, después de convertirse en león.


La brisa se sentía un poco más fresca de pronto. Se escuchaban algunos "llamadores de ángeles" y amuletos tintineantes que la gente del pueblo colgaba en los árboles.

Eitan se dio cuenta de que los gatos de antes le habían transmitido lo siguiente: él no era un animal común, y ellos estaban incómodos con su presencia. Entonces el menor de los Chassier se comprendió que a los animales comunes no les agradaba compartir sus territorios con Vástagos y que no podría vivir como animal para siempre. Fue otro de sus pensamientos.

Subía sin razón, por una escalera hecha de piedra. A medida que ascendía los ruidos de la fauna se acentuaban y las estrellas se hacían más visibles. Los árboles armaban una tupida contención vegetal a ambos lados. Minutos después encontró un descanso amplio, de césped, donde se levantaba un viejo templo y se podía leer un cartel que indicaba a las personas que se encontraban a mitad del ascenso.

Eitan comenzó a escuchar de forma un poco más consciente, gracias al ambiente liberado del lugar. Una voz se elevaba y se sentía claramente.

-Es raro ver a un pequeño león por aquí -la voz era algo áspera, pero joven- es una sorpresa... -agregó.

Omeny - Todos escribió:

Kevin Iruka

Cuando Omeny se dirigio a él, y le dijo unas cuantas cosas, no pudo evitar responder.

-- No es del to-todo así, entiendo que debe se-sentirse mal por lo que hi-hizo en Shangai, y que pu-pueda tener miedo de ha-hacerles daño, pero a ustedes.  Miro unos segundos al cachorro.  -- Conmigo es di-distinto... Intente acercarme al principio, pero él me ignoraba, ni-nisiquiera me di-dirigia la palabra.  Volvio a mirar a Omeny.  -- A ustedes quizás le mu-muestra otra cara, y no sus ve-verdaderos sentimientos, a mi... a mi no me mu-muestra ninguna, no existo para Eitan, pero al pa-parecer nunca se dan cu-cuenta de nada.  

Finalizo diciendo algo molesto, ya que desde que había llegado a la casa estaba a la vista que Eitan pasaba por al lado suyo y lo ignoraba completamente, bajaba al desayuno y apenas si lo miraba, no podía ser que estuviera comparando el trato de Eitan con respecto a ellos, a el trato que tenía con él.  Era muy distinto, con ellos interactúaba bien, o mal, a veces jugaba, a veces se enojaba, y a veces charlaba.  A él simplemente lo ignoraba.

-- Pe-pero no creo que sea el me-mejor momento de hablar so-sobre estas co-cosas, quieren sacar a Eitan de... de aquí, pues no los voy a de-dejar solos.  Dijo al mismo tiempo que volvía su mirada a Naugrim para ver sus acciones, de seguro iba a atacar.

Todos escribió:

Naugrim

-El joven tiene un buen punto ahí -dijo el sujeto, observando a Kevin- lo que dice sobre Eitan es cierto. Y está bien que tenga sus propias dudas sobre mí. Soy un "enemigo". Pero les daré un consejo: Les va mal a las personas que todo lo ven como "amigo-enemigo". Muchas veces se pierden de experiencias muy enriquecedoras por tratar a algunas personas como "enemigos" y al mismo tiempo pueden ser traicionados por aquellas personas que elijen obstinadamente como sus "amigos".

En cambio, al mirar a Omeny, Naugrim pareció un poco más serio.

-Y quienes piensan que lo tienen todo muy claro a menudo, luego de un tiempo, se dan cuenta de que no saben qué camino estuvieron andando. Jovencita, uno es lo que hace, no lo que piensa o quisiera hacer o no sabe cómo hacer o no se anima a hacer. Tú puedes querer arriesgar tu pellejo por Eitan con mucho gusto, pero no obligues a los demás a hacerlo. ¿Por qué otras personas no pueden hacer un poco lo que Eitan hace? ¿Por qué este jovencito debe escuchar tus sermones, si es que no salva a tu amigo?

Naugrim volvió a mirar a Kevin y negó con la cabeza.

-Piensa en los hechos concretos. Yo no los ataqué, y no traje aquí a tu amigo. Y podría haber llenado este lugar de Apóstoles que estarían matándolos en este momento, y no lo he hecho. Incluso si alguien de mis compañeros me ha seguido por pedido de Mephisto o Bastorius, he permitido acercarse a Noah para que ustedes no fueran interrumpidos en esta charla. Y ahora, ayudaré a Eitan para que puedan hablar con él. Piensa, jovencito... ¿qué pasaría si... ustedes fueran los equivocados esta vez? -le preguntó a Kevin.

Hizo un chasquido con sus dedos, y Eitan comenzó a recuperar su forma normal, hasta quedar completamente como humano otra vez.

-Buenas noches Eitan. Tus compañeros te han seguido hasta aquí para que retornes con Deneb y cía. Por mi parte me presento, me llamo Naugrim y soy uno de los XII. Soy un experto en Bestias de vástagos... materia en la que creo, tienes algunos inconvenientes. Si quieres, puedo ayudarte. Si quieres hablar con tus amigos hazlo, esperaré -le dijo.

Luego, recostó su espalda sobre una figura de madera que representaba a un enorme gato, y se cruzó de brazos.

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Meredith Ackerman
Eitan Chassier

La peliroja no habia mencionado nada al respecto. Sencillamente se mantuvo atenta a lo que decían de una parte a la otra. Suspiró ante la forma en que Kevin describía a Eitan como alguien que sencillamente le ignoraba. De forma fraternal, cruzó con su delicado brazo por la espalda del chico en señal de apoyo. Sonrió un poco al más pequeño y regresó su atención hacia el peliverde. Le llamó la atención algo que el sujeto mencionó.. ¿Qué pasaría si eran ellos los equivocados?. Meredith poco de experiencia tenía al respecto como para emitir el juicio, pero el sujeto parecía centrado y realmente dispuesto a la no confrontación, lo que le generaba una sensación de confianza a sus palabras.

Naugrim, lo que mencionas es muy intrigante. ¿Sabes algo que nosotros no sepamos?

