[ER] - Misión Nº 2 - Shangai en llamas.

Recuerdo del primer mensaje :



Amanda Grudke

Una vez que todos estuvieron listos y terminaron de conversar, Amanda se acercó un poco más a la hoguera. Desde allí, les escrutó el rostro pero no agregó nada más.

-No iremos a un bonito mar. No sé cuál será la situación en Shangai. Hasta que no diga lo contrario, se quedarán detrás mio. Sin excepción ¿ne? –comentó.

Finalmente, las condiciones estaban dadas, la hoguera estaba más furiosa que nunca y el fuego se movía ansioso. Todos se acercaron y una vez allí, el fuego los envolvió, trasladándolos a un nuevo lugar tragado por Pandemonium.

Esta vez, lo que encontraron era sin dudas fue un infierno en la tierra. Era difícil de pensar que hace unas horas era una bulliciosa parte del epicentro comercial de China, uno de los países más grandes del mundo. Los clásicos edificios de Shangai estaban en llamas, semi-derrumbados. Las edificaciones más bajas casi habían sido borradas por el fuego incontenible. Parecía como si el dragón del año nuevo chino hubiese decidido arrasar con todo a su paso. Pero claro, eso no era lo que había ocurrido.

-Temía este desastre... -susurró Amanda, observándolo todo a su alrededor. Al mirar hacia arriba vio el típico cielo abovedado en múltiples colores.

Pero en verdad, no había demasiado tiempo como para mirar hacia arriba. En seguida, réptidos y guraks sintieron la presencia de los recién llegados y salieron de edificios, alcantarillas y automóviles en ruinas. Parecían disfrutar ese "nuevo ambiente" y se atrevían a adelantarse, cerrando un círculo alrededor del grupo.

-Los Gurak son fuertes, y los réptidos son veloces y traicioneros... si no tienen cuidado les van a sorprender...

Los Guraks se lanzaron a por ellos con unas hojas largas y afiladas, bien a su estilo, mientras que los réptidos se apostaron primero tras algunos escombros y les lanzaron flechas. Amanda hizo rebotar todas y cada una de las flechas alzando la mano derecha, utilizando evidentemente algún tipo de habilidad impersonal más avanzada que Protect Hand.

"¿Cómo decirlo? Era como si de pronto, en alta mar, me hubiesen arrojado por la borda en plena noche" -recitó la profesora rápidamente, una frase escrita en su mano extendida.

Los Guraks quedaron en el suelo y algunos de ellos comenzaron a freírse con poderosos choques eléctricos. Amanda había alzado su mano izquierda.

"Lo que no sé es si alguien me empujó, o caí yo sola. El caso es que el barco siguió su rumbo y yo me quedé en el agua fría y oscura viendo como las luces de la cubierta se alejaban a toda velocidad".

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Acciones:

-Aún quedan muchos Gurak y Réptidos, atacar para acabar con ellos o hacerlos retroceder.
-Arrojar 1d10. El resultado indicará el número de enemigos que derrotaron.
-Pueden utilizar cualquier habilidad que posean.

Todos escribió:

Bastorius

Al escuchar las palabras de Amanda, Bastorius sonrió socarronamente.

-¿Que si soy yo quien provocó todo esto? Ay, Amanda... ¿cuándo van a despertar y darse cuenta?

Sosteniendo aún el libro en su mano, Bastorius dejó su sonrisa a un lado.

-El libro no tiene nada de especial, excepto porque yo lo escribo. Y lo que escribo, Amanda... son los deseos de alguien que no podrías ni comprender... -confesó.

Súbitamente observando a Gabrielle, volvió a sonreír.

-Gabrielle, Gabrielle... mi querido Gabrielle. Cumpliría tus deseos, si dejaras de dudar y por fin te decidieras. Pero no, sigues reprimiéndolos. Las personas que se reprimen, raramente consiguen algo ¿sabes? -le dijo, aunque Gabrielle no había mencionado aquello y sólo lo había pensado. Lentamente agregó -sólo los que no temen al precio por pagar merecen que sus deseos se cumplan.

Al ritmo de los siguientes pensamientos del rubio, Bastorius frunció el entrecejo.

-Gabrielle Cohen Ozawa... ¿por cuánto tiempo más vas a ser el felpudo de Dereck Chassier? Pregúntatelo ¿cuánto tiempo más podrás soportarlo?

Cuando Gabrielle le daba el empujón a Dereck, Bastorius negaba con la cabeza y lo veía partir, al mayor de los Chassier. Fue unos instantes después, cuando Dereck ya no era visible, que sacó su libro, del que pendía una elegante pluma, y abrió en una página específica.

"...Dereck no podía encontrar a su hermano. El humo del lugar comenzaba a embotar sus sentidos, y aunque seguía adelante llamando a su hermano, no conseguía dar con él. De pronto sintió que su cuerpo se tambaleaba.

Mirando a todos, Bastorius pasó una página, para continuar en la siguiente. Al parecer, no se hacía problema por lo que estaba haciendo. De vez en cuando, observaba a Gabrielle.

...No era el humo, ni el calor lo que lo debilitaba... no, no era nada de eso. Se sentía desvanecer, liviano como una sombra... y no entendía por qué. Temió que pudiera desaparecer, sin dejar rastro de su propia existencia. Ni siquiera sitió cuando cayó al suelo. Como pudo, desvió la mirada hacia abajo, hacia su cuerpo, que aún estaba allí aunque no le respondía. Se sintió cada vez más cerca de lo inevitable. Ya casi podía sentir el aliento de la muerte sobre su cuello, mientras los sonidos del fuego crepitante se hacían cada vez más débiles..."

Bastorius decidió acabar allí su crónica, cerrando el libro con un golpe seco, y guardando la pluma en su lugar, dentro del libro. Y luego, observó a Amanda.

-¿Qué es lo que está pensando, "profesora"? ¿Cómo es que un Vástago tiene semejante poder? Simple: No todos perdemos el tiempo manteniendo esa ridícula actitud bonachona que caracteriza a Arrows. ¿Qué es lo que le ha pasado a Dereck, por estar siempre al pendiente de Eitan? Y Gabrielle pasará por lo mismo, si sigue al pendiente de Dereck. Arrows... por estas cosas es que siempre han sido flechas que no tienen el poder de abrirse camino a través del destino... si de verdad quieren que los Apóstoles no los aplasten, el único camino es aplastarlos primero... pero no, siguen jugando. Quien sabe, quizás desarmar a los Apóstoles desde dentro de su organización sea lo más inteligente, pero jamás harían algo inteligente, por lo que veo...

El peliazul hizo una breve reverencia ante los presentes, y dedicó una última mirada a Gabrielle.

-Gabrielle Cohen Ozawa... bienvenido a tu tercer nacimiento. Seguro quieres ir a despedirte de tu debilidad, llamada Dereck Chassier -dijo, y con esas palabras, desapareció sobre un extraño símbolo luminoso en el suelo.

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Acciones:

-Asistir a Dereck.
-Ir hacia el sur, desde donde se siente un aura de vástago poderosa.

Notas:

-Dereck ha sido abatido y de momento no podrá recuperarse.
-Deben intentar reanimarlo, y Amanda deberá llevarlo de vuelta a la Mansión luego de eso.

Kevin Iruka

El tal Malabi al parecer sabía mucho del grupo, casi pareciera que leia sus pensamientos, le dijo algunas cosas a Amanda, y otras a Gabrielle... al rubio le dijo cosas bastante duras... luego empezo a escribir en su libro sobre Dereck, acaso eso que escribía estaba sucediendo de verdad... finalizo diciendo algo al rubio que no termino de entender sobre el tercer nacimiento.

No sabía lo que le estaba sucediendo, tendría que ir corriendo a ayudar a Dereck si es que todo eso había sido verdad...  pero otros sentimientos pasaban por su cuerpo, que no lo dejaban reacionar, Malabi en su relato había mencionado a varios del grupo... menos a él, nisiquiera le había dirigido la palabra, lo había ignorado, ese sentimiento de que no lo tuvieran en cuenta, nisiquiera el enemigo... aunque tampoco se había dirigido a Omeny, ni a Mae... pero eso no importaba su vida estaba rodeada de ese desinteres, quizás si pudiera hablar todos lo tendrían mas en cuenta.

Las palabras de Malabi encerraban algo que no paraba de dar vueltas en su cabeza, "Qué es lo que le ha pasado a Dereck, por estar siempre al pendiente de Eitan? Y Gabrielle pasará por lo mismo, si sigue al pendiente de Dereck"... y de él, ¿quien estaba pendiente? Absolutamente nadie, nisiquiera lo fueron a buscar al hospital, había sido abandonado por su familia, por amigos, por conocidos, no recordaba su vida anterior pero de seguro tendría gente a su alrededor, ¿Por qué lo dejaron tirado en aquel hospital?

De eso se trataba su vida, del abandono... para que iba a buscar a Dereck si no iba a poder hacer nada por él, era un simple niño, inútil, tan inútil que los enemigos pasaban por su lado sin mirarlo siquiera, claro que peligro podía representar alguien tan vacío como él.

Termino por hacer uso de su habilidad y se hizo invisible, no queria saber nada con nadie, decidió separarse del grupo, después de todo iba a ser un estorbo, era para lo único que servía, empezo a caminar hacia el sur, sentía una fuerza increíble que provenía desde allí... no iba a poder hacer nada, pero al menos observar que sucedía, que es lo que habia alla, y dar aviso a sus compañeros cuando llegaran... dar aviso, como, escribiendo en un estúpido papel... estoy harto!

Todos escribió:

Slade escribió:

Iwata Mae

La rubia escuchó cada palabra de aquel sujeto que se hacia llamar bastorius, pero que ellos habían conocido de nombre: Malabi. Sus palabras eran crueles, y a la chica le preocupó que hasta hicieron dudar a Amanda. Miró a Dereck retirarse tras Eitan y, aunque hubiese querido ayudar, un peligro más fuerte estaba frente a ellos.

Al comenzar a escribir, de alguna forma presintió que lo que decía estaba pasando en realidad, a pesar de no haber creido en las palabras del peliazul al principio. Solo cuando este se retiró, miró a sus compañeros con angustia.

-¿Y si es verdad? ¿Y si hirió a Dereck? -preguntó, adelantandose algunos pasos y mirando a la pelivioleta y luego a Gabrielle- Es evidente que de alguna forma puede saber lo que pensamos, pero ¿cómo? Si es así, no podremos ganar nunca... -suspiró, tenía miedo pero temía aún más que a Dereck le hubiese pasado algo malo.

La chica estaba mirando a todos, esperando alguna señal de algo por hacer, para cuando vio claramente como Kevin desaparecía. Sabía bien que él tenía esa habilidad, y eso hizo que frunciera un poco el entrecejo.

-Kevin, muestrate ahora mismo! No lograrás nada escondiendote, ¿acaso no dices siempre que somos tus hermanos? ¿No siempre Gabrielle está protegiendote? ¿No te ha hecho reir Omeny? No puedes hacerte a un lado justo ahora, no puedes darles la espalda -gritó con algo de desesperación.

Su mirada se fijó en los unicos dos compañeros que aún parecían quedar en pie: Gabrielle y Omeny.

-No hay que dejarnos llevar por las palabras de ese tipo, no ganaremos nada con ello. Vayamos a buscar a Dereck ¿qué esperamos? -insistió, comenzando a caminar en dirección al sur, desde donde parecía provenir una gran fuerza, pero no se veía como algo bueno.

Tras caminar unos cuantos metros, divisó el edificio hacía donde había ido Eitan, y su hermano tras el. Colocó las palmas de su mano alrededor de la boca, intentando hacer que su voz sonara más fuerte.

-Eitan! Dereck está en peligro, ayúdanos a buscarlo por favor! -pidió casi suplicante, sin importarle atraer la atención de los Guraks o lo que sea. No esperó demasiado, cerró los ojos y se concentró lo máximo posible, haciendo que el pequeño osito rojo apareciera junto a ella.

-Traumerei... usa Red Sneak, y rastrea rápidamente a Dereck por favor -pidió. El oso panda rojo salió corriendo a una gran velocidad utilizando su olfato para buscar al albino. Una vez que lo encontró, lo olfateó un poco y con la cabeza intentaba hacerlo reaccionar.

-No se por qué, pero siento que alguien más nos está esperando... -reflexionó la rubia, caminando aún más hacia el sur, casi como atraída por aquella extraña aura.

Okazaki escribió:Te odio...

Gabrielle Cohen O.

Parpadeó, la forma en que le hablaba Amanda lo confundía, pero le quedaba en claro que el libro parecía ser importante. Apretó su puño y se puso en guardia cuando Malabi lo miraba, le desagradaba profundamente. Su mueca de seriedad no cambió aunque en su interior su corazón daba un vuelco ¿Qué sabía Malabi de sus deseos? respiró profundamente, tratando de poner orden a la cantidad de ideas que se levantaron como si de un tornado se tratara. ¡Malabi había visto su pensamiento! Dio un paso atrás, como preparado para atacar.

Por fin dejó que un gesto de disgusto se le escapara, había dicho aquellas palabras enfrente de Dereck...

-El tiempo que sea necesario... y seré lo que sea necesario para él- dijo con total seguridad, sabía que límites no podía pasar y así se le fuera la vida en ello.

Pero Gabrielle no estaba preparado para lo que pasaría después y es que Malabi tenía un as bajo la manga. Lo que enfureció al rubio fue las miradas que le lanzaba el hombre y conforme escuchaba lo que iba diciendo, iba perdiendo el color y su corazón latía angustiado, en su mente sólo había un pensamiento y era que había mandado a Dereck derechito a su perdición. Luego lo que decía de Arrows lo hacía sentir todavía más indefenso, él mismo no importaba, ¡pero Dereck! ¡Era su vida! Gabrielle sintió resonar con cierta fuerza unas de las palabras de Malabi: el único camino es aplastarlos primero.

-¡NOOOOOOOO!- gritó impotente, se desmoronó, cayó de rodillas y dejó de atender a los demás -Tiene que ser una mentira, tiene que serlo... no él... yo lo dejé ir...- se llevó la mano al pecho y se enterró las uñas, no importaba si se hacía daño -¡Tengo que ir por él! Así me odien por ello- gritó a Kevin quien se había escondido de ellos y al que Mae había retado

Gabrielle en su desesperación no esperó la opinión de los demás y corrió de inmediato a buscar a Dereck, parecía un perrito perdido así que cambió a su forma de zorro para poder usar su habilidad de olfato poderoso... pronto detecto el aroma de Dereck y se lanzó sin dudarlo hacía ese lugar. Mae ya había llegado a él pero ver al albino en el suelo derribó todo, aquello era lo peor que podía haber sucedido. Se acercó a él y lamió su cara, luego le dio un suave golpe con su cabeza, trató de moverlo, pero nada lograba así que cambió a su forma humana y abrazó a Dereck, sosteniendo con cuidado su cabeza, le daba palmaditas en las mejillas, estaba más que desesperado.

-Por favor reacciona... no te vayas... ¿Qué voy a hacer sin ti? Por favor Dereck... te lo suplico- le dijo con los ojos anegados en lágrimas -Perdóname... perdóname... te puse en peligro... te dejé venir solo...- se sentía por demás culpable de lo sucedido, había expuesto a su amor, su corazón, todo estaba destrozado y se lo había puesto en bandeja de plata a los enemigos. Tenía que tratar de reanimarlo de alguna forma, buscó con la mirada a Amanda -¿Qué hago? ¿Dime que hago?

Todos escribió:

Kevin Iruka

Se estaba alejando pero las palabras de Mae lo hicieron detenerse, eran como apuñaladas en su corazón, su rostro se lleno de lagrimas.

Es cierto lo que decía la rubia, Gabo siempre se había portado amable con él, Omeny le había hecho compañía mas de una vez... los había considerado como sus hermanos... pero se sentía tan vacío, muy solo por momentos.

No es lo mismo el compañerismo que tenían que los lazos de sangre, y del amor puro... Dereck fue corriendo atrás de su hermano Eitan dejando al grupo con un enemigo que podía llegar a matarlos, pero era un lazo de sangre, algo muy superior, él amaba a su hermano, a sus compañeros, los respetaba, los ayudaba, hasta quizás los quería... pero amaba a su hermano no a ellos.

Y Gabo, casi se muere de desesperación porque su gran amor estaba en peligro, no le importo nada más, sólo salvar a aquella persona que amaba con locura.  ¿Quién corrio atras de mi? Nadie... como si fuera que pudiera sobrevivir yo solo en este lugar.

Siendo que no recuerdo nada de mi vida anterior nisiquiera sé si alguien me amo alguna vez como Dereck a su hermano, como Gabo a su gran amor, incluso como Alex casi se dejaba morir en brazos de su hermanito... no conozco ese amor... no comprenden...

Pero si seguía adelante era como abandonarlos a su suerte, y eso no se lo iba a poder perdonar, habían sido buenos con él, lo habián protegido más de una vez, no amado... pero no podía darle la espalda.  Decidió seguir a sus compañeros, en busca de Dereck, tampoco que pudiera hacer mucho por él.