Preguntó la chica claramente interesada y quizás con una chispa en sus ojos. Aquella historia en la que estaba inmiscuida resultaba ser tan emocionante como un libro de misterio. Quería enterarse de todo. No transcurre mucho tiempo cuando Eitan es transformado nuevamente en humano con una facilidad impresionante por voluntad de aquel apostol, cosa que a Meredith sorprendió un poco. El pelilila se vio sentado y fijamente mirando a Omeny como hasta antes de ser convertido. Se vio confuso por unos instantes, ahora mirando a los demás.

Ora! ¿y ustedes qué hacen aqui?

El chico miró alrededor con curiosidad, con un claro gesto de no entender algo. Se puso de pie.

¿Dónde estoy? ¿Y mis cosas?

Se preguntó prácticamente a sí mismo... Aún todos sus recuerdos como bestia no encajaban en su cabeza. Luego escuchó la voz de Naugrim, por lo que se sobresaltó y volteó de golpe. El sujeto le ponía al tanto de la situación. Se cruzó de brazos e hizo una mueca de fastidio ante la descripción de su habitual problemilla.

Ora, ora! Gracias por recordármelo! Ya debo ser una eminencia entre los apóstoles por eso!

Sin embargo, lo último le llamó la atención. Antes de contestar, miró examinadoramente al rostro del sujeto.

Ne! Es sospechoso que alguien como tú quiera ayudarme. ¿Qué es lo que quieres de mi?

Preguntó el ojiazul. Era realmente extraño para sí que aquel hasta se tomara la molestia de esperar por él.

Lo que decía Naugrim tenia bastante sentido, no sería la primera vez que escucha que un amigo traiciona a otro, y que a veces los que parecen enemigos terminan demostrando algo diferente cuando se los empieza a conocer, o a enteder, en un momento se le vino a la cabeza Rania, pero era algo distinto, ella había matado a esos niños en vez de darle una oportunidad de vida, quizás no era enemiga, pero era asesina, aunque si aquellos niños la habían perdonado... muchas cosas se le cruzaban por la cabeza, mucha confusión.  Meredith lo tomaba con su brazo y le sonreia, Kevin le devolvio la sonrisa y apreto su mano con fuerza.

Ahora el hombre se dirigia a Omeny, y le decía varias cosas.

-- Mas alla de que quizas Omeny no... no pu-pueda ver que mi re-relación con Eitan es di-distinta a la que tiene con ellos, ta-tampoco me obligo... si los quiero ayudar es porque ellos le tienen afecto a Eitan, y... y son como mis he-hermanos.

Naugrim ahora se dirigia a él nuevamente y le hacía una pregunta.

-- De-debo admitir que no me consta si sos enemigo o no... pe-pero en el grupo que estoy, en el cual confío, te ti-tildaron como un enemigo, así con to-todos los apostol... sin embargo... Ra-rania también era enemiga, y ahora se su-supone esta de nu-nuestro lado.  Se quedo unos segundos observando al hombre, mientras pensaba todo aquello para luego decir.  -- Sí, pu-puede que este equivocado.

Empezaba a dudar sobre Arrows, al mismo tiempo que sobre los vástagos caídos... Acaso los Dioses no se merecen ser castigados por abandonarnos a nuestra suerte, por dejar que Brian ahora este en un hospital, por permitir toda la maldad que existe, por dejar que mi famila me abandone como lo hicieron.

Lo próximo fue Eitan volviendo a su forma humana, le dijo que si quería podia hablar con sus amigos...

Como era de esperar nisiquiera nos dirigio la palabra, en vez de eso se puso a quejarse porque Naugrim le recordaba los problemas que tenía para controlarse, no sé que verá Omeny en aquel chico, pero sólo piensa en él, y por el único que demuestra preocupación generalmente es por su hermano.

Después de observar la reacción de Eitan, prefirio ir a sentarse contra una pared, siempre con la ballesta en sus manos por si las dudas.

Ahi lo tienen, que los demás se encarguen de hablar con Eitan si es que puede entender algo aquel cabezadura, me quedaré aquí observando y si las cosas se ponen feas los voy a defender, pero no tengo ninguna intención de intercambiar nisiquiera una palabra con él, se dijo a así mismo algo molesto.

Todo escribió:

La chica observaba a Naugrim de cierta forma extraña.

Spoiler:

Infló las mejillas y comenzó a manotear con desesperación de forma graciosa.

-¡Ey, ey, ey, ey! ¡Yo no estoy obligando a nadie, estoy hablando por mi y solo por mi, soy responsable de lo que digo, hago y haré y aceptaré sus consecuencias! ¡Si los demás no desean que Eitan regrese por la razones que sea, se respeta, pero yo me quedaré por que estimo a Eitan y es razón suficiente para mi y si me equivoco y he de errar el camino es muy mi problema!-

Respiró con agitación mientras cerraba sus puñitos.

-Para sermones eres más apto que yo...-

Retomó su postura habitual y miró a Eitan.

-Venimos porque te convertiste en cachorro de León y estaban denbulando por la cuidad. Te siguimos hasta aquí. Se que por nada del mundo deseas volver a la casa, pero.. ¿Qué es lo que quieres hacer? Dime Eitan, para saber de que forma te ayudo.-

Mencionó ya con mal calma.

SunakoSan, Okazaki y todos escribió:o.o

Gabrielle Cohen O.

Gabrielle no supo que decir a las palabras del apóstol sobre que estaban obligando a Eitan a hacer algo que no  deseaba... pero a veces así era la vida, ¿No? No siempre era nuestra voluntad la que se cumplía y era ya como cada quien tomaba el asunto que las consecuencias eran favorables o un verdadero desastre. Se cruzó de brazos y negó a lo que decía Kevin y Omeney, Meredith parecía ser más calmada.

-No Kevin... no... no hables por la herida... después esas palabras te dolerán- le dijo acariciando su cabello antes de que se fuera a una de las paredes -Ya, ya Omeney... no te ves linda cuando te enojas- le sonrió -Yo también daré mi mejor esfuerzo por tratar de que Eitan vuelva...

Suspiró, de cierta forma era el mayor ahí y debía hacerse cargo o los pequeños empezarían a descarriarse.