Cuando Mae gritaba desesperada a Eitan, un Gurak aparecía detras de ella, pero no llego a reaccionar ya que con su ballesta había logrado dar en la cabeza de esa criatura a tiempo.  Ahi entendio que si bien no podría hacer mucho por Dereck si podría ayudar aunque sea proteger las espaldas de los demás en su desesperación y distracción... no se sentía tan inútil después de todo... pero su sentimientos no habían cambiado, se mantuvo a una distancia discreta de Dereck y los chicos, oculto en las sombras, como si él ya no perteneciera a ese grupo, como si fuera un extraño, vigilando que ninguna criatura se acercará a ellos.

Le partía el corazón ver a Gabrielle de esa forma, realmente amaba al mayor de los Chassier, a pesar de que Dereck no quería saber de nada con él, por lo menos en una relación de pareja... es increíble lo que puede lograr el amor puro como ese, ojala alguien me quisiera de esa manera.

Eitan Chassier

En su persecusión, una voz familiar gritaba su nombre. De manera automática detiene la marcha con brusquedad... Intentaba seguir escuchando a su hermano para no dejarse llevar... después de todo, le era costumbre atender a su voz. Mostró sus dientes y gruñó... forcejeaba consigo mismo para no dejarse llevar de nuevo por aquel bestial impulso, sin embargo, de un momento a otro la voz de su hermano se dejó de escuchar. Cerró los ojos con fuerza mientras apretaba sus dientes... No quería perder el control nuevamente.

Al poco rato, sus orejas detectaron otro sonido. La voz de Mae se hacía presente y por lo que mencionó, Eitan en forma de cachorro abrió los ojos como platos.

Dicky!

Parecía aterrado y a la vez preocupado. Entre el edificio, se movilizó rápidamente hacia la dirección que había escuchado su voz la última vez. Aparentemente su curiosa "Sed" había pasado a un 2do plano por su propia voluntad de saber qué había sucedido con su hermano.

Tras cruzar un buen tramo, el primer cuadro que apreció fue a su hermano tendido en el suelo, con Gabrielle pareciendo desesperado. Éste último no cobró importancia para el pelilila... sus ojos y consciencia estaban plenamente enfocados en el albino. Se transformó en humano, logrando parecer más asustado que como cachorro. Desesperado, se lanzó al piso del otro lado de donde Gabrielle estaba ubicado y lo busca arrebatar de sus brazos.

Dicky!!! Dicky, despierta!

De igual forma intentó darle unos moderados bofetones para hacerle reaccionar. Rápidamente, acercó su oido al pecho del chico para al menos buscar escuchar alguna señal que le dijera que aún estaba vivo. Sus signos eran muy débiles... quizás demasiado.

Ora, Dicky!!! ¿Qué demonios te pasó?

Preguntó prácticamente al aire y, sin siquiera esperar algun tipo de respuesta que seguramente no llegaría, lo montó sobre su espalda para llevárselo cargado. Estaba desesperado y muy asustado. Comenzó a salir del lugar en una carrera.

Matilda!!! Tiene que sacarnos de aqui!!! Dicky necesita un hospital!

Exclamó para sí mismo e hizo aparecer a su bestia interior, la cual corría a su par.

Llévame con ella!

Ordenó en su desesperación con la bestia comenzando a adelantarse para guiarle. Su olfato era infalible.

-¡Basta, basta, deja de escribir esas cosas!-

Clamó con fuerza, por alguna extraña razón todo aquello que iba relatando, parecía sentirlo muy real, todos comenzaron a alarmarse, Kevin desapareció de pronto y Gabrielle parecía quebrarse como si fuera de cristal.

-¡Kevin, Kevin, por favor no desaparezcas así que me pones más nervoisa, me quedaré más tranquila si puedo verte y saber dónde estás.-

El apostol se había ido, pero de pronto se pudo sentir una fuerte energia.

-¿Quién será, es muy fuerte su aura?--

Todos fueron en dirección de aquel edificio para asistir a Dereck, llegó detrás de Gabrielle, Mae y Kevin. En verdad ver al rubio de esa forma tan angustiada le sorprendió, pocos minutos Eitan se unía con la misma angustia por su hermano llevándoselo consigo.

Omeny se acercó a Gabrielle para intentar calmarle, estaba fuera de si, la primera acción de Omeny fue sujetarlo de sus ropas y levantarle, le soltó una bofetada al rubio.

-¡Gabrielle, mírame, escuchame por favor!...¡No vas a ayudar a Dereck de esa forma, lo que pasó es muy duro, pero pudo pesarle a cualquiera de nosotros, cualquiera pudo venir a buscar a Eitan, así que deja de culparte, Dereck te necesita entero cuando despierte! ¡Lo hará, tienes que confiar en que así será! ¿¡Entiendes!?-

Ella soltó a Gabrielle y observó en varias direcciones con desesperación.

-¿¡Kevin, dónde estás!? ¡No me hagas estas cosas,no es gracioso, dime dónde estás, tenemos que irnos de aquí y no me moveré no sino apareces! -

Omeny no quería que nadie más fuese abatido y haría todo posible por no dejar a nadie atrás.

Todos escribió:

Kevin Iruka

La situación no podía ser mas desgarradora, al ratito aparecio Eitan también desesperado por su hermano, era muy importante para ellos dos, mas de lo que alguien podría imaginar, tenía miedo que le pasará algo a Dereck, que no despertará, sería algo terrible para todos, aunque pricipalmente para el rubio y su hermano.

El Chassier menor cargaba a su hermano en su espalda con desesperación en busca de Amanda, mientras Omeny trataba de contener a Gabrielle... luego empezo a buscarlo a él a los gritos, y no pretendía moverse al parecer hasta que no se hiciera visible.

En eso se hizo visible mientras dibujaba en el diario de Alex la situación anterior, Dereck en el piso, Gabo a un costado de él y Eitan al otro costado, sus manos se movían rápidamente, cuando termino el dibujo, le hizo una seña a Omeny haciendole entender que ayudará a Gabo, había quedado muy frágil despues de aquello, Kevin se fue atras de Eitan para limpiar el camino de Guraks y Reptidos, cada tanto aparecía alguno y sus flechas volaban a gran velocidad dandole de lleno a esas criaturas, salvando el pellejo de Eitan mas de una vez, el menor de los Chassier tenía otras preocupaciones que perder tiempo con aquellas criaturas, y él por suerte tenía muy buena puntería.

SunakoSan, Kisa escribió:^^

Gabrielle Cohen O.

El rubio estaba impotente ante lo sucedido, no puso resistencia a que Eitan se llevara a Dereck, vio sus manos vacías. Todo lo demás pasó muy rápido para su aturdida cabeza, pero Omeney lo jaló, sus ojos no se movieron hasta que las bofetadas que le daba lo hicieron mirarla y comenzar a entender poco a poco sus palabras. Tenía razón, su alma deseaba venganza...

-[color=#ffff00]Él debe volver... va a volver[... tiene que.../color]- susurró dando un primer paso hacia donde estaba Dereck en la espalda de Eitan.

Vio a Kevin correr tras de ellos, tomó de la mano a Omeney y le dio un beso para compensar su última acción.

-Vamos, no podemos dejar solo a Kevin y a... los demás- dijo echando a correr junto con la chica.

Su espada apareció en sus manos y cuanto cosa se atravesaba con intendiones de atacarlos, eran aplastados por el rubio, no les daba tiempo de nada, los eliminaba con un odio atroz como si aquellos infelices hubieran sido los culpables. Tenía que sacar aquellos sentimientos. Quería ver bien a Dereck, quería verlo sonreír no importaba que no estuviera a su lado, sólo quería que fuera feliz.

-Los aplastaré... no va a quedar ni uno solo de ustedes.... ¡PESTE!- dijo atacando lo que se acercara, tenían que dar con Amanda, quizá ella podía hacer algo.

Todos escribió:

Amanda Grudke

La mujer escuchó ávidamente las palabras de Malabi, pero lo que él hacía ella no podía controlarlo. Se quedó pensando un poco más de rato en las palabras del hombre, pero al saber lo que pasaba con Dereck no tardó en reaccionar, se movió al sur con toda velocidad y los chicos se encargaron de encontrar al albino. Varios la divisaron para ir a buscarlo y ayudarle.

-Tranquilos, diganme dónde está -en cuanto los chicos le pudieron presisar su ubicacion, Amanda desapareció y reapareció junto a Dereck. Les pidió a todos que se aparten para poder observarlo y decidir qué hacer. Tomó la mano del joven y después de unos segundos miró a todos.