-Naugrim, Soy Gabrielle... Me gustaría saber una cosa... ¿Por qué dices que somos los equivocados?- sus ojos azules estaban pendientes del apóstol hasta que Eitan volvió a la normalidad.

Al inicio no dijo nada, aún el recuerdo de lo sucedido en a mañana estaba presente, pero... pero... tenía que estar con Eitan y protegerlo, incluso de sí mismo. Se lo había dicho incluso molesto y dolido por todo lo que le había hecho sacar. Pero así eran las relaciones, cresta- valle-cresta... ahora no sabía cual era pero sí que su voluntad estaba en ayudar al hermano de Dereck.

-Como dice Omeney... estamos aquí para ayudarte. Si no quieres regresar a la mansión, yo ya no te obligaré- se encogió de hombros -Pero lo que no puedo dejar pasar es que te estás convirtiendo en algo que no es Eitan del todo. Pero sobretodo, en un peligro para la gente y los animales que no pueden defenderse- miró al apóstol de nuevo -¿Qué es lo que quieres a cambio de ayudar a Eitan? Y si está en mis manos satisfacer tu demanda... me haré responsable- dijo serio a Naugrim. Si Rania había cambiado podría ser que ese sujeto tuviera algo más que mostrarles. En ese momento tenían que arriesgarse con tal de que el chico no se perdiera... que Dereck pudiera volver a verlo.

Todos escribió:

Naugrim

Naugrim rió con todo lo que ocurría.

-¿Están seguros que este cachorro es su amigo? -preguntó Naugrim, algo impactado por la actitud de los Arrows respecto a Eitan- yo diría que hasta parece que no se conocen, siquiera.

El peliverde miró a Gabrielle y, luego de pensar por un segundo le respondió.

-Pongámoslo así... si no ayudo a Eitan, pronto será una Bestia sin control. Por mí está bien, me encantan esos Vástagos... pero a ustedes eso les preocupa ¿verdad? Pues si recupero un guerrero de Arrows, debería ganar uno para los XII ¿no? -dijo Naugrim- o Mephisto me regañaría. Ten en cuenta que él quiere que los ataque y los mate a todos, y me arriesgo yo mismo al no hacerlo de inmediato -le dijo.

Finalmente, mirando a Eitan, Naugrim agregó.

-Eitan, tengo curiosidad de que siguieras por este camino y te convirtieras en una Bestia maravillosa y bella, en libertad. Pero ellos no quieren, así que estoy pidiendo algo a cambio por renunciar a mi curiosidad.

---

Acciones:

-Decidir si alguien va a entregarse a cambio de que Eitan sea ayudado.
-Decdir si, en cambio, rechazan la oferta. Si la rechazan, deberán si o sí atacar a Naugrim en el mismo post, como muestra de que lo dicen en serio.

Gabrielle Cohen O.

La sonrisa del rubio se hizo mayor y se acomodó el cabello

-Sí- contestó sin dudarlo si quiera -Aunque él no me considere como tal, el simple hecho que yo sí lo tome como mi amigo hace que sea capaz de estar aquí para ayudarlo- y luego se rió -¿Y? Las personas pasan la vida conociéndose unos a otros, incluso los que ya llevan varios años juntos y es que siempre hay algo increíble en cada quien...- contestó y miró a Eitan unos segundos

Le sostuvo la mirada al apóstol, lo escuchó con calma, sabía que los pequeños se alterarían, pero debía poner orden a ello. Les hizo un gesto de que se quedaran donde estaban.

-Quieres vida por vida...- dijo Gabrielle sin empacho, era un trueque, se cruzó de brazos -Como te dije, me haré responsable... pero antes necesito una seguridad- comentó calmadamente -¿Cómo estoy seguro que Eitan no estaría bajo tu poder como Rania lo hizo alguna vez?- preguntó levantando la ceja -Debo tener la seguridad que él será completamente libre... - su corazón latía con fuerza -Kevin, cuida de Omeney y Meredith... eres el mayor- le dijo mientras se acercaba unos pocos pasos al apóstol ¿Y bien?

Sabía que estaba haciendo una locura, pero era lo mejor, Eitan lo había dicho y seguro todos pensaban igual. Así también ya no sería una carga y mucho menos el foco del peligro para Dereck, su condición actual era su culpa, y solo culpa de Gabrielle. Quizá no volvería a ver al albino... a Kevin a todos ellos... pero debían hacer algo por el chico tonto que era Eitan. ¿Dónde diablos estaba Noah? No desearía irse sin verlo por última vez.

Gabo, Naugrim, Todos escribió:

Kevin Iruka

Después de decir todo lo que tenia que decir Gabo, no podía creer que se estuviera entregando por alguien que hace unas horas le había propinado una golpiza y le había dicho un montón de cosas hirientes.  Cuando el rubio dio unos pasos hacia el apostol, una flecha de Kevin cayo justo delante de él, como advertencia.  Rápidamente se levanto del suelo.

-- En serio crees que te voy a de-dejar ir así, romperías mu-muchas promesas, la que le hiciste a Dereck de cu-cuidar a Eitan, si te vas, ya no podras ha-hacerlo.  Y Rania, dijistes que no la ibas a de-dejar sola, acaso le me-mentistes?  Utilizo su habilidad de invisibilidad para que nadie lo detenga, y reaparecio al lado de Naugrim mirando fijamente a Gabo, mientras dibujaba en su agenda el rostro del rubio.

-- No pu-puedo cuidar a na-nadie, apenas me pu-puedo ciudar a mí mismo, en cambio tu si pu-puedes... y no hice ninguna promesa que pu-pudiera romper... el que se va con Naugrim soy yo.  Dijo de forma determinante y muy seguro de su decisión, después de todo no tenía mucho que perder, nunca había sido querido por nadie nisiquiera por su familia... no tenía a nadie, y cada vez se sentía mas molesto con los Dioses, para que defenderlos si no hacían nada por ellos.  Luego observo al apostol.

-- Ya... li-libera a Eitan, y va-vamonos de aqui.  No le importaba Eitan, pero tampoco quería que le pase nada malo, y no iba a permitir que Gabo se sacrificara de esa manera.

Slade escribió:

Gabrielle Cohen O.

Miró un poco molesto a Kevin por decir aquello, no había dicho nada de su promesa a Eitan, no quería que fuera a tomarlo peor de lo que ya lo había hecho. Suspiró un poco triste. Miró a Omeney y a Meredith como diciéndoles que no se acercaran.

-En este momento estoy cumpliendo mi promesa. No dejo a Rania sola, Estás tú y todos los demás de Arrows- contestó pero su tranquilidad se rompió cuando lo vio al lado de Naugrim.

De inmediato corrió hacia Kevin... y lo tomó de la mano para jalarlo hacia él

-No. Tú no, aún tienes mucho por hacer... lo siento mucho- contestó y utilizó hipertermia para mantenerlo quieto con la fiebre que ahora tendría Kevin, no podría levantarse por el lapso de unos minitos -En este instante como el mayor, estoy cuidando de ti. Aún tienes mucho por hacer y recuerda algo muy bien, tienes un camino por delante, no te preocupes por el pasado... ahora hay muchos que te queremos.- lo golpeó en la garganta para quitarle el aire y lo lanzó a los brazos de Omeney -Además, él no nos ha dicho cuales son las garantías... no puedo dejar que te vayas así como así- su espada apareció en sus manos, con ella amenazó al apóstol en el cuello -Sé que no es la mejor manera pero no puedo dejar que ellos hagan alguna tontería... así pues, ¿cuál es mi garantía que será libre y lo ayudarás?- estaba preparado para atacar al apóstol y salvar a Eitan aunque se le fuera la vida en ello.

Gabo, Eitan, Naugrim, Todos escribió:

Kevin Iruka

La reacción de Gabo lo agarro por sorpresa, cayo al piso cerca de Omeny, se sentía mal, como si fuera un resfrio fuerte, transpiraba y le dolía mucho la cabeza, le costaba respirar; pero su aura empezaba a brillar con fuerza.  Miro con ira a Gabrielle por lo que le había hecho, era su decisión, no tenían porque obligarlo a lo contrario... aunque él había intentando hacer lo mismo con el rubio pero algo menos agresivo.

Cuando empezo a respirar mejor, dirigio su mirada fulminante a Eitan.

-- To-todo esto es culpa tu-tuya! Reacciona estúpido!!  A cu-cuantos mas vas a arrastrar contigo!!  El odio circulaba por todo su cuerpo, y le daba fuerzas para utilizar su habilidad Dissonance, juntos sus manos y disparo hacia Eitan, pero el mal estado en el que se encontraba hizo que fallará, dando de lleno en el piso de madera muy cerca del menor de los Chassier, dejando un gran hoyo, pedazos de madera volando por el lugar, y Eitan debido al impacto cayeno hacia atras, como estaba actualizada era mayor el daño que causaba... Volvio su mirada a Gabrielle.

-- Ju-justo a mi me dices que me ha-haga cargo de Rania, de Eitan, acaso me estas to-tomando el pelo!!  Luego lanzo su mirada hacia Naugrim, estaba algo descontrolado.

-- No te lo vas a llevar a ningún lado!!  Y disparo su onda de sonido hacia Naugrim esperando darle de lleno.

Eitan Chassier
Meredith Ackerman

La peliroja se veía preocupada por la decisión que unos ya comenzaban a tomar.

Chicos, esto no es lo mejor para nadie. Cálmense, por favor!.

Mencionó al ver la actitud sobre todo de Kevin para con Eitan. La chica iba a mencionar algo más pero Eitan se dirige a pasos rapidos hacia Kevin, sin importarle que estuviera armado y preparado para otro ataque. Lo sujetó del brazo y de un buen tirón, lo hizo retroceder con tal fuerza que era fácil para el chico el perder el equilibrio. Tomó del mismo modo a Gabrielle y se volteó a encararlos.

Oigan, oigan, ustedes!! Dejen de romperme las pelotas con sus comentarios. Ne! ¿Acaso quieren decidir por encima de mi? Ya se están pareciendo más a Dendé! Ora!!! ¿O qué es lo que quieren? ¿Lucir como héroes? Éste es MI problema. Déjenme con mís asuntos y fuera de aqui!

Lanzó con molestia. Voltea a mirar a las otras chicas presentes.

Ya habló el viejo! Ustedes no tienen nada que buscar aqui. Me fui de la mansión y no pretendo volver aunque me arrastren con una grúa. Mejor váyanse!

Sentenció y los miró a todos ésta vez, deteniéndose a mirar a la pelicorto de los Arrows. Apretó sus puños con fuerza y se giró para darle la espaldas a todos y encarar al Apostol.

Ora, ora! Ahora hablemos tú y yo, Thegrim. Me enseñas a controlar a la bestia y me convierto en tu ridículo trofeo. Nada de dramas ni peleas karateca. Todas las cabezas en su lugar. ¿Trato?

Le expuso su palma derecha para que el sujeto la estrechara. El pelilila se veía muy convencido al respecto.

Todos escribió:

Naugrim

Naugrim observó a Eitan rápidamente.

-Eso resuelve las cosas. Entonces tú mismo, Eitan, serás quien pagará el precio de ser ayudado. Para empezar, ven aquí.

El peliverde no estrechó la mano de Eitan, pero le indicó que se pusiera detrás de él, a cambio. Luego miró a los demás.

-Creo que la postura del León ha quedado clara, jóvenes. Ahora por favor, retírense y quedemos en paz.

---

Acciones:

-Aceptar la desición de Eitan y retirarse o atacar a Naugrim.
-En este punto, no se puede hacer más que aceptar o pelear.

Eitan Chassier
Meredith Ackerman

El pelilila guardó la mano ante el rechazo del gesto aunque tampoco se dirigió hasta donde Haugrim le indicó. Simplemente se giró en su puesto para mirar al resto.

Ora! ¿Y todavía siguen aqui?

Lanzó al ver que unos pocos seguían sin siquiera moverse. Entre ellos, estaba la peliroja, quien se notaba aún preocupada por el asunto. La chica dio un breve paso al frente con ambas manos juntas en su pecho.

Eitan, ¿estás seguro que quieres ésto? Piensa un poco... muchos estarán preocupados. No hagas las cosas más difíciles para todos, en especial para tu hermano. ¿has pensado lo que sentirá cuando se entere que te marchaste con un apostol?