-Va a estar bien, sé con quién llevarlo y se recuperará. Pero ustedes, deben quedarse aquí hasta que yo regrese en 2 segundos ¡¿Me entendieron?! -preguntó con la voz más firme y autoritaria que nunca. No esperó demasiado, unos segundos después desapareció del lugar y reapareció prontamente. Obviamente, Dereck ya no estaba con ella.

-Un viejo miembro de arrows sabe como ayudarlo, se lo encargué. Dice que se pondrá bien si tiene la voluntad para ello, por eso lo dejé, estoy segura que él tiene esa voluntad -mencionó intentando tranquilizar a todos. Aquella aura de poder los seguía llamando, y era hacía allí a donde tenían que ir.

-No podemos perder de vista la misión, alguien destruyó medio china y además hizo venir a Malabi, vamos, tenemos que deshacernos de él. Los necesito preparador, vamos -aseguró con decisión encarando para el sur junto a los demás, hasta que finalmente llegaron al lugar donde esa aura de poder los estaba esperando.

Notas:

-Dereck fue trasladado.

VIII. RANIA

El lugar a donde llegaban TODOS excepto el recién herido Dereck era una especie de edificio corporativo o un hotel, realmente no se podía distinguir en lo absoluto ya que el fuego y los derrumbes habían acabado casi con un 70% del sitio.

Al ir avanzando observaban cadáveres con expresiones de horror, ademas la pestilencia a muerte era algo tan penetrante que podría causar escalofríos o alguna reacción del cuerpo, claro si es que alguno de ellos todavía tenia alguna. El silencio del lugar no era algo general ya que a lo lejos se escuchaba un poco de música y una voz dando instrucciones.

Mientras mas se acercaban, podían notar que la que hablaba era una chica de estatura media, cabellera negra corta pero con un par de mechones largos, sus ojos se mostraban inexpresivos y fríos. Vestía un pantalón de cuero pegado a su delgado cuerpo, blusa delgada color rojo sin mangas, guantes y botas con cierto tacón de 10 cm.

Imaginenla con las ropas descritas:

- Y uno, dos tres cuatro... no pierdan el paso, quiero divertirme y que salga todo perfecto, no importa el tiempo que me lleve..-

Exclamaba con tranquilidad, mientras como sacado de un cuento de terror, los integrantes de Arrows observaban que daba instrucciones sentada en una especie de columpio, cuyas cuerdas eran intestinos humanos que aun derramaban algo de sangre y aquello que servia de asiento era el torso y rostro de un niño que no pasaba lo 8 años, que también lucia vivo y que solo lloraba dado que de su boca estaba atada "la cuerda".

- Bien, veamos si nos sale de acuerdo? Bueno creo es estúpido preguntar eso si de todas maneras lo harán...-

Tomando su posición era seguida por los cuerpos sin vida de mujeres, hombres, niños, Guraks y Reptidos mientras la música comenzaba a sonar y ella en conjunto guiaba la coreografía.

Coreografia que baila:

Al finalizar sonreía abiertamente y se le escuchaba decir algo.

- Maten a las visitas...-

Comentaba a carcajadas mientras un numeroso grupo de cadáveres humanos, guraks y reptidos que habían matado en el camino, se levantaban y se acercaban para luchar contra ellos.

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Acciones:

- Indicar reacciones acerca de todo esto.

- Luchar contra el ejercito de muertos que están atacándoles, tomen en cuenta que el mismo numero de enemigos que mataron es el mismo que regreso.

Amanda escribió:^^~

Gabrielle Cohen O.

Pronto encontraron a Amanda y el alma de Gabrielle descansó, hizo un par de movimientos para limpiar su espada de aquella asquerosa peste que lo trataba de detener. Amanda de inmediato tomó cartas en el asunto, se despidió de Dereck con la mirada y sintió que iba a desfallecer pero al dar un paso a un lado sintió que había chocado con algo, al verlo era Kevin. Sin decir nada lo abrazó, necesitaba ese contacto con alguien, ya que todo aquello estaba pasando por su culpa. Al momento que Amanda volvió ya estaba más tranquilo y le susurró un gracias a Kevin

-Sí... va a volver- susurró, tenía esperanza que él volvería, tenía que verlo de nuevo.

Suspiró pero no tuvo queja alguna... iba a cumplir su misión... y ahora era más personal. Aquella presencia los llamaba, parecía esperarlos tendrían que descubrir que era, siguió a Amanda hasta el punto donde ella los llevó. Aquel lugar parecía sacado de una perversa película gore, tomó la mano de Kevin, cuando encontraron a la jovencita se llevó la mano a la boca y detuvo a Kevin para jalarlo atrás de él. Ese espectáculo no era uno que un chico que había pasado lo que Kevin debería ver, aunque tampoco podía hacer mucho para evitarlo. Apretó la mano del chico como recordándole que estaba ahí. Él mismo se quedó sin palabras y miró a los demás.

-No olviden que estamos untos- le dijo a Mae, Omeney, Eitan, Kevin y Amanda, estaba tratando de ordenar sus ideas, Malabi tenía razón, los querían aplastar...

La chica parecía no estar a gusto con la presencia de los recién llegados por lo que mandó a sus cosas a atacarlos. Gabrielle apretó los dientes, no era el momento de desfallecer a pesar de todo lo que había pasado. Los cadáveres se lanzaban contra ellos, de inmediato su arma apareció en sus manos y Gabrielle comenzó a hacer frente a aquellos despojos que no iban a detenerse hasta que estuviera muerto. Utilizó su habilidad de fuego para tener una mayor fuerza en sus ataques, hacía que la carne en descomposición cayera con más facilidad. Contra lo que él mismo pensó, no mostraba ni dolor ni furia, trataba de recobrar la calma aunque siendo sinceros a cada golpe a cada enemigo caído sentía un alivio cada vez mayor pero eso no implicaba que fuera más sencillo acabar con esa orda que quería hacerlos pedacitos. Se mantuvo al lado de sus compañeros luchando palmo a palmo.

Todos escribió:

Era un alivio saber que el mayor de los Chassier estaba a salvo y en buenas manos.

-Su voluntad es inquebrantable, lo he visto así que confío que se repondrá-

Siguió a todos en la dirección indicada, al acercarse aquella aura podía sentirse más fuerza. Al llegar, la escena era devastadora Omeny giró el rostro al ver aquello apretando los ojos fuertemente mientras un enorme hueco se le formaba en el estómago. ¿Quién era ella? ¿Cómo podía estar sentada sobre un niño pequeño?

Las palabras de Gabrielle la hicieron abrir los ojos nuevamente y asentir.

-Si, estamos juntos.-

Lo que a continuación hizo aquella chica dejó a Omeny un tanto contrariada, estaba bailando y y guiando a un grupo de "zombies". ¿Se burlaba acaso?

Ella dio una orden y los enemigos se abalanzaron sobre ellos. La chica elevó su aura y su largo bastón apareció en sus manos.

-Si Noah estuviera aquí, les mostraría lo que es bailar.-

Omeny intentaba quitarse de encima a un par de Guraks, pero a la vez se detenía al ver que entre aquella multitud había niños, niños como a a los que cuidó alguna vez.

-¡Esto es una crueldad!-

¿Cómo podían destruir aquella cuidad sin pensar en los frágiles e inocentes niños?

-¿¡Por qué, por qué tiene que ocurrir todo esto!? Solo por una llave... ¡Es injusto!-

Los repetidos era veloces Omeny hizo uso de unas de sus habilidades "ELECTRA" la electricidad también era rápida incluso más, con ella intentaba deshacerse de algunos de ellos.

Eitan Chassier

Habían llegado por fin hasta Amanda, quien inspeccionó rápidamente el estado de su hermano. Le gustó escuchar que habría alguien que pudiera ayudar en la situación de Dereck, aunque se vio molesto cuando la chica indicó que sólo se lo llevaría a él.

Yo iré con él! No lo voy a dejar solo!

Protestó a pesar de la orden. Sin embargo, su queja no fue tomada en cuenta y la chica se marchó para regresar en unos cortos segundos. El ser dejado atrás, le hizo apretar los puños con furia, cosa que se denotaba en su rostro. Aún así, Amanda explicó que lo había dejado con alguien de confianza y que por ahora todos debían concentrarse en la misión. Eitan se calmó un poco aunque aún lucía molesto. No tuvo de otra que verse obligado a confiar en la palabra de Amanda.

Hijos de las mil putas, ya verán!