Eitan guardó silencio y se acostó de medio lado en el piso de aquel templo de madera pulida. Sacó su celular y comenzó a manipularlo.

Ne, Mercedes. ¿Has estado sorda o qué?

Siguió jugueteando con su teléfono móvil.

Ya Levin lo dijo. Todo es culpa mia, ¿no?. Lo de Danielle exponiendo su cuello por mí sólo para quedar bien con Dicky; Levin arriesgándose por sus cuellos... Ora! Yo no estoy en ninguna parte de ese tema y seguramente en muchos otros también, asi que falta no voy a hacer. Sino, que ellos mismos lo digan!

Le lanzó una rápida mirada, sobre todo a Kevin. Volvió a su asunto con el celular.

Y si mi hermano pregunta, díganle cualquier cosa. Ora! Sean creativos! "Dendé lo regresó a casa de tus abuelos"

Intentó el chico imitar una posible excusa.

Pero...Eitan! No es así como...

Fue interrumpida por un gesto del chico con su diestra, señalándoles la salida. Abandonó la postura y se sentó.

No hagan que ésto sea más complicado, eh! Váyanse!

Ordenó y esperó a que fueran yéndose uno por uno.

Todos escribió:

¿Qué ocurría con la mayoría? ¿Por que actuaban por mero impulso o arranque? Omeny casi rogaba porque una vaca la aplastara. Aquello ya era demasiado.

Por un lado Gabrielle, queriendo cumplir una promesa absurda, absurda de cuidar de alguien como si ese alguien fuer aun bebé indefenso o alguien incapacitado. Eitan de nueva cuenta siendo rebelde, aunque detrás de sus acciones había algo más, algo que Omeny aún no terminaba de entender. Por otro Kevin, de nuevo sintiéndose un cero a la izquierda sin ver más allá de su nariz. ¿Acaso no se le dio una oportunidad de pertenecer a Arrows y de estudiar? Para Deneb hubiera sido muy fácil dejarlo a su suerte en cuanto salió de aquel hospital.

¿ Y los esfuerzos de Amanda y la paciencia para entrenarlos a todos no era una mera muestra de que todos importaban? ¿De que forma quería que se le demostrara afecto u atención?

Omeny metió la mano y su bolsillo, sacó su móvil y observó aquel angelito que les había dado a cada uno en navidad. Ni siquiera habían tomado en cuenta su significado, aquello que les dijo que todos eran ángeles y su misión era aportar, hacer su parte y cuidar los unos de los otros.

Pero ahora solo se culpaban, recriminaban, victimisaban y discutían. Quitó aquel adorno de su móvil y lo arrojó al suelo.

¿De qué servía tener un techo donde dormir y unos tutores como Amanda, Vi, Noah, Haon o el mismo Deneb, si nadie estaba entendiendo, ni aprovechando nada?

-¡Ahora entiendo por que los apóstoles siempre van adelante de nosotros, como grupo o equipo somos un asco! Parece que somos contados los que en verdad queremos hacer algo y bien.-

Estaba molesta,  Omeny tenia ganas de gritar, se estaba desesperando. Convocó su arma, por si acaso

-Muy bien Eitan, si eso es lo que quieres... lo intenté de mil y un formas, pero nada tiene sentido.-

Dio media vuelta y comenzó a caminar rumbo a la salida.

Todos escribió:

Eitan Chassier
Meredith Ackerman

La primera en marcharse fue Omeny. Por lo dicho y hecho por la chica, Eitan cerró los ojos como si buscara ignorar la situación mientras aún yacía sentado de piernas en cruz sobre el piso; Meredith, en cambio, aún se notaba preocupada al respecto, sin saber qué hacer. No se esperaba que así marchara su primera misión dentro del grupo. La chica terminó por dar un profundo respingo, soportando ese trago amargo que le dejaba el momento. Terminó por dar un paso hacia atrás, indicativo de lo que estaba por hacer.

Está bien, Eitan. Será como dices, pero por favor, cuídate.

Mencionó la joven y miró al peliverde por unos segundos. Luego bajó la mirada, derrotada y se giró para seguir a pasos moderados hacia la salida.

Eitan, Omeny, Todos escribió:

Kevin Iruka

Eitan se reponía del ataque fallido de Kevin y se lanzaba contra el chico, haciendole caer con un tirón de su brazo después de todo no tenía muchas fuerzas por la fiebre causada por Gabrielle, por lo que enseguida perdio el equilibrio y cayo al piso.  El menor de los Chassier decidió quedarse con Naugrim, se intercambiaron algunas palabras bastante tensas entre todos.

El comentario que hizo sobre Gabo lo enfurecio mas.

-- Gabrielle estaba dispuesto a dar su vida por vos, y lo único que sabes decir es que lo hace por Dereck, no hay una pizca de agradecimiento de tu parte, la vida de los demás te importa una mierda!  Ya estaba harto de todo ese circo, era tal la furia que nisiquiera tartamudeaba.  -- Y no me vengas a mirar de mala forma, nunca me diste lugar para nada en la mansión, intente acercarme a ti pero todo te resbala, obviamente que no me interesa para nada lo que hagas o dejes de hacer, lo único que me enfurece es que te cagues en esas personas que estan allí, que te tienen afecto, que intentaron miles de forma de cuidarte, protegerte...

En ese momento la que empezaba a hablar era Omeny, también estaba sumamente molesta, Kevin no era tonto sabía que su comportamiento, que su forma de ver las cosas, su forma de ser, chocaban a varios del grupo... y que todo lo que estaba sucediendo en parte le jugaba en contra.  Parte de razón tenía, hace rato que ese grupo no actúaba como un equipo de verdad, cada uno con sus cosas, sus conflictos, sus traumas, él inclusive, pero así eran las cosas.

-- Tienes razón Omeny, hace rato que este grupo no funciona como tal, y cada uno de nostros tenemos parte de culpa.  Volvio su mirada a Eitan por última vez.