Gruñó, molesto. Sin lugar a dudas, buscaría desquitarse con cualquier enemigo, especialmente con las mentes maestras de todo aquel desastre por el que su hermano y él tuvieron que acudir allí. Siguió al resto hasta otro edificio. Algo se sentía muy fuerte en el lugar, aparte del olor a pudrición. Se vio un poco aterrado por la horrorosa escena que podía apreciar por todos lados. Se tapó la nariz... Tuvo deseos de vomitar por la repugnancia del ambiente, sobre todo el aroma.

Esto es asqueroso...

Se quejó y siguió con el resto. Al final, se toparon con una extraña chica. Automáticamente, su arma reaparece enrollada en su brazo derecho habiendo percibido el peligro.

Ora, ora. ¿De dónde salió ésta psicópata?

Soltó automáticamente con asco, aunque sus ojos recorrían aquel columpio donde la chica estaba sentada. La sangre de aquellos intestinos pudiera haber provocado alguna reacción por su hambre, pero al mismo tiempo el nauseabundo olor distraía aquellos instintos. Al darse cuenta de la presencia de aquel niño cuya cuerda resultaba ser su intestino, su estómago comenzó a hormiguear con asco, furia y terror entremezclados. Tuvo que hacerse a un lado por unos instantes para vomitar. Demasiado grotesco. Se limpió un poco de sucio de su boca con su manga y volteó a mirar el espectáculo con los "zombies".

Loca, loca! ¿Se cree Michael Jackson o qué?

Comentó de la impresión al ver el espectáculo. Al final, era un "intro" para la batalla. Nuevamente estaban ante la presencia de un montón de Guraks, aunque se sumaban los cadáveres.

Ustedes otra vez... ya verán!

Exclamó con molestia mientras se lanzaba a pelear con los enemigos. Como la vez anterior, se basó en el trabajo en equipo con su bestia interior, la cual había convocado. Lanzaba su arma y de acuerdo a lo que se le ocurría para defenderse, ideaba también alguna forma de contraataque.

Electra!!!

Mandó la descarga a un gurak que al que había enrollado con su kunai encadenado. El impulso de la compensación se hacía presente. Terminó saltando en caballito sobre la espalda de uno de los cadáveres que se aproximaba a Kevin, el cual parecía no haberse percatado. Tan cerca, el olor a "fresco" llegaba a sus narices... Quizás no tenía mucho rato de ser asesinado. Eitan tragó fuerte, con su cuerpo obligándolo a alimentarse... Y así fue: abrió grande su boca y, como si se tratara de una hamburguesa le da un fuerte mordisco al cuello de aquel cadaver. Arranca carne, piel e incluso parte de la tráquea. Masticó poco y tragó como desesperado, tal cual su cuerpo se lo exigía. Apenas acabó la compensación, se bajó y golpeó al zombie para que se alejara un poco, aprovechando para enrollarlo en sus cadenas. No había quedado del todo satisfecho por lo que, dejándose llevar por sus instintos, acabó por acercarse de nuevo y morder lo que pudiera alcanzar, desde el resto del cuello hasta brazos y hombros. Terminó siendo una cena rápida. Satisfecho su estómago, limpió la sangre extra de sus manos y boca con la ropa que llevaba puesta.

Ésto es desagradable.

Dijo, ya más centado en sí e hizo una mueca de asco. No le era divino pensar que se había comido una persona, aunque estuviese muerta. Agradeció que Dereck no estuviera presente para ver lo que había hecho. Su tiempo para digestión, sin embargo, debía de esperar: Otro grupo de zombies se le acercaban por lo que tuvo que concentrarse en palearlos con lo que tenía.

Kevin Iruka

Amanda se había llevado a Dereck y vuelto para continuar con la misión, al parecer el mayor de los Chassier estaba fuera de peligro... Gabrielle estaba bastante mal, se choco conmigo y me abrazo, entendía su sufrimiento, lo aprete con fuerza como devolviendo el abrazo.  

Kevin lo miro a los ojos los cuales reflajaban un "todo va a salir bien", el rubio le dijo gracias como si hubiera interpretado lo que el niño le decía con su mirada.

Cuando llegaron al lugar del cual provenia esa aura fuerte y maligna, el panorama era devastador, habían tenido varios enfrentamientos con sus enemigos pero nunca llegaron a presenciar una carnicería semejante, era como estar en el mismisimo infierno.

El olor era penetrante, el trono de aquella mujer paralizaba mi corazon, ese niño llorando, al menos hubiera tenido la amabilidad de matarlo que dejarlo sufrir todo eso, era muy perverso, Gabrielle me agarraba de la mano y me ponía atras suyo, no pude contenerme y apoye mi cabeza en su espalda para que mis ojos descansaran de tanta muerte y desesperación.

Pero no duro mucho, la chica mandaba ordas de zombis a atacarlos, hombres, mujeres, niños, como podía el hermano de Alex estar junto a gente así... el llanto del niño mutilado que servía como trono le lastimaba el alma, quizás lo mejor sería acabar con su sufrimiento... en esa distracción que tuvo con aquel chico, no se había percatado que tenía un zombie encima de él, pero Eitan ya se estaba encargando de aquel zombie, lo miro a Eitan y asintio con la cabeza en forma de agradecimiento.

Dejo las distracciones a un lado, y empezó a ayudar a sus compañeros a pelear contra esos cadavares caminantes, según las películas de zombies que había visto la unica forma de matarlos era dandoles en su cabeza, no sabía si se aplicaría eso mismo en aquel lugar, en la realidad, pero ante la duda cada uno de sus tiros iban dirigidos hacia la cabeza de aquellas criaturas.  Disparaba, daba en los blancos y se movía a otro lugar para asegurar una posición mas conveniente para sus disparos... pero eran realmente demasiados.

Himoru escribió:

Todos escribió:

Iwata Mae

La situación de Dereck se tornaba desesperante, pero Amanda consiguió sacarlo de allí con la promesa de que alguien lo cuidaría y podría salir adelante. Apenas conocía al albino, pero la conmosión también el afectó y por unos momentos no supo mucho qué hacer.

Avanzaron, pues la misión no había finalizado y seguramente había alguien por allí haciendo destrozos aun. Pronto, el aura de gran fuerza que antes le inquietaba se mezclaba con un aroma nauseabundo, realmente desagradable. La rubia estiró un poco la manga de su buzo hasta que esta el sobrepasaba la mano, con ella se tapó la nariz.

La escena que encontró no le pudo haber parecido más espantosa, los cadaveres, la sangre, el triperio y los sollozos al compás de una música, hacían de la situación algo bizarro, terrible y espeluznante.

-Necromancia… ¿ella es otra de las apóstoles verdad? -le preguntó a Amanda, recordando un poco de los archivos que VI hubiera enviado en su momento. Al verlos, la chica reaccionó y mandó a su putrefacto ejército a atacarlos.

-Gabrielle tiene razón, estamos juntos… -respondió al comentario del rubio. La respuesta positiva de todos le dio más motivación, al menos la suficiente como para invocar nuevamente a Traumerei, así como a Wild Rose, su Glock de 9mm.

-No son más que unos cadáveres reanimados y asquerosos… e igual de fuertes… -mencionó mientras apuntaba con su arma y dejaba salir una cantidad moderada de disparos, a su vez Traumerei hacía de distracción para los revividos reptidos y guraks. La chica intentaba mantenerse al margen para no ser herida, mientras su pequeña bestia interior hacía de las suyas para dejarle el terreno listo para que ella apuntara y disparara de la forma más certera posible.

VIII. Rania

- Take me to your planet
Take me to your planet
Take me to your Venus
Your Venus, your Venus-

La mujer cantaba un poco divertida mientras se sentaba nuevamente en su columpio humano y comenzaba a jugar con el mientras la cara del niño era de dolor indescriptible y la chica reía un poco al observar a los vástagos luchar.

- Es en serio? De esto es de lo que se preocupan los demás Apóstoles? Ash...debí mejor dejar esta tarea a alguien mas, pero me divertiré bastante...jajaja-

Comentaba mientras jugueteaba en el columpio cuyo movimiento de péndulo iba poco a poco en aumento, a la par, Rania se ponía de pie y notaban como sus tacones con solo tocar la piel del niño que le servia de asiento, la quemaba y perforaba, haciendo que por primera vez se escuchara el sordo grito y las lagrimas de aquel miserable ser brotaran con mayor rapidez.

- Veamos, que noticias nos traen...-

Una nube oscura y densa se acercaba a ella y formando una especie de sombra comenzaba a emitir un sonido como quejido, a lo que la chica sonreía un poco y asentia un par de veces.

- Gracias...pero no, eso no te dará la libertad, eres mio..ve el lado positivo, tu hijo también me sirve bastante bien-

Comentaba para después hacer desaparecer aquella nube negra.

- Mi nombre es Rania, efectivamente soy una apóstol, la numero VIII para ser exactos, wiiiii-

Riendo un poco y mostrando poca seriedad seguía jugando en su columpio mientras veía como atacaban a sus súbditos.

- Bueno no me importa ni me interesan sus nombres, aunque claro mis informantes ya me los han hecho saber, ademas algunas cosillas del mundo de los muertos-

Comentaba mientras parecía detenerse un poco.

- Vaya fuego...pero sera lo suficiente Gabrielle? creo subestimas la Necromancia...-

Su mirada y sus dedos se dirigían a los enemigos que el rubio había derrotado y estos recuperaban su forma habitual, pero ahora estaban envueltos en llamas y no lucían para anda contentos o derrotados, inclusive las llamas que quemaban partes de sus cuerpos los hacían lucir mas aterradores. En un descuido, varios de ellos lograban golpearle y uno de ellos le quemaba algo de su cabellera. Después Rania miraba a Omeny y nuevamente reía un poco mas fuerte.

- Noah? bailar? jajajajajajajaja chiquilla estúpida, el esta años luz de mi nivel como bailarina, pero te enseñare a disfrutar de una buena coreografía-

Moviéndose un poco realizaba algunos pasos de baile, mismos que replicaban aquellos cadáveres de niños que se levantaban una vez mas y comenzaban a atacar a la joven, quien se percataba que habían guardado la electricidad en sus cabellos por lo que con cada golpe que le daban, recibía ella misma una descarga eléctrica.

- Y quien sabe lo que es justicia? Nadie po ejemplo lo que yo estoy haciendo es JUSTICIA...permito que estos pobres seres no queden en el olvido y vivan una vida, tal vez no la mejor o la de un cuento de hadas pero al fin y al cabo una vida-

Después su atención se centraba en Kevin y algo le hacia suspirar.

- Vaya, creía que el observar que las explicaciones humanas sobre situaciones que ellos mismos desconocen eran erróneas, habían dejado de confiar en ellas, pero veo que no-

De manera inmediata aquellos a los que el grupo llamaba zombies se paraban nuevamente y continuaban con su ataque hacia el chico quien era golpeado varias veces, mientras uno de ellos trataba de arrancarle la cabeza con furia.

- No, niño malo, malo...no le arranques la cabeza, quiero otro columpio y el tiene las condiciones para serlo-

La criatura obedecía de inmediato dejándolo en el piso, mientras se iba a atacar a los demás.

- Y que tenemos aquí a una niña muy escurridiza pero hasta cuando...-

Sin darse cuenta Mae y su bestia habían sido llevadas hacia una zona de escombros, de las cuales surgían varias manos que tomaban presa a la chica y una de ellas comenzaba a estrangularle, mientras unas manos oscuras como de sombra detenían a su pequeña bestia y comenzaban a tratar de jalarla hacia el piso como si quisieran llevársela a otro sitio.

- Los espíritus tienen hambre y tu bestia les es deliciosa y atractiva niña-

Riendo a carcajadas miraba su alrededor y solo posaba sus ojos en Eitan un momento ya que cuando iba a dictar una orden, llevaba una mano a su rostro y comenzaba a gritar y a negar con la cabeza.

- No, no, no, NO, NOO, NO, NOOOOO, NO, NO, NO, NOOOOOO AHORA NO, MALDITA SEA! NOOO NO QUIERO VERLOS, NO QUIERO!!!!-

Si querían eliminar al grupo de enemigos que aun quedaban, esa era su oportunidad ya que aquellos seres reanimados, perdían fuerza y poder mientras que Rania era cubierta por una columna oscura a manera de blindaje, por lo que debían actuar rápido y en dado caso reagruparse y alejarse del sitio para planear como hacerle frente a la joven apóstol.

---

Acciones:

- Acabar con los seres reanimados definitivamente.

- Reagruparse, esconderse y tratar de decidir como atacaran a Rania.

- Si alguno antes de reagruparse desea preguntarle algo a la Apostol, puede hacerlo.

Todos escribió:

Durante aquel enfrentamiento Omeny escuchó aquellas palabras de Rania, frunció en ceño y le miró con enfado.

-Tienes razón y me alegro. ¡Me alegro que Noah esté a años luz de ser un bailarín vanidoso y petulante como tú!-

Otra de las razones por cual a la chica le gustaba el peliceleste, su sencillez.

-¿¡Qué crees!? Aquellos dos Guraks se equivocaron, no saben llevar el ritmo y están a destiempo.-

Omeny debía llevar a acabo su compensación, terminó abrazando a un zombie, después de tres segundos y dar un grito por el susto, lo lanzó lejos, pero la apóstol ya había hecho su movimiento un grupo de niños la rodeo y le atacaban con descargas eléctricas de la misma intensidad con que habían sido enviadas.

Omeny intentaba cubrirse, pero no se atrevía a hacerle frente a esos niños,

-¡No puedo, no puedo!-

La estaban haciendo retroceder, pero debía hacer algo. Sus ojos grises debían ver la realidad, por dura y cruda que fuera, aquellos ya no eran "niños" ya no tenían esas chispa en sus ojos, ni siquiera esa alegría en sus rostros.

Su metamorfosis dio inicio una vez más.

Spoiler:

Después de un fuerte relincho y parándose sobre sus cascos traseros, la chica se abría camino entre aquellos seres, con ayuda de su cabeza les arrojaba lejos, su intención era que cayeran sobre los demás.

-¡No se atrevan a tocar a Kevin!-

Galopó en su dirección pateando algunos Guraks.

-¡Chicos, esa tipa está desquiciada, debemos pensar en algo mejor!-

Embistió a aquellos seres que habían golpeado a Kevin y subió en ella.

-¡Saldremos de aquí, Amanda-sempai, tempo fuera! Debemos de armar una mejor jugada.-

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Kisa escribió:

Iwata Mae

La rubia veía con horror los movimientos del ejército de Rania y como iba en contra de sus amigos, pero no tuvo mucho tiempo de pensar. Cuando se dio cuenta, numerosas manos muertas la estaban tomando a ella y a su bestia, y una le apretaba muy fuerte el cuello. Le comenzaba a costar respirar, sumado a la desesperación por ayudar a sus amigos.

-N-no… -intentaba salirse como podía, en su último esfuerzo cerró los ojos con fuerza e hizo desaparecer a su bestia, para no perjudicarla ni a sí misma, después de todo era su bestia interior.

Mae y los demás tuvieron suerte, un momento de locura invadió a Rania quien gritaba con desesperacion y provocaba que su propio ejército se debilitara, lo suficiente como para que la rubia suelte un par de disparos a las manos putrefactas y pudiera salirse. Al hacerlo, no dudó en disparar contra cualquier criatura que no fuera uno de sus compañeros. Disparaba con rapidez y sin piedad, cuidando de que ninguna intentara acercarse más de la cuenta a ella o a alguien más de sus amigos.

-Omeny! -exclamó, aun algo afónica, al oír la voz que provenía de aquel caballo, asintió con rapidez y se alejó un poco, siguiendo el galope de la chica.

Se dejó caer en el suelo unos segundos, su rostro tenía rasguños por doquier y le costaba aun respirar. Miró a todos asegurándose de que estuvieran medianamente bien.

-¿Qué podemos hacer? Ese ejército no muere jamás! -se quejó, mirando a todos- Nos salvamos por ahora porque se ve que está psicótica o no sé...

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Amanda Grudke

Amanda no tuvo mayores problemas en deshacerse de esas bestias, dadas su habilidades. Sin embargo, la cantidad que la rodeaba era tan grande que pasó desapercibida, pero no descansó ni un segundo. A pesar de ello, podía mantener su vista en sus alumnos, cuidando que la mujer no cause un daño especialmente terrible a ninguno y analizando los poderes de la apóstol.

-¿Qué es lo que te sucede Rania...? -se autopreguntó al ver la defensa que rodeaba a Rania en el momento en que esta se ponía a gritar. La analizó unos segundos, pero Omeny le llamó la atención.

La pelivioleta asintió con firmeza.

-Retirada! -exclamó y se apartó a toda velocidad junto a los demás, para que así pudieran tener un respiro y pensar bien en qué hacer. Una vez todos estaban allí los miró de forma analitica y bastante pensativa.

-Como se dieron cuenta, Rania es una nigromante… y nuestra mayor desventaja, es que nunca se cansará, porque el ejército puede combatir años así si ella lo desea -comentó, sin ahondar mucho más pues es todo lo que había averiguado por el momento. Suspiró una vez para volver a retomar la palabra, la pelea también la había dejado agitada.