-- Haz lo que quiera como siempre hicistes, pisando a los demás si es necesario, nisiquiera tu hermano te importa; o no estarías haciendo todo esto; te salistes con la tuya después de todo, espero estes contento.  Se dio media vuelta y salio del aquel templo, luego miro al cielo y empezo a gritar.

-- Espero lo esten disfrutando, desde alla arriba, seguro se estan riendo de todos nosotros!! Sería bueno que esos vástagos logren llegar allí y pueda patearle el trasero a todos los estúpidos Dioses!!

No tomo el mismo camino que los demás, quería alejarse de todos, pateaba lo que encontraba en su camino, realmente estaba desbordado.

-- El maldito mundo apesta!!  Grito mientras rompía en llanto y se alejaba del lugar.

Rania

Cuando Omeney, Kevin y Meredith se estaban alejando, notaban que de un punto del lugar una especie de tornado de petalos de varias flores iba en direccion a Eitan y a Naugrim, cuando alcanzaba su maxima velocidad chocaba contra ambos causando un fuerte impacto.

- Y asi se van? Sin decir mas? Sin pelear por su familia?-

Comentaba una voz mientras podian observar a un pequeño lobo blanco que gruñia con simpatica furia en direccion a donde se encontraban los dos hombres. Despues la presencia de Rania se hacia presente, vestia comodamente y su mirada lucia tranquila.

- Tan facil su animo y su mentalidad son derrotados... eso no era lo que esperaba de ustedes que demostraron mayor valia en su pelea conmigo-

Cruzandose de brazos observaba a Eitan y suspiraba.

- Dime algo, dices que estas cansado de todos y de todo, que te dejen en paz y que es tu problema? Alguna vez has pensado en alguien mas que no sea en ti...niño egoista?-

Comentaba Rania mientras parecia muy seria, esa seriedad que habia demostrado cuando la conocieron, pero esta vez no lucia para nada transtornada.

- Has pensado si no has cansado ya a los demas con tus actitudes y con tus desplantes de chico rudo y malo? Que puede saber alguien que desdeña lo sentimientos de otros de sufrimiento y dolor? Conoci a niños que realmente sufrieron y fueron capaces de seguir adelante...lamentablemente la vida les trajo un sufrimiento aun mayor y les quite la vida pensando que era lo mejor...esa fue mi desicion y no me arrepiento, porque al final cuando partieron al otro lado me perdonaron y me dijeron lo mucho que les habia ayudado liberandoles de ese dolor-

Señalando a Eitan alzaba una ceja.

- Hibi-chan y yo te ofrecimos nuestra amistad y el apoyarte, lo cual aceptaste pero ademas quisiste irte y seguir por un capricho y orgullo infantil, porque creo no has entendido que en este mundo, en el universo debe haber reglas, limites que permitan un claro equilibrio, porque te importa mas lo que tu piensas, lo que crees y lo que sientes, sobre lo que los demas te dicen...-

El lobo blanco ladraba como asintiendo.

- Es obvio que a uno no le gusta que piensen por el, que decidan por el, pero es necesario a veces cuando la persona no expresa lo que siente o no da razones por las que actua de tal manera-

Cerrando los ojos extendia su mano y una especie de baculo hacia su aparicion.

- Pequeño niño perdido...debere mostrarte que el Pais de Nunca Jamas se puede venir abajo si el Rey del mismo no comprende la realidad de las cosas-

Mirando a Gabrielle sonreia.

- Tu que no has dudado...apoyame, se que tu tienes el corazon mas grande de los que he conocido en Arrows, pero eso no basta si tu mismo no te respetas o quieres, si siempre estas dispeusto a dar a los demas sin permitir que sean los otros quienes hagan algo...son pequeños y tal vez muy jovenes pero no son niños de primaria a los que haya que proteger, deben aprender a tomar sus desiciones-

Mirando despues a Kevin, Omeney y a Meredith sonreia.

- Si han perdido el deseo de luchar y de mostrarle a Eitan que estan para escucharle con acciones y que de igual manera el esta equivocado en ciertos aspectos de su manera de actuar, retirense-

Sus ojos ahora se posaban en Naugrim y asentia.

- Tiempo sin vernos...supongo que las cosas no seran tan faciles, pero te prometo algo, si despues de luchar ese niño no abre los ojos, ¡¡¡YO MISMA LE ARRANCO LA CABEZA!!-

Rania lucia bastante segura de si misma y su bestia espiritual cambiaba de forma, aumentando de tamaño y aullaba con fuerza.

Rania, Todos escribió:

Kevin Iruka

Se empezaba a alejar pero el viento comenzó a soplar fuerte, varios pétalos volaron como dirigidos hacia Eitan y Naugrim.  Una voz se hacía escuchar.

Rania escribió:...Sin pelear por su familia?

La palabra "familia" retumbaba en su mente, no pudo evitar mirar los rostros de Omeny, Gabo, Meredith... y agachar la cabeza avergonzado por su comportamiento anterior.  Pero cada vez estaba mas lejos de ser una familia, aunque él tampoco había hecho mucho para lograr eso.

Luego Rania se dirigia a Eitan, y le decía cosas, que encerraban mucha verdad, es todo lo que él pensaba, pero no había encontrado la forma de comunicarselo, más que atacandolo.  Al final tanto criticaba a Eitan porque no podía controlarse, y a él le estaba pasando lo mismo, con esos impulsos desmedidos.

La chica volvía a mencionar aquello de los niños, sus palabras iban y venian en su mente, y si realmente esos niños se sintieron liberados, si la perdonaron, hasta le agradecieron, porque juzgarla todo el tiempo.  Ya bastante peso tenía su alma por lo que había hecho.  Algunas cosas empezaban a aclararse, pero todavía había mucha confusión en su mente.

Rania pedía apoyo a Gabo, era cierto lo que decía, Kevin también creía que el rubio tenía un gran corazón, pero también era cierto que se encerraba en sí mismo y no dejaba ayudarse.  Luego se dirigia a ellos, pidiendo que si ya no querían luchar que se fueran del lugar, pero estaba claro que ella iba a hacerle frente y probablemente Gabo la ayudaría.

Kevin respiro hondo, y camino lentamente hacia donde estaba Rania, con su ballesta en mano, ya apuntaba  a Naugrim.