-Sería una pérdida de tiempo que gasten sus mejores técnicas con los muertos, porque revivirán una y otra vez. Intenten darle su mejor golpe a ella y vemos qué sucede… aunque me inquieta esa reacción que tuvo, quizá ahí esté su punto débil -mencionó, aunque con cierta tristeza. Los gritos de la chica revelaban algo pero ¿qué era?

Eitan Chassier

Como si la mirada de la necromancer le llamara, el pelilila cruzó miradas con la apostol por muy cortos segundos.  Ante el griterío, no comprendía a ciencia cierta el por qué tanto escándalo.

Ora, ora! ¿Qué demonios te pasa, loca?

Chilló en voz alta para que la mujer le escuchara. En ese instante, estuvo cerca de ser atrapado por otro zombie. Se giró y le plantó un buen puñetazo para hacerlo retroceder y perforarlo así con su cuchilla a distancia. A la par, su bestia en forma de león pequeño le ayudaba, mordisqueando todos los enemigos que estuvieran cerca. Al final, Amanda dicta retirada junto con Omeny. Eitan se vio receloso por cumplir aquella orden... Miró primero a la enemiga con molestia y luego se marchó, deshaciéndose de cuanto enemigo podía alcanzar en su trayecto. Ya reunido con los demás, los presentes comenzaban a intercambiar información. Estuvo oido alerta a la explicación de Amanda.

Ne... No sé qué sea, pero esa psicópata me estaba mirando antes de andar de loca. Le caí mal, es obvio.

Añadió y se sentó en el suelo con las piernas en cruz para descansar unos instantes.

Kevin Iruka

Había zombies por todos lados, Kevin no paraba de disparar con su ballesta, pero con que objetivo si se volvian a levantar, escuchaba que Rania decia algunas cosas aunque le sonaban bastante incoherentes, a diferencia de otros apostol que decían cosas que lo hacían dudar, luego le dijo algo sobre las explicaciones humanas que no termino de entender.

Varios de los zombies se le venían encima, recibio unos cuantos golpes que lo hicieron caer al piso bastante dolorido, y uno de ellos sostenía su cabeza con fuerza como si la quisiera arrancar, el dolor era insoportable, hasta que la chica le dijo que pare, lo quería usar de columpio como al otro niño.

Trataba de levantarse pero había quedado algo aturdido, Omeny aparecía transformada en caballo, y despejaba a los zombies que quedaban cerca del chico, Kevin aprovecho se levanto como pudo y se subio arriba de la chica, desde alli disparaba con su ballesta a todo cadaver caminante que veía cerca de ellos.

Se escuchaba la voz de Amanda gritando retirada, aprovecharon el momento de distracción del enemigo para alejarse un poco del lugar y armar algún tipo de estrategia.  Se bajo del caballo y escucho lo que decía Amanda con atención, escribio en el diario y arranco la hoja para darsela a la maestra.

-- Quizás puedo acercarme a ella con mi invisibilidad y tratar de acertar algún golpe.

Se quedo escuchando la opinion de los demás y ver que estrategia iban a armar al fin y al cabo.

TODOS escribió:^^

Gabrielle Cohen O.

Una vez que logró superar la sorpresa y el miedo inicial, Gabrielle escupió molesto cuando la loca le dirigió la palabra, le desagradaba aquello. Los muertos debería descansar en paz se dijo, elevó una plegaría y tuvo que hacer frente a la nueva embestida que le reservaba Rania. Sus enemigos volvían de la nada a la que les había mandado... aunque, nunca se había deshecho de ellos.

Por unos breves instantes notó que Rania debía dirigir su vista y las manos para que los enemigos se volvieran a mover. El problema fue que se los cuerpos en llamas lo comenzaron a acosar, dio un pequeño grito ahogado pero no iba a retirarse, aunque en ese momento no había muchas alternativas. Las llamas le chamuscaron, pero no hizo ningún gesto de dolor, trataría de aguantar lo más que pudiera, pero eran demasiados así que hubo un momento en que no pudo ante la cantidad y lo golpeaban, iba a caer ante la cantidad de enemigos cuando algo sorprendente pasó.

Rania había perdido la concentración lo que les dio la oportunidad de escapar y reagruparse tal y como lo sugería Amanda. Antes que nada, revisó a Kevin, ya que también había tenido problemas, luego fue el turno de los demás. Tenían que organizar el ataque de nuevo. Cada uno había dado una sugerencia.

-Puede ser Kevin... pero no puedes ir solo- se rascó la cabeza y suspiró aunque se rió cuando Eitan dijo que era algo personal -No lo sé amiguis... pero evidentemente algo que hiciste la desquició. Recuerdo que cuando me atacó, ella miró hacia sus guerreros... y movió las manos, quizá si pudiéramos evitar eso tendríamos la oportunidad de contraatacarla

VIII. Rania

Respirando agitadamente aquella barrera oscura desaparecía y la joven cerraba los ojos con cierta furia.

- Ya...ya paso..aun se preocupan por mi...eso es hermoso y patético a la vez-

Exclamaba acomodando su cabellera y mirando a su alrededor para tratar de ubicar a sus enemigos, pero al notar que habían escapado suspiraba un poco.

- Quieren jugar a las escondidas...perfecto, entonces..-

Una aura oscura emanaba de ella y todos aquellos cadáveres que habían en Shangai, se ponían de pie, con sus voluntades y sus deseos solo enfocados en algo, servirle a Rania, no había distinción alguna, hombres, mujeres, ancianos, niños, bebe, todos estaban a su servicio.

- Vayan, ustedes conocen mejor su ciudad que cualquiera, les sera fácil encontrarlos-

La armada de seres reanimados asentían y comenzaban a moverse por toda la ciudad, era como si extrañamente después de toda esa destrucción, sus habitantes volvieran a sus labores cotidianas, algunos removían escombros, otros entraban y salían de edificios.

- Mmmm, ya se que servirá mas-

Concentrándose nuevamente y girando dos veces, dos masas de energía aparecían a su lado, siniestras y oscuras como sombras, sin embargo adoptaban una forma diferente.

- Espíritus de los Caídos, búsquenlos y abran el paso a mi ejercito-

Sonriendo malvadamente ambos seres espectrales desaparecían del sitio y se fusionaban con el ambiente, mientras la nigromante observaba un anillo en su mano y suspiraba.

- Debo deshacerme de ti...próximamente le pediré a Varsovia me ayude de nueva cuenta-

Comentaba para si misma a la par que toda su armada se dedicaba a la búsqueda de sus rivales. A su vez el periodo de descanso de Arrows finalizaba y en el lugar donde se encontraban eran rodeados por varios seres reanimados que con señales y gritos indicaban donde los habían encontrado, atrayendo la atención de mas congéneres, dispuestos a desmembrarlos.

---

Acciones:

- Abrirse camino hasta donde se encuentra Rania, pueden luchar o ir esquivando sin luchar.

- Eitan tendrá la necesidad extrema de seguir comiendo carne de los seres reanimados

- Su post debe finalizar con su llegada a donde esta la nigromante y pueden cuestionarle o tratar de atacarle.

Eitan Chassier

Notó como Gabrielle respondía a algo que mostraba Kevin en su diario. Ni se preocupó siquiera por preguntar qué era lo que había escrito o al menos asomarse para enterarse. Sacó de su bolsillo un dulce de menta y lo introdujo en su boca. Al estar más tranquilo, su ansiedad por comer le era más notable, pero no entendía el por qué si acababa de darle una buena probada a uno de aquellos muertos. Pensó que con la recién cena desagradable estaría satisfecho al menos por unos días, pero aquella sensación de vacío en su estómago comenzaba a fastidiarle de nuevo. Sacó otro caramelo y lo introdujo después del primero... No sentía sus verdaderos sabores (al menos no por gusto) pero quizás eso ayudaría a contrarrestar algo de esa ansiedad. Enfocó sus orbes en el rubio que ahora le hablaba.

Ora. Yo sólo pateé traseros de zombies como ustedes. Nada del otro mundo como para que se le moviera su tornillo suelto. Ni siquiera toqué a esa zorra!

Dijo, mintiendo en parte. Si no habían visto lo que había hecho, le convenía.

Está loca!

Opinó. Luego que trascurrió un rato, comenzaba a sentir un intenso olor a... comida. Sintió como su estómago ardía, quizás por los ácidos preparados para recibir a lo que originaba aquel "delicioso" aroma. Eitan, aún sentado y sin ver a los zombies que se aproximaba por detrás, puso ambas manos en el piso, a cada lado. Como si quisiera aferrarse al suelo para contenerse, cierra sus puños llevándose pequeños escombros que sus dedos encontraban de camino. Se mantuvo sentado e inmóvil aún cuando ya a pocos metros los enemigos se aproximaban.

Justo al momento en que el primer zombie estaba cerca por agarrarlo, abrió aún más los ojos de golpe... No podía contenerlo más. Retrocedieron uno tras otro varios de aquellos seres muertos que le rodeaban. Eitan se había transformado en cachorro y estaba arremetiendo con violencia contra los que podía alcanzar. Arrancaba con sus afilados dientes de los cuellos más apetecibles, mientras que con otros enemigos, los embestía para hacerlos caer y dejarle vía libre para morder a otro de carne más "tierna". Parecía nuevamente fuera de sí, con su consciencia de "bestia" dominando la situación. En aquella forma de animal, la sensibilidad por la comida era mucho mayor a cuando mantenía su forma humana. En la distancia, su olfato percibió como tibia y apetecible sangre emergía de una de las heridas en el pecho de otro cadaver. Sin poderlo contener, corre velozmente a 4 patas hacia su presa y estando cerca saltó para embestirle y hacerle caer. En el piso, saltó sobre aquel cuerpo de mujer de ropas rasgadas y ensangrentadas. Eitan de cachorro le miró fríamente y sin compasión, quizás producto aún de su estado de hambruna. Usando de nuevo sus fauces, terminó de abrir la herida en el pecho de la mujer zombie. Con sus patas, terminó de separar unas costillas para abrirse paso hacia el inactivo corazón que allí estaba y de una gran mordida, lo arrancó de su sitio. Delicioso... un sabor que le causaba placer. La sangre restante chorreaba de aquel órgano mientras el pequeño león lo masticaba. Varios de sus pelos que antes eran blancos, se tiñeron de rojo intenso. Se relamió al tragar y se acercó de nuevo a comer más, pero ya otros zombies se acercaban. Un poco más dentro de sus cabales por aquel aperitivo, se alejó corriendo para hacer distancia y siguió embistiendo, pero ésta vez procuraba avanzar a nivel de los demás.

Después de una buena tanda de lucha, acaba de nuevo en terreno de Rania. Adopta su forma humana al estar cerca a los demás, con su boca, parte de su mejilla y manos algo manchadas en sangre. Automáticamente se retira las manchas en su boca, mientras su lengua notablemente se paseaba por alguno de sus dientes.

Ne, ne! ¿Acaso no tienes algo mejor qué hacer aparte de joder?

Preguntó, un poco molesto por la situación.

Gabrielle, Eitan, Rania escribió:

Kevin Iruka

Estaba claro que el objetivo era llegar a Rania, no tenía mucho sentido luchar contra esa horda de zombies, primero que eran muchos y segundo ya estaban muertos así que rematarlos no iba a ayudar mucho.  Gabrielle me pedía que no vaya sólo pero nadie tenía la habilidad de hacerse invisible como yo, así que eso me tocaba a mí, iba a ir haciendome invisible hasta llegar a ella, aunque apareciendo en ciertos lugares estrategicos, escondites para que no me vieran, después de todo la invisibilidad no duraba tanto así que lo iba a tener que hacer en intervalos.  Además Eitan estaba transformado en cachorro y no paraba de comer partes de zombies realmente no quería estar ni un minuto mas cerca de esa bestia.

No quedaba tiempo para más, nos habían encontrado varios zombies y empezaron a gritar para que todos los demás vengan hacia aca, era ahora o nunca.  Saque mi ballesta y empece a correr mientras disparaba a los zombies que me obstaculizaban el camino hacia Rania...

Baje a tres en ese trecho, uno me salio del costado y logre esquivarlo con un giro, para seguir corriendo y disparando, salte arriba de un auto quemado para tener mejor visión de los blancos que seguían en mi lista, dispare varias veces desde allí acertando a varios de ellos para luego saltar del auto y meterme adentro de un edificio, era el momento de usar mi habilidad, así que active Desilusion y me hice invisible; salí por otro sector del edificio, de esa manera me habían visto entrar pero no salir, deje de correr para ir esquivando zombies mientras no me veian gracias a mi habilidad, y no chocarme con ellos, estaba todavía alejado de Rania, pero mi objetivo no era ir de frente, sino ir por su derecha, por lo tanto no me dirigía a ella sino a un edificio que divisaba a varios metros, el cual me iba a dejar exactamente a su derecha, aunque todavía bastante alejado pero tenia una idea.

Una vez llegue al edificio, me metí en el, ya que me quedaba poca invisibilidad, subi varias escaleras en su iterior, tuve que esquivar mas de una ves las llamas que habían en el edificio, hasta llegar a la terraza tendría unos tres pisos, allí quede visible, varios zombies se me venían encima, invoque a Poseidon, así había bautizado a mi bestia interior, me daba cosa no ponerle un nombre, salte en su lomo antes que los zombies me alcanzaran, al mismo tiempo que ella usaba su habilidad Domain y grandes galones de agua caían sobre la terraza haciendo que los zombies sean arrastrados por el agua volandolos del edificio, una cascada de agua caía sobre una de los costados del edificio

Mi bestia se lanzo sobre aquella cascada, el agua se dirigia hacia Rania a gran velocidad,  por su derecha, puesto que el desnivel era para aquel lado, Poseidon nadaba por el agua que de a poco era absorvida por la tierra, cuando ya no quedara casi nada mi bestia iba a tener que volver a mi interior.

Cuando me acercaba a mi objetivo pricipal, mi aura empezo a brillar con fuerza, como nunca antes, de un azul intenso marino, que hacía que me mezclara con el agua, me sentía mas vivo que nunca, la adrenalina recorría mi sangre. volví a activar una vez mas mi invisibilidad, así Rania solo podría visualizar el agua que se le venía encima, y a Poseidon.  Prácticamente encima de ella, apunte mi ballesta, y empece a disparar antes de que el agua se disipará y también mi invisibilidad... algo me sucedía, un sentimiento extraño recorría todo mi cuerpo, aquel niño que usaba de trono, su llanto, su sufrimiento, estaba solo en aquel lugar, sumergido en la oscuridad, como muchas veces me he sentido.

Al mismo tiempo que mis flechas se dirigian a Rania gritaba.

-- Deja a ese niño en paz!!  No se merece ese sufrimiento, nadie se lo merece!!

No podía creerlo, las palabras salían por mi boca... estaba hablando, al fin estaba hablando, como era posible.

Todos escribió:

Su escondite fue descubierto minutos después.

-¡Ahí vienen! Se terminó el medio tiempo. -

En verdad la habilidad de Rania era increíble, aquellos seres parecían más fuertes cada vez. Se fue abriendo paso junto con los demás con ayuda de su arma.

De momento observó las acciones de Eitan, en verdad parecía otro.

-¡Peter pan, no pierdas el camino!-

Le gritó para intentar que no olvidara quien era y no se dejara dominar por aquellos cambios que presentaba. Llegó hasta Rania e hizo uso de su habilidad -Dissonance- centró aquellas ondas de pequeñas partículas en su pie izquierdo y lanzó un cañonazo hasta su rival.

-¡Ya fue suficiente! ¿Qué es lo que pretendes causando todo eso?-

De pronto una vocecita que nunca antes había escuchado también le gritaba al chica. Para sus sorpresa era Kevin el más pequeño de Arrows.


-¡KEVIN HABLO, KEVIN POR FIN PUDO HABLAR!-

La chica presentó una mezcolanza de emociones en aquellos momentos. No podía bajar la guardia aún.

TOdos escribió:^^u

Gabrielle Cohen O.

Mientras trataban de ponerse de acuerdo su escondite había sido descubierto, ahora tenían que organizarse. Exhaló, todos estaban listos para luchar y él no se iba a quedar atrás ya que sus demás hermanitos eran bastante alocados y mucho menos iba a abandonar a Eitan. Había fruncido el ceño al ver que parecía intranquilo y le hizo sentir que le mentía. Ya luego hablaría con él. Al lado de sus hermanitos corrió a hacerle frente a Rania. No vio a Kevin, supuso que esperaría el momento adecuado para atacar.

-¡Eitan!- gritó al chico, parecía disfrutar ser un come carne pero la que le importaba era Rania ¿Qué debía hacer para descontrolarla? No se dejaba dominar como Eitan... -¿Por qué decidiste que las personas debían desaparecer? ¿Qué te hicieron para ser tan cruel? - preguntó con sus hermanos pero al igual que Eitan no atacó, se mantenía a la defensiva para ayudar a los demás en caso necesario.

Pero se le cayó la quijada, Kevin estaba hablando, le sonrió, esperaba que el chico estaba más centrado. Le puso una mano en el hombro a Eitan y luego le despeinó. No estaba solo, todos lo ayudarían.