-- Estoy con ustedes.  Dijo en voz baja, mientras se limpiaba las lagrimas con su manga, sin mirar a Rania, pero estando a su lado.  

El enemigo no tenía intenciones de luchar, pero los había dejado entre la espada y la pared, o se llevaba a Eitan o a uno de ellos, porque tenía que ser así, quien se creía que podía decidir sobre nuestros destinos, era hora de dejar todo lo anterior atrás y hacerle frente, y adespués veran que quieren hacer con Eitan, incluso él mismo no estaba seguro de poder volver a la mansión despues de todo lo que había pasado y se había dicho; y estaba claro que si antes no tenía relación con el menor de los Chassier mucho menos iba a poder tenerla ahora, pero no tenía porque llevarse bien con todo el mundo tampoco.

-Qué onda Rania...-

Saludó al verle llegar y suspiró pesadamente.

-¿Familia? ¿En verdad te parece que lo somos?  Una muy disfuncional creo. Bueno después de todo las familias no son perfectas.-

Se cruzó de brazos.

-Mi mentalidad sigue en pie, pero mi animo de momento se vio aplastado por una vaca...-

Escuchó todo lo que Rania mencionaba,

-No he perdido tal dese de lucha y mucho de menos de apoyar a Eitan y el lo sabe mejor que nadie.-

Miró a Pelila y a Kevin como nunca antes, estaba seria.

-Solo que parece que mis acciones no llegan a sus oídos, le doy opciones, pero no elige ninguna y mejor se crea otras más fáciles. Me dice con total firmeza lo que hará para avanzar, pero sus arranques lo vuelven a dominar. Entonces ya no se de que forma le ayudo, ya no se si habla en serio o bromea. No iba abandonarlo a su suerte, solo que parecía que Eitan tenia algo en mente.-

Giró su arma tomando pose defensiva.

-Tampoco soy una insensible. ¿Alguna vez viste con tus niños Lilo y Stich, quizás suene cursi o tonto, pero tengo muy grabado algo, ʻOhana significa familia y tu familia nunca te abandona ni te olvida" y aunque esta Ohana tenga sus arranques, haré lo que esté en mis manos y la parte que me corresponde para que se mantenga unida.-

Gabrielle cohen O.

Gabrielle estaba siendo superado por lo que pasaba, parecía que todoa se daban por vencidos. Pero él se quedó en su lugar y justo en ese momento Rania aparecía y les hacía ver que era lo que veía. Tenia razón. .. había perdido la esperanza de podet ayudar a Eitab, aunque en ese momento Rania organizaba la resistencia. Le devolvió la sonrisa.

-claro que sí. Cuenta conmigo- contestó sin dudar

Los otros también regresaban. El rubio empuño su espada y se dispuso a atacar y pelear por el idiota de Eitan. Se notaba que su aura seguía brillando con intensidad.

Todos escribió:

Meredith Ackerman
Eitan Chassier

La peliroja fue sorprendida por unos pétalos en borrasca que se dirigían hacia los dos que aún yacían en el templo.

Rania!

Exclamó aquella al percatarse sobre quién dirigió el ataque. Se vio apenada y un poco cabizbaja por el reproche de la chica de largos cabellos oscuros. La peliroja miró rápidamente a Omeny para ver cómo reaccionaba al asunto. A la vez, Eitan apenas se ponía de pie, recuperándose del ataque.

Tsk! ¿Pues qué, Daria? Mira el lado bueno! Les estoy dando una oportunidad de oro a los que se han cansado de mi, ¿no lo ves? Ora! Mejor te vas también, eh!

Contestó a lo primero y lanzó una fugaz mirada disimulada al peliverde para luego volverla a posar en Rania, quien seguía hablándole. Por lo siguiente, exhaló pesadamente y negó con la cabeza.

Tú no entiendes. Ne! Como tu quieras llamarle, orgullo infantil o lo que sea. Si quieres pensarlo así, como quieras...pero no me conoces del todo, eh!

Soltó con un tono entre fastidiado e irritado, aunque el notar nuevos pasos acercándose (los cuales suponía de quienes se trataba), le revolvía el estómago de alguna forma...quizás temor el cual traía consigo una rara sensación en su garganta. Miró entonces con molestia a aquellos que regresaban.

Veanlo de éste modo. Ésta es una buena jugada para su grupo. Tener a un aliado que le pica un mosco hasta salirse de control y herir a los suyos no lo es.

Devolvió la mirada a Rania. Claramente tenía aun muy vivida la desagradable y amarga sensación de lo ocurrido en la misión previa. Se metió las manos a los bolsillos, miró nuevamente con disímulo a Naugrim y devolvió sus orbes al resto. Negó con la cabeza.

Ustedes no tienen nada que buscar aqui. Véanlo de éste modo... Éste es mi pago por lo que les he hecho antes. No tienen de qué quejarse!

Hizo una mueca como si algo le punzara desde muy dentro. Desvió su vista a otro lado.

Déjenme aqui... el tipejo éste tiene lo que busca en sana paz sin tanto jaleo y ustedes pueden irse con sus cabezas bien ubicadas sobre sus hombros. Ne! Algo que me molesta de todo ésto es la facilidad con la que éstos hijos de puta me pueden manipular hasta en forma animal...

Hizo referencia al recordar la forma en que se había transformado de nuevo en humano pero no por voluntad propia, sino por la del apostol. Todo terminaba recordándole incluso la forma en que Rania lo había usado para arremeter contra los demás en una ocasión. Miró de nuevo al resto, con molestia.

Pero lo están haciendo más difícil! Ne! Seré un necio bien jodido pero...

Baja la mirada hacia su diestra abierta la cual cierra con fuerza en puño.

...Algo que odiaría hasta la médula es ver correr sangre de todos ustedes por mi propia mano!... ¿No lo entienden? Me verán y opinarán de mi como les dé la gana... Ódienme si quieren! Son libres de hacerlo! Pero ya tomé mi decisión.

Sentenció mientras miraba a todos. Ya varios se acercaban a Rania en apoyo, incluso Meredith se había acercado. La peliroja asintió a la ex-apostol y aguardó para el momento en que pudiera actuar.

Cuenta conmigo, Rania. A Eitan le hace falta un pequeño halón de orejas.

Le mencionó a la mujer, atenta a la situación. Incluso Omeny tomaba la palabra, con Eitan desviando su mirada, pareciendo atrapado.

Lo siento, Wendy...

Murmuró con arrepentimiento a lo antepenúltimo mencionado por la jovencita.

Eitan, Todos escribió:

Kevin Iruka

Todos de a poco volvían a lugar para hacer frente a Naugrim, Eitan seguía con su postura aunque eso no le asombraba, jamás lo había visto retroceder en algo que ya había decidido, no le importaba nada más.  El menor de los Chassier empezo a hablar, el enemigo se mantenía en silencio como analizando a cada uno de los allí presente.

Eitan escribió:...salirse de control y herir a los suyos...

-- Empiezo a creer que no eres el único que se sa-sale de control, a mi me esta su-sucediendo lo mismo, pero de di-diferente forma.  Expresó con voz tranquila, pero algo avergonzado.

Eitan escribió:Ustedes no tienen nada que buscar aqui.

-- Eso no es del to-todo cierto, no es sólo sa-salvarte a ti, Naugrim es un apostol, y a pesar de lo que di-dijo sobre los enemigos y los amigos, nos pu-puso entre la espada y la pa-pared, porque deberiamos arrodillarnos a sus de-deseos.  Menciono dirigiendo su vista al enemigo. -- Si-siempre es igual, muestran una cara pacífica,  te ha-hacen dudar, pe-pero a la larga sus objetivos son si-siempre los mismos, llevarse a las llaves con ellos, lo mismo pa-paso con el hermano de Alex.  Finalizó diciendo, y siguio escuchando lo que el menor de los Chassier decía.

Eitan escribió:Pero ya tomé mi decisión.

-- Me alegro por ti, pe-pero no eres el único que pu-puede tomar decisiones aquí, no-nosotros también tomamos las nu-nuestras.  Menciono de forma determinante mientras apuntaba su ballesta a Naugrim, esperando y analizando el movimiento del enemigo.

Todos escribió:

Naugrim

Naugrim, que conocía a Rania, suspiró y se echó hacia un lado para intentar que el aire rodeado de pétalos que traía la mujer no le lastimara demasiado. Se recuperó sostenido de una estatua de madera, con forma de perro... una de las tantas que había en el santuario. Luego se acomodó la ropa, frunciendo el ceño.

-Lo hiciste a propósito, apostaría. Sabes que no puedo perder la línea... -confesó.

Ante lo que hacía Rania, Naugrim negó con la cabeza.

-Ay por favor, Ra-chan, estábamos llegando a un acuerdo pacífico ¿sabes? Este tonto que me llama "tipejo" es un peligro, para ustedes y para él mismo, el pobre... pero al menos sabe lo que quiere. E irse con ustedes no es lo que quiere, ni lo que necesita.

Naugrim, por primera vez, en vez de acomodarse la ropa, comenzó a aflojársela, quitándose la corbata por completo por ejemplo. Al verle un poco más de su cuello, pudieron darse cuenta de que llevaba marcado en la piel una especie de tatuaje, que podía moverse comenzando a tomar casi todo su cuerpo.


De pronto, aquel dibujo salió de su cuerpo. Parecía estar rodeado por una energía verde bastante potente. Esa especie de serpiente golpeó a todos haciéndolos retroceder,  menos a Rania y a Eitan claro. Luego volvió a suspirar.

-Ra-chan... sabes cómo me pongo...

Naugrim movió un poco aquella serpiente negra, que comenzó a tomar otra forma. Era la de un perro, que seguía y seguía creciendo al tomar una porción del poder del peliverde. Y al obtener ese poder, su tamaño fue tan grande que salió al exterior rugiendo y rompiendo el techo del templo con su cuerpo. Naugrim hizo un salto imposible y se colocó en el lomo de la bestia. De sus manos salieron gruesas cadenas de color negro brillante, incluso más fuertes que las que los chicos le habían visto usar a Deneb alguna vez.


-¡Ahhh! ¡Si no vamos a tomar el camino pacífico, entonces ya nada importa! ¿Verdad? ¡Mejor los mato a todos y ya! ¿Qué opinas tú, Eitan? -dijo.

Moviendo las cadenas, el perro derrumbó la otra mitad del templo de un rápido mordisco.

---

Acciones:

-Todos menos Eitan y Rania deberán arrojar 1d10.
-De sacar 1 y 2, estarán incapacitados bajo el techo del lugar y tendrán que ser ayudados.
-De sacar 3 a 6, quedarán heridos, pero podrán reponerse y luchar.
-De sacar de 7 a 10 podrán salir ilesos y atacar de inmediato.
-Rania es un PNJ

Tirada de Gabrielle

El miembro 'hendrixkin' ha efectuado la acción siguiente: Lanzar los Dados

'Dado de 10 Caras' :

Resultados :

Okazaki, Todos escribió:OMG

Gabrielle Cohen O.

Le sonrió a Eitan y negó a sus palabras

-Precisamente porque queremos que eso no pase es que estamos dispuestos a luchar por ti-contestó tranquilamente y miró a Rania, la ayudaría y lucharía por el idiota de Eitan

No entendió bien lo que él decía a Rania y lo de la línea... ¿Acaso estaba a dieta? Sacudió la cabeza, tenía que ser muy cuidadoso. Cuando el tatuaje tomó vida y comenzó a atacarlos con fuerza, no pudo esquivar el primer golpe pero los siguientes estaría preparado. Como pudo logró escapar de la caída del techo ahora era de los pocos que quedaban en pie. Rania seguía en pie y aprovechó para darle un beso y hacer su compensación.

Por ahora no usaría sus bestias ya que podrían correr riesgos al enfrentarse a un amo de las mismas, atacó con su espada y toda su fuerza a la bestia, tenía que hacerlo. Brincó para ensartar en su piel la espada y luego a través de ella filtro su poder de fuego a las entrañas de la bestia, no iba a detenerse para defender a sus compañeros.

-No me detendré... ya que no vamos a terminar pacíficamente... correspondamos tus amabilidades- dijo entre jadeos ya que aquello no era sencillo.

[/quote]

Tiro de dados